Sin el encanto medieval de Tallin o la impresionante arquitectura art nouveau de Riga, la capital lituana, a pesar de poseer el mayor casco antiguo barroco de Europa, parece estar a la sombra de las capitales de sus países vecinos. Los visitantes que llegan a ella lo hacen en muchos casos por completar el recorrido por Estonia, Letonia y Lituania. Sin embargo Vilnius por si sola merece ser visitada para recorrer sus calles, descubrir su historia, degustar la gastronomía de Lituania y entender porque es conocida como “la ciudad de la iglesias”. Nosotros dedicamos tres días a conocer esta ciudad y en base a nuestra experiencia os cuento qué ver en Vilnius.
Tened en cuenta que nuestro viaje fue en diciembre, hacía frío y los días eran cortos, sin duda aquellos que decidan viajar a Lituania en verano podrán aprovechar mucho más el día para recorrer la ciudad y descubrir todo lo que tiene que ofrecer.
Índice del artículo
Qué ver en Vilnius en tres días
Lo primero hay que decir que estamos en una ciudad compacta, se puede llegar caminando a casi todos los lugares de interés. Depende de los gustos de cada uno elegir qué ver en Vilnius o que lugares ignorar. Nunca está de más organizar la ruta por zonas, aunque inevitablemente pasaremos por los mismos lugares alguna vez.
Sobre todo si elegimos para comer, cenar o tomar algo lugares del casco antiguo de la ciudad, sin duda la parte más atractiva para el viajero en la capital de Lituania. Yo voy a separar que ver en Vilnius en tres zonas: ciudad nueva, Uzupis y casco antiguo. De este modo quedan rutas perfectas para visitar una parte de la ciudad cada día.
Qué ver en Vilnius: Día 1 – Casco antiguo
Es la parte más animada y atractiva de la ciudad. En ella están los monumentos más importantes de la ciudad y una buena lista de lugares que ver en Vilnius, sin duda es el lugar perfecto para comenzar a descubrir la capital lituana e irse haciendo idea de sus dimensiones, a la vez que uno puede ir tomando nota de cafés, vinotecas o restaurantes a los que acudir para tomar algo.
Puerta del Alba
Esta puerta marca el límite sur del casco antiguo siendo la única que se conserva intacta de las diez que tuvo la ciudad. A esto se añade en sobre ella se encuentra la Capilla de la Bienaventurada Virgen María, lugar de peregrinación de católicos y ortodoxos. En ella se venera un cuadro de la Virgen al que se le atribuyen distintos milagros.
Iglesia Ortodoxa del Espíritu Santo
Se trata de la principal iglesia ortodoxa de Vilnius y se la distingue con facilidad por sus cúpulas rosas. En el interior descansan los restos de los mártires San Antonio, San Eustaquio y San Iván.
Plaza del Ayuntamiento
Como su nombre indica, en ella está el Ayuntamiento, y en él la oficina de turismo de la ciudad. Las casas de colores o la cercana Iglesia de San Nicolás hacen de este rincón de la capital lituana uno de los más pintorescos de Vilnius.
Iglesia ortodoxa de Paraskeva
Se trata más bien de una capilla en la que se dice Pedro el Grande bautizó a un esclavo negro africano que más tarde se convertiría en el General Mayor Abram Petrovich Hannibal, bisabuelo del poeta ruso Alexander Pushkin. Junto a esta iglesia se instala cada día un pequeño mercado de artesanía.
Pilies Gatve
Se trata de la arteria principal de la parte antigua de la ciudad, es sin duda un lugar perfecto para sentarse a tomar una cerveza a la sombra de alguno de los edificios barrocos hay en ella y que forman parte de un conjunto único en el viejo continente.
Casa de los Signatarios
Está ubicada en el nº 26 de Pilies Gatve, y además de ser una importante muestra del barroco de la ciudad es conocida por haberse firmado en ella en el año 1918 una ley que otorgaba a Lituana la independencia, la cual solo duró un par de años pues en 1920 el país fue de nuevo invadido por los polacos. Se puede visitar el interior hoy convertido en museo, abren todos los días excepto los lunes.
Calle de la Literatura, la más curiosa que ver en Vilnius
Esta pequeña calle peatonal es uno de los rincones más peculiares que se pueden ver en Vilnius. Sus muros están decorados con objetos de diversa índole que sirven de homenaje a destacados literatos lituanos.
Universidad de Vilnius
Uno de los lugares que hay ver en Vilnius y que sorprenderá a más de uno es su universidad. Fundada en el siglo XVI los rusos la clausuraron en 1832, volviendo a ser centro de estudios en 1919 y permaneciendo como tal hasta nuestros días. El acceso es de pago para los visitantes, la taquilla está en el exterior del edificio, cerca del Palacio Presidencial, pero realmente nadie os pedirá vuestra entrada para poder visitar el laberinto de patios que se esconden tras los muros.
En total se pueden visitar 13 patios, cada uno de unas características y con una historia particular. El más impresionante de ellos es el Gran Patio, al cual se abren las puertas de la Iglesia de los Santos Juanes. Desde este patio cuyas paredes están decoradas con pinturas se accede al patio del Observatorio Astronómico, probablemente el más singular del conjunto universitario.
Sinagoga Coral y barrio judío, imprescindible que ver en Vilnius
Seguramente no sepáis que Vilnius fue conocida como la Jerusalén del Norte, y es que la población judía de la ciudad era conocida en todo el mundo por su piedad y la fuerza de su fe. Sin embargo llegó la Segunda Guerra Mundial, y con ella los campos de concentración, el genocidio y el final del pueblo judío en Lituania. Actualmente no hay mucho que ver en Vilnius de lo que fue el barrio hebreo, sin embargo hay algunos rincones que aún se pueden visitar recordando la historia de los judíos y de la propia Vilnius:
- Sinagoga Coral
- Casa del gaón Elijahu Ben Shlomo Zalman
- Judenrat
- Calles Zydu y Gaono
Qué ver en Vilnius: Día 2 – Plaza de la Catedral y Ciudad Nueva
La mayor de la plazas de la Vilnius se encuentra justo en el límite del lugar donde termina el casco antiguo de la ciudad para dar paso a la ciudad más moderna. Las calles adoquinadas y estrechas dan paso aquí amplias avenidas con bulevares y muchas zonas ajardinas. También es el lugar para visitar algún curioso centro comercial y museos que no dejarán indiferente a nadie.
Catedral de Vilnius
Este enorme edificio blanco es un emblema nacional. Fue convertida en galería fotográfica por los soviéticos, pero en 1989 fue de nuevo consagrada y desde entonces ni un solo día se ha dejado de celebrar misa en ella. En su exterior destacan sin duda la fachada principal y la estatuas que la rodean, pero es en su interior donde se encuentra la joya del edificio, la Capilla de San Casimiro, patrón de Lituania.
Plaza de la Catedral
Es una enorme espacio que se aprovecha en Navidad para instalar el mercadillo navideño de la ciudad, y entre las cosas que hay que ver en Vilnius sin duda algunas se encuentra aquí, como el campanario, único vestigio del pasado de este lugar, o el Palacio Real, el cual ha abierto sus puertas recientemente tras la reconstrucción que le ha devuelto la gloria que le robaron los rusos al destruirlo a finales del siglo XVIII. Dominando la plaza, la Colonia Gediminas y el Museo del Castillo Alto. A ella se puede subir dando un paseo o utilizando el funicular que se encuentra en la cara opuesta a la plaza.
Museo Nacional de Lituania
En su puerta se puede ver la estatua del único rey que ha tenido Lituania, Mindaugas, y en su interior el visitante podrá ver distintas exposiciones sobre la vida del país desde el siglo XIII hasta las Segunda Guerra Mundial.
Gedimino Prospektas
Se trata de la avenida más elegante de la ciudad y recorrer sus 1750 metros de longitud permite al visitante llegar desde la Catedral hasta la Iglesia ortodoxa de la Aparición de la Santísima Virgen. En esta avenida se encuentran algunas de las cosas que hay que ver en Vilnius, como las Tres Musas que se elevan enigmáticas coronando la entrada al Teatro Nacional de Lituania o el centro comercial Gedimino 9 ubicado en un antiguo edificio histórico de la ciudad.
Museo de las víctimas del Genocidio
Este museo es sin duda uno de los lugares más impactantes que se pueden ver en Vilnius. Sus salas se encuentran en la antigua sede de la KGB en la ciudad y está dedicado a los miles de lituanos deportados, asesinados o encarcelados por la Unión Soviética desde la Segunda Guerra Mundial hasta la década de 196o. En el museo se repasa la realidad de la ocupación soviética y se puede bajar al sótano para ver parte de lo que fue la cárcel e incluso la sala de ejecución.
Museo del Holocausto
En una pequeña casa verde de madera de arquitectura tradicional lituana se visita una exposición que parece llevarnos al pasado, todo parece haberse parado en el tiempo y hace sentir al visitante la tragedia de todo un pueblo.
Qué ver en Vilnius: Día 3 – Uzupis
Al este del casco antiguo de la capital lituana se encuentra la República de Uzupis. Un lugar que nació en 1998 para rebelarse contra el orden social establecido. Además, en esta zona otra cosas que sin duda resultan bastante interesantes para el viajero.
Uzupis, el barrio más singular que ver en Vilnius
Se trata de un barrio que nació hace casi dos décadas como hogar para bohemios, artistas, okupas y rebeldes. Sigue siendo uno de esos lugares que hay que ver en Vilnius. El lugar ha mejorado con los años hasta convertirse en un barrio de moda, donde visitar lo último en galerías de arte. También en Uzupis hay que pasar por sus puentes sobre el río Vilnia (los cuales hoy lucen llenos de candados del amor). Buscar el ángel símbolo del barrio. O pararse en Paupio gatvé a leer la peculiar constitución de este rincón de la capital de Lituania.
Iglesia Ortodoxa de la Madre de Dios
Junto al río Vilna se encuentra está gran mole blanca cuyas cúpulas rojas no tienen la típica forma de bulbo tan característica de estos templos. Merece la pena entrar para ver su precioso interior en el cual se puede ver un iconostasio regalo del Zar Alejandro II.
Iglesia de Santa Ana, la más bonita que ver en Vilnius
Dicen de este templo católico de arquitectura gótica que es el más bonito de Vilnius. Con su fachada de ladrillo no hay duda de que se diferencia enseguida de otras construcciones de la ciudad. Justo detrás de Santa Ana se encuentra la iglesia de San Bernardino. Es una de la mayores construcciones góticas de Lituania.
Museo Galería del Ambar
Aunque a simple vista puede parecer una tienda sin más, lo cierto es que merece la pena entrar y bajar al museo del sótano donde además de conocer como se forma esta resina se pueden ver los restos de un antiguo taller de alfareros.
Colina de las Tres Cruces
Este mirador ofrece las mejores vistas de la ciudad, en él tres cruces son el homenaje a tres monjes crucificados en este emplazamiento. Lo que hoy se visita es una reconstrucción, ya que los soviéticos destruyeron el monumento original tras la Segunda Guerra Mundial.
Iglesia de San Pedro y San Pablo
Llegar a esta iglesia supone dar un paseo un poco más allá de los lugares más turísticos que se pueden ver en Vilnius, sin embargo acercase hasta ella al atardecer regala un bonita estampa de su sencilla fachada, la cual no hace imaginar el recargado interior barroco del templo.
Qué ver en Vilnius: mapa
¿Te animas a descubrir Vilnius?
Espero que la respuesta sea afirmativa pues esta capital del norte de Europa es un lugar lleno de lugares interesantes. Y en muchos casos también bastante peculiares. Si quieres saber más de esta ciudad, pasa por mi guía de Vilnius y encontrarás todos los datos para organizar un gran viaje a la capital de Lituania.
Por último, si os sobra tiempo en la ciudad o bien decidís pasar más días en Lituania, sugeriros una excursión hasta el castillo de Trakai. Seguro que os encanta pues no en vano es uno de los emblemas del país.
18 comentarios
Menuda rutaza!!! Me la guardo para cuando vaya que seguro será en breve. Muchas gracias por compartir!
Gracias a vosotros por leer… y espero que os sea de utilidad este post.
Cris, no he estado aún en los países Bálticos pero es cierto que tengo (o tenía) esa impresión que comentas que la típica ruta de Estonia – Letonia – Lituania como que Tallin y Riga la eclipsan y me atrae menos, como que la ves por completar pero por sí misma no iría a verla… Bueno pues menos mal que aquí estás tú con tu post para demostrarme lo contrario. Se ve que tiene un gran patrimonio y una historia muy interesante, me ha dado curiosidad lo de Uzupis, el barrio bohemio, no me lo perdería por nada. Gracias y a ver si pronto puedo ir a descubrir esos lugares desconocidos del norte.
Besotes
A mi me alegra haber conocido Vilnius antes que las otra capitales bálticas, así la he disfrutado y apreciado su belleza sin hacer esas odiosas comparaciones que a veces no podemos evitar.
Un abrazo
Pues con este detalle de recorrido no me hace falta comprar una guía para recorrer Vilnius! Ya marcaste lo importante.
Tallín me ha encantado. Supongo que Vilnius también me gustará.Parece genial por lo que cuentas.
Gracias por tu post.
Saludos Viajeros.
L.
No conozco Tallin pero estoy segura de que son ciudades bien diferentes, cada una con su propio encanto e historia.
Un abrazo
Caramba!! Anda que no tiene cosas para ver. Me guardo el post porque tengo claro que me hará falta tu detallada lista de visitas. Un abrazo
Carmen
La verdad es que Vilnius tiene un montón de lugares que visitar (y eso que en esta lista faltan algunas de las muchas iglesias que hay por toda la ciudad).
Un abrazo
Me parece que hay mucho más en Vilnius de lo que yo pensaba antes de leer el post. Tomo nota porque las capitales bálticas me gustan como escapada de unos cuantos días. Son destinos a tener en cuenta, sin duda.
Un abrazo.
Cristina.
Dicen que no es tan bella como Riga o Tallin pero a mi me pareció atractiva y muy interesante. Un abrazo
Pues has hecho un buen recorrido por la ciudad. Ayer estuve mirando fotos archivadas para hacer mi post (el lunes lo publicaré) y creo que me dejé algunos lugares por visitra, entre los que mencionas. Sobretodo, varios museos, que no los he encontrado en las fotos y tampoco los recuerdos. Creo que no visité ni el del Holocausto ni el de las víctimas del genocidio, por ejemplo.
Nuestra intención en principio era salir de la ciudad un día para visitar Trakai, pero al final había tantas cosas que hacer en Vilnius que decidimos quedarnos y descubrir la ciudad a fondo.
Nos encantan estas ciudades tan cómodas de visitar y aún más estas guías tan completas en la que se detalla qué hacer cada día. Muy buena entrada.
¡Saludos!
Gracias chicos, espero que algún día esto os sirva para conocer Vilnius. Un abrazo
Me gustan estas ciudades de las que a priori no tienes expectativas y que luego te sorprenden. Con este plan de tres días me queda muy claro cómo organizar una visita a Vilnius. Tengo muchas ganas de una escapada a esa zona. Pero creo que iré cuando haga mejor tiempo, para pasar frío no hace falta que me mueva mucho de casa.
Un abrazo!
Sabia decisión la tuya Mar, que para frío ya tienes mucho en Burgos.
Un abrazo
Creo que nunca he visto una Calle de la Literatura… Realmente, suena muy diferente.
Entrar en la antigua sede de KGB es otra de las experiencias que no es nada típica. He escuchado algo de la República de Uzupis; dicen que todo empezó como una broma, pero que al final incluso lograron cierta “independencia”, o mejor dicho, libertad para decidir cosas locales. Muy curioso.
Parece que Vilnius realmente tiene algo diferente que le distingue entre las capitales europeas. Apuntado queda como próximo destino, gracias por la guías:)
Sin ser una de esas ciudades que vuelven loca a la gente por su belleza, lo cierto es que Vilnius tiene una historia tan interesante como dura que yo conocía hasta que decidimos viajar a esa capital europea. Creo que merece la pena conocerla.