A pesar de haber sufrido una demora en el vuelo que nos tenía que llevar a Tivat desde Belgrado, que el equipaje llegó con demora y que tuvimos que cambiar de planes cuando se nos rompió el móvil, nuestro viaje a Montenegro fue estupendo. Hubo cosas que modificamos sobre la marcha. Pero los viajes son así. Tú los organizas y luego, en destino, los hacer lo mejor que puedes.
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Viaje a Montenegro de 9 días en coche
Nosotros somos lentos cuando viajamos. Siempre vemos viajeros que en el mismo tiempo que nosotros hacen más cosas (o lo mismo que nosotros en menos tiempo). Pero a nosotros nos gusta tener nuestros ratos de relax. Nos encanta disfrutar de las ciudades, pasear sin rumbo. Y sentir que no estamos pasando de puntillas por lo lugares. Que los estamos pisoteando pero bien.
Os digo esto porque puede que vosotros, en 9 días, tengáis tiempo para ver más cosas. O vete a saber. Igual sois más relajados aún que nosotros y no os da tiempo ni a completar el itinerario de nuestro viaje a Montenegro. Pero en principio y siempre que no viajéis con un caracol, es más que factible conocer en 9 días los lugares que ver en Montenegro que nosotros visitamos en nuestra ruta en coche por el país.
Día 1 – Bahía de Kotor
Este primer día de nuestro viaje a Montenegro llegamos al aeropuerto de Tivat desde Belgrado. Recogimos nuestro coche de alquiler, compramos la tarjeta SIM en el aeropuerto (ojo, os pedirán el pasaporte para adquirirla) y nos fuimos a nuestro alojamiento en Kotor, los S&P City Center Apartments. Unos apartamentos muy recomendables, con zona para estaciones, cerca de un supermercado y a unos minutos a pie del centro histórico.
Recordar que en Montenegro no hace falta cambiar dinero. Aunque el país no pertenece ni a la Unión Europea, el país tomó la decisión unilateral de adoptar el Euro para dar estabilidad a su economía. Con el visto bueno del Banco Central Europeo, el euro es la moneda oficial de Montenegro desde marzo del año 2002.
Tras hacer el check in, pusimos rumbo a Herceg Novi. Pasamos por Muo, Prcanj y Stoliv antes de llegar a Lapetane. Ahí cogimos el ferry hasta Kamenari. Funciona durante todo el día y nos costó 5 € por el coche con todos los ocupantes. Tras cenar en Herceg Novi, regresamos a nuestro apartamento en Kotor, esta vez bordeando el lago por el lado contrario al que habíamos recorrido unas horas antes (de ese modo no hay que cruzar la bahía en ningún momento).
Día 2 – Bahía de Kotor
Había que conocer la otra parte de la bahía. Así que este día lo dedicamos a visitar Perast, sus islas y la villa romana de Risan.
Después de comer disfrutamos de uno de esos momentos estupendos del viaje a Montenegro. Nos pusimos el bañador y nos fuimos a bañar el la limpias y frescas aguas de la bahía. Nos acomodamos en una de las muchas plataformas que han construido sobre el mar, muy cerca de Prcanj, para tomar el sol y darnos algún que otro baño. Eso sí, a pesar del calor el agua estaba fría de narices.
Día 3 – Bahía de Kotor
Un buen madrugón me permitió dar un agradable paseo por la ciudad que estaba despertando. Algo muy recomendable si quieres disfrutar que ver en Kotor en soledad (los gatos son a esa hora los únicos compañeros en el paseo).
Después del desayuno, subida a la muralla de Kotor (8 €) y visita a la ciudad. Tras la comida, y con el calor que hacía, decidimos irnos a las que está considerada una de las playas más bonitas de Montenegro: Plavi Horizont, en la península de Lustica.
Día 4 – Mausoleo de Nejgos, Cetinje, Rijeka Crnojevica
Dejamos la bahía de Kotor por la carretera del Monte Lovcen. Un camino lleno de curvas en el que la panorámica va cambiado conforme se asciende. Un carretera tan mareante como atractiva. Si eres de los que no soportan las curvas, no olvides llevar Biodramina en la maleta.
Desde allí pusimos rumbo al Mausoleo de Nejgos. La tumba está en el Parque Nacional de Lovcen (entrada por vehículo 2 € y entrada al mausoleo 5 € por persona). Realmente las vistas son la mejor de las razones para visitar este emblemático lugar.
La siguiente parada fue en Cetinje. Una agradable parada que nos permitió olvidarnos durante unas horas del turismo de masas y recorrer las tranquilas calles de la antigua capital. Visitamos, entre otros lugares, el Museo del Rey Nikola (entrada 5 €). Y nos tomamos unas enormes cervezas a la mitad de precio que en Kotor.
Cuando caía la tarde llegamos a nuestro alojamiento a 5 kilómetros de Rijeka Crnojevica. Un establecimiento sencillo pero con una bonita ubicación: S&M Apartments.
Día 5 – Rijeka Crnojevica, Budva
Dedicamos la mañana a llenarnos los ojos de los preciosos paisajes que rodean Rijeka Crnojevica. La naturaleza aquí es un regalo de los que se reciben en un viaje a Montenegro. Cualquier mirador ofrece unas panorámicas fascinantes del montes y el río. También paramos en el pueblo para dar una vuelta y ver el sencillo edificio que era la residencia de la familia real cuando iba de vacaciones.
Desde allí pusimos rumbo a la gran ciudad de Budva. Tras dar con nuestro apartamento (Chiron Apartments) y dejar las cosas, nos fuimos a una de las grandes playas cercanas a la ciudad: Playa de Jaz. Un gran arenal que en septiembre no está demasiado concurrido.
Día 6 – Budva
Cuando te levantas con ganas de descubrir una ciudad y no para de llover, pues toca coger el paraguas y aguantarse con lo que hay. Eso nos pasó en Budva. La ciudad estaba llena de turistas (como no se podía ir a la playa, parece que todo el mundo se fue de turismo cultural). Aunque dejó de llover, el día estuvo gris, lo que no nos ofreció la cara más bella de la ciudad.
Dimos un paseo por la costa y luego, en coche, subimos hasta el Monasterio de Podmaine. Como seguía sin salir el sol, pusimos rumbo a otros lugares que encontramos en Google Maps, porque no hacía día para ir a la playa y Budva ya no daba más de si. Terminamos viendo el Monasterio Duljevo y un olivo de 2.000 años considerado el más viejo de Europa. Se encuentra en la localidad de Ivanovici.
Día 7 – Sveti Stefan
Este día lucía el sol, el cielo estaba azul y era sin duda el día perfecto para disfrutar de una de las playas más bonitas de las que disfrutar en un viaje a Montenegro: Sveti Stefan. Está bastante cerca de Budva, por lo que es un excursión perfecta para disfrutar de un día junto a la Adriático. Eso sí, recordad que la playa tiene muchas piedras y que merece la pena pagar por unas tumbonas (nos costaron 20 € con sombrilla incluida, se puede pagar con tarjeta de crédito).
Antes de ir a la playa dimos un agradable paseo por el Monasterio Praskvica. Su cuidados jardines, sus dos pequeñas iglesias y las vistas sobre la costa lo convierten en bonito lugar que visitar en un viaje a Montenegro.
Día 8 – Virpazar, Podgorica
Dejamos la costa para ir hacia el lago Skadar. Allí nos íbamos alojar en Plamenatz studio apartments, un B&B a unos 35 minutos a pie del centro de Virpazar, muy rural. Todo campo, huertos y vacas. Nuestra intención era contratar una excursión por el lago, pero de nuevo, la lluvia.
Así que lo dejamos para el día siguiente y pusimos rumbo a Podgorica. Algo que en principio no estaba en nuestro planes pero que se convirtió en una visita interesante con una de las mejores cenas del país en el restaurante Pot Volat. Eso sí, este fue el día que nuestro móvil dijo adiós. Nos quedamos incomunicados y sin gran parte de nuestras fotos.
Día 9 – Lago Skadar, Podgorica, Albania
Tras desayunar nos fuimos hacia el centro de Virpazar donde ya habíamos concretado con una empresa la excursión de dos horas por el lago (Monte Frog, 60 € barca para dos personas con bebidas incluidas y guía en inglés). Un recorrido muy agradable viendo un buen número de aves y navegando casi siempre entre nenúfares. Además, el vino que nos ofrecieron nos hizo olvidar un poco el disgusto del móvil.
Eso sí, al terminar la excursión decidimos cambiar nuestra ruta para regresar a Podgorica y ver si era factible arreglar el teléfono. Pasamos varias horas en la ciudad, y al final no quedó otra que comprar un móvil nuevo antes de poner rumbo a Albania.
Ese fue el último día de nuestro viaje a Montenegro. Nuestra ruta no terminó como nos hubiera gustado ya que nuestro recorrido debía haber ido hacia la costa para ver la fortaleza de Stari Bar antes de cruzar la frontera albanesa. Fue uno de los lugares que se quedaron en pendientes en nuestra lista de sitios que ver en Montenegro.
Seguro para un viaje a Montenegro
No olvidéis antes de emprender vuestro viaje a Montenegro contratar un seguro de viaje con buena cobertura sanitaria (recordar que en este país la Tarjeta Sanitaria Europea no sirve para nada) y que incluya conceptos como repatriación o demora en la llegada del equipaje.
Desde hace años yo contrato siempre mi seguro de viaje con Heymondo. Su web ofrece distintos tipos de seguros con tarifas que varían según la cobertura deseada o el destino del viaje. Os recomiendo con toda confianza contratar con ellos el seguro para cualquier de vuestro viajes. Además, por ser lectores del blog, accediendo desde el anterior enlace conseguiréis un 5% de descuento (y hasta un 15% en distintas campañas a lo largo del año, como por ejemplo en Semana Santa).
