Últimamente han sido varios los viajeros que me han preguntado por Nepal, por si el país merece la pena si no se hace un trekking y si hay algo más aparte de Katmandú. Pues bien, yo le dediqué tres semanas a este país y no paré de hacer cosas, entre las cuales no se contaba ninguna salida por las rutas de montaña del país. Aquí comparto de entre mis recuerdos de Nepal el top de los lugares que me parecen merecedores de ser conocidos en un viaje a este pequeño gran país. Porque sin duda hay cosas alucinantes que querrás hacer en Nepal y que casi siempre quedan a la sombra de la capital del país. Y es que hay mucho que ver en Nepal más allá de Katmandú.
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Qué ver en Nepal
Lumbini
La ciudad natal de Buda está al sur del país, en el Terai. Este lugar está declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y allí se puede visitar además del lugar donde vino al mundo Buda y dio sus primeros , un gran parque en el que cada país budista ha construido un templo y una pagoda de la paz.. La mejor forma de recorrer el lugar: en bicicleta.
Pokhara
Subir hasta su pagoda de la Paz, remar en el lago junto al que está construida la ciudad, hacer parapente, visitar monasterios tibetanos, ver amanecer frente a los Annapurnas o cenar en alguno de los animados restaurantes a orillas del lago son algunas de las muchas cosas que se pueden hacer en Pokhara, punto de partida además de muchos de los trekking organizados, de esos que enseñan al viajero que hay mucho que ver en Nepal más allá de la capital del país.
Manakamana
Subir a este templo hindú en el teleférico de construcción austriaca que cruza las montañas de Nepal es toda una experiencia. Y llegar arriba para caminar junto a los hindúes que acuden a hacer a sus ofrendas para verse envuelto en el humo del incienso es parte de la experiencia del lugar, una de las más chocantes para el viajero, sobre todo cuando se llega por la parte de atrás del templo al lugar donde se sacrifican cabras y pollos… No apto para todos los públicos.
Chitwan
Uno de los mejores Parques Nacionales de Nepal. Tigres, rinocerontes, elefantes… Se pueden hacer safaris caminando, en jeep, en barca…. Y acabar el día metido en el río bañando a un paquidermo. Experiencias para todos los gustos viajeros en ese fantástico Nepal más allá de Katmandú.
Patan
Una de las ciudades medievales en los alrededores de Katmandú. Su lugar más interesante es Durbar Square con templos, palacios y un espacio en el que la vida discurre cada día al mismo ritmo que lleva siglos haciéndolo. En los alrededores un templo dorado, otro de cinco tejados y la posibilidad de ver de cerca a la kumari de Patan.
Namobuddha
Una de las cosas que cualquiera que visite Nepal quiere ver es el Himalaya. La cosa no es tan sencilla como parece, pero cerca de la capital hay algunos lugares desde los que las vistas pueden ser muy buenas (pero no hay garantía de que las nubes desaparezcan y dejen paso a las montañas). Nosotros elegimos hacer una noche en Namobuddha. Además de ver una pequeña estupa y pasear por la ladera de una montaña con vistas fabulosas pudimos contemplar el Himalaya mientras desayunábamos.
Changu Narayan
En una pequeña aldea, en lo alto de una colina, se encuentra el templo hindú de Changu Narayan, Patrimonio de la Humanidad. Está dedicado a Visnu y se considera el templo más antiguo de Nepal.
Bandipur
Se trata de un pequeño pueblo en la carretera entre Katmandú y Pokhara. Brinda al viajero la posibilidad de conocer una pequeña y poco turística ciudad cultural bien conservada. Las colinas alrededor de Bandipur son perfectas para hacer alguna ruta de senderismo.
Bhaktapur
La ciudad medieval mejor conservada de Nepal ofrece al visitante calles adoquinadas, plazas con templos y palacios, mercados artesanales y noches donde uno tiene que recurrir a una linterna para regresar al hotel si este se encuentra a las afueras de la ciudad. Sus habitantes son amables y discretos y atienden pequeños restaurantes y curiosas tiendas de artesanía o música.
El sur del Valle de Katmandú
Desplazarse al sur del valle de Katmandú da al viajero la posibilidad de conocer lugares como Pharping, donde los templos budistas están rodeados de montañas llenas de banderas de oración; Daskshinkali, uno de los templos hindues más importantes del país donde los fieles hacen sus ofrendas y luego se las comen guisadas en barbacoas hechas allí mismo; o Bungamati, pequeño pueblo que vive de la agricultura y cuya plaza es una de las más bonitas del valle. Sin duda un claro ejemplo de que más allá de Katmandú, hay mucho que ver en Nepal.
