Cuándo hace tres años viajé a Tenerife por primera vez el tiempo no fue benévolo con nosotros. Llovió mucho, cómo el día que visitamos por primera vez La Laguna. La recorrimos tapados bajo un paraguas. Caminamos por calles solitarias en las que el único sonido eran nuestros pasos y el agua al golpear puertas y ventanas. Descubrimos una ciudad solitaria a la que por suerte hemos podido regresar y ver bajo un cielo azul.
La primera vez y a pesar del mal tiempo, la ciudad me gustó. En esta segunda oportunidad me ha gustado poder disfrutarla sin tener un paraguas sobre mi cabeza que me dejaba ver solamente a medias. Sin embargo, en contra, que en las calles había tanta gente que le restaba ese encanto de ciudad solitaria que yo recordaba. En cualquier caso, con lluvia o sin ella, hay un buen número de lugares que ver en La Laguna.
Índice del artículo
San Cristobal de la Laguna
Conocida popularmente como La Laguna, esta población tinerfeña forma parte de los lugares Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde diciembre de 1999. Recorrer sus calles es un viaje al pasado. A una ciudad edificada en el siglo XVI cuyo casco antiguo ha mantenido su configuración original. En sus calles hay edificios nuevos. Pero también muchos que se han ido construyendo a lo largo de los siglos y que hacen de esta ciudad un museo al aire libre.
Esta bella ciudad tiene cierto aire colonial. Sus casas con fachada pintadas de alegres colores no trasladan al otro lado del Atlántico. A esas ciudades edificadas por los colonizadores como San Juan de Puerto Rico o Cartagena de Indias que hoy presumen de su pasado histórico y de calles donde el color es el rey. No en vano, el parecido es razonable, ya que La Laguna fue la primera ciudad construida dejando atrás la mentalidad de la Edad Media, y fue un ejemplo que se copió en América.
A pesar de su historia y patrimonio, La Laguna no está anclada en el pasado ni vive de las rentas. Es una ciudad que más allá del casco histórico se presenta moderna y joven. No en vano, ser ciudad universitaria le da mucha vida y los fines de semana tiene el mismo ambiente que otras ciudades tomadas por los estudiantes.
Qué ver en La Laguna
En La Laguna basta pasear sin rumbo para encontrar en el camino cada lugar que merece ser visitado. El casco antiguo son un puñado de calles. Es sencillo recorrerlo en un mañana. Pero si quieres visitar sus museos o iglesias con calma merece la pena dedicar algo más de tiempo a la ciudad.
Catedral de San Cristóbal de la Laguna
Se trata del edificio religioso más importante de La Laguna y uno de los que hay que ver en Tenerife. Su origen se remonta al siglo XVI, pero no será hasta 1819 cuando se convierta en Catedral. Su aspecto actual se debe a la reconstrucción que se realizó a principios del siglo XX, siendo su llamativa fachada neoclásica el único elemento que conserva de su antiguo aspecto. El interior es un edificio de estilo neogótico, con altas bóvedas de crucero.
Entre las obras de arte que guarda el templo el púlpito de mármol o el retablo barroco son probablemente las más destacadas. Si se tiene especial interés en conocer todo sobre la Catedral se puede realizar la visita turística con audioguía.
Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción
Entra las plazas del Doctor Olivera y de la Concepción, ambas peatonales, se puede visitar esta iglesia. El actual edificio es el resultado de la reedificación del templo en 1974 ya que en el año 1972 y debido al deterioro del tiempo, el templo sufrió el hundimiento de varias naves.
La iglesia consta tres naves, arcos de medio punto y artesonado de estilo mudéjar. En su interior merece la pena buscar la pila bautismal, de cerámica vidriada. En el exterior no hay duda de que su elemento más destacado es la alta torre de 28 metros que domina la Plaza de la Concepción y que, edificada en ladrillo, contrasta con el blanco del templo al que sirve de campanario.
Plaza del Adelantado
De esta plaza arbolada parte las calles del casco antiguo de la ciudad. Merece la pena hacer una parada en ella para descubrir los edificios que la rodean. En esta plaza se encuentran el Ayuntamiento, los juzgados y la Ermita de San Miguel. También en aquí está el Convento de Santa Catalina.
En el mismo lugar que estuvo la casa de Alonso Fernándes de Lugo, primer Adelantado (título otorgado por la corona castellana aquellos con destacadas dotes militares) y conquistador de La Palma y Tenerife. En este convento llama la atención su singular balcón con celosía. Perfecto para ver sin ser visto. Uno de los elementos más llamativos de la plaza es la fuente de mármol que adorna el centro del lugar. Procede de Marsella y se colocó en el lugar que ocupa en 1870.
Calle Obispo Rey Redondo, la más bonita que ver en la Laguna
Una de las calles más atractivas de que ver en La Laguna es la Calle Obispo Rey Redondo. Parte de la Plaza del Adelantado, y en ella, principalmente en su primer tramo, se pueden ver algunas de las casas señoriales más destacadas de la ciudad y que estuvieron habitadas por comerciantes y nobles.
La primera de las casas que se ven al entrar en la calle es la Casa del Corregidor, que fue residencia del gobernador civil. A su lado una bonita casa de color azul. Se trata de la Casa de la Alhóndiga, que fue cárcel, cuartel de la Guardia Civil y hoy está ocupada por dependencias municipales.
La Casa Alvarado Brahacamonte o de los Capitanes tiene la fachada pintada de un intenso color amarillo. Fue edificada en el siglo XVII y en su interior hay un bonito patio al que se abre la típica balconada canaria. Desde él se accede a la Oficina de Turismo de La Laguna. Merece la pena visitarla para recoger información o apuntarse a alguna de las visitas guiadas que realizan. En ella te informan de los lugares abiertos en el día que visitas la ciudad y sus horarios.
Calle San Agustín
Se trata de otra calle peatonal en la que ver algunas de las más impresionantes mansiones de La Laguna. Para mi es la calle más bonita de la ciudad, y me atrevería a decir que de Tenerife. A ella se abren las puertas de impresionantes casas señoriales. Algunas se han convertido en museos y otras son la sede de distintos estamentos de La Laguna.
Una de las fachadas más impresionantes que ver en La Laguna está en esta calle y corresponde a la Casa Salazar. Edificada en estilo barroco canario, esta mansión fue residencia de la familia que le dio nombre. Más tarde la ocupó el casino “El porvenir” hasta que posteriormente fue adquirida por el obispo Don Ramón Torrijos y Gómez para convertirla en residencia episcopal.
A día de hoy sigue teniendo esa función, pero sus puertas están abiertas a los visitantes. Y os aseguro que merece la pena cruzarlas. Nada más entrar se puede ver un sencillo patio con un fuente. A la derecha hay una puerta que lleva a otro patio lleno de flores y plantas tropicales. Es allí donde se puede ver uno de los más bonitos balcones canarios de la ciudad.
A poca distancia del Palacio Episcopal está el Museo de Historia y Antropología de Tenerife. Ocupa la Casa Lercaro y la Casa Saavedra. Entrar al museo no solamente permite disfrutar de la interesante muestra que aloja. También da la oportunidad de descubrir el interior de una casa renacentista canaria. Las estancias, patios y escaleras se han restaurado, pero manteniendo su estructura y muchos elementos originales.
Otro de los atractivos edificios que ver en la Calle San Agustín es el Instituto de Canarias Cabrera Pinto. Ocupa los que fue el Convento de San Agustín. De ese lugar se conservan el antiguo claustro y el patio interior. A la derecha del edificio que acoge el instituto está la antigua iglesia del convento. Por las ventanas huecas se puede ver que a pesar de que la fachada tiene buen aspecto, el techo ha desaparecido.
A pocos metros está otra de las iglesias que ver en La Laguna. Es la Iglesia de Nuestra Señora de los Dolores, y junto a ella, lo que fue el hospital del mismo nombre. Es fácil distinguir este templo por el color amarillo de su paredes y por la bonita puerta tallada que da acceso a la iglesia. La parte que fue hospital hoy día ha sido utilizada como biblioteca.
Real Santuario del Santísimo Cristo de la Laguna
Es uno de los lugares que no visitamos durante nuestro primer viaje a Tenerife. Y aunque en esta segunda ocasión si nos acercamos a él, lo encontramos cerrado por reformas. Mala suerte. Aún así, el paseo hasta el lugar, ubicado en uno de los extremos del casco histórico de la ciudad, nos llevó por la Calle Viana. Otra de esas calles que ver en La Laguna a la que se abren antiguas casas señoriales.
El Santuario se encuentra en la Plaza de San Francisco, plaza conocida popularmente como la del Cristo. Desde la plaza solo se distingue el campanario y el acceso al templo. Lo mejor está dentro: la imagen del venerado Cristo de la Laguna. Es una talla, de estilo gótico, suele estar colocada en un altar de plata.
Y digo suele porque cuando nosotros estuvimos en La Laguna estaban comenzando precisamente las fiestas del Cristo. Para poder venerarle y sacarle en procesión, la talla estaba esos días en la antes citada Iglesia de Nuestra Señora de los Dolores. Desde allí salió en procesión hacia la Catedral. Esto fue casualidad, de modo que si tenéis intención en un futuro de ver esta importante talla flamenca recordad que deberéis ir hasta la Plaza del Cristo.
Dónde dormir en La Laguna
A pesar de su importante patrimonio y de ser una ciudad turística, La Laguna no destaca por tener una gran oferta hotelera. Sin embargo, al organizar mi segundo viaje a Tenerife tenía claro que quería hacer una ruta por la isla. No tener como base un hotel durante toda la estancia para desde allí llegar a los distintos lugares de interés que tiene la isla. De entre todas las opciones que encontré en esta ciudad, el Hotel Laguna Nivaria es sin duda una de las más interesantes. Tiene una ubicación perfecta, en la misma Plaza del Adelantado y a un paso del casco histórico de la ciudad.
Ocupa una antigua mansión señorial al que se han añadido nuevos edificios para aumentar la capacidad del hotel. Cuenta con distintos tipos de habitaciones, salones comunes, otro para conferencias, spa, bar y restaurante. Además tiene en la parte trasera un tranquilo jardín perfecto para tomar algo tras un día por la ciudad. Otra de las cosas a tener en cuenta de este hotel es su compromiso con la conservación del medio ambiente, así como para facilidad el acceso a minusválidos.
Dónde comer en La Laguna
Si bien la oferta hotelera de la ciudad es pequeña, su oferta gastronómica es mucho mayor. Las calles del casco histórico están llenas de bares y restaurantes de distintos estilos. Muchos de ellos sacan sus mesas y sombrillas a la calle. Una buena idea para comer o beber mientras se disfruta de la vista de lo mucho alguno de los lugares que ver en La Laguna.
Nuestra experiencia en este apartado fue desigual. Desde una comida que nos dejó sin palabras a una estupenda cena. Os voy a recomendar sin duda un restaurante, pero no quiero dejar de contaros lo que nos pasó a la hora de comer. Nos sentamos en la terraza del restaurante La Despensa. Está en la Plaza del Doctor Olivera, con vistas a la Iglesia de la Concepción. Pedimos las bebidas.
Y cuando nos las traen, en lugar de servir las cervezas con limón que habíamos pedido, trajeron cañas solo con cerveza. Se lo dijimos al camarero que sorprendido nos dijo que habíamos pedido cerveza, nada de con limón. ¿En serio? ¿No sabemos lo que hemos pedido? Insistimos y él dijo que no se acordaba perfectamente. Lo único que siento es haberme quedado parada. Y no decir “pues te las tomas tú que nosotros ya nos vamos a otros sitio”.
Menos mal que la cena fue mucho mejor. Por recomendación de Carlos, colega del blog Los viajes de Ark, fuimos al Gastrobar Compartir, en la Calle San Juan 18. Ubicado en un casona canaria de dos plantas, abajo tiene un pequeño patio y una barra de bar. Arriba un fantástico y espacioso comedor. Platos bien presentados y sabrosos. El pulpo dos texturas es una de sus elaboraciones más populares. Fue una pena no poder probarlo pues se habían quedado sin producto el día que acudimos a cenar. (Gracias a mis colegas Jose y Noe he descubierto que este restaurante ha cerrado, así que olvidaros de probar su rica cocina).
Cómo llegar a La Laguna
La Laguna está al norte de la isla de Tenerife. Muy cerca del Aeropuerto Norte de la isla. Esto sin duda facilita mucho llegar a la ciudad.
Desde el aeropuerto hay varias líneas de autobús que van a diferentes puntos del norte de Tenerife. Y muchos de ellos tienen parada en La Laguna. Solamente hay que preguntar por la parada de autobuses en el aeropuerto. Una vez allí, esperar a los autobuses 102,107 ó 108. Todos llevan hasta el Intercambiador Laguna. El trayecto apenas dura 10 minutos. El precio del viaje es de 2,45 €. Una vez allí basta caminar unos 400 metros para estar en el casco histórico de Santiago de la Laguna.
Otra opción es alquilar un coche. En nuestro caso fue esta la opción elegida. Nuestro viaje nos iba a llevar por todo la isla. Y sin duda contar con un vehículo es la forma más cómoda de recorrer Tenerife. Nosotros optamos por Goldcar, que tienen oficina en el propio aeropuerto y un amplia flota automovilística con coches de diferentes categorías. El precio dependerá del vehículo alquilado, pero el gasto en gasolina os aseguro que no será mucho pues el combustible es mucho más barato en Canarias que en la Península.
Si optáis por la opción de alquilar un coche, tened en cuenta que en el centro de La Laguna es complicado aparcar. Aún así y con un poco de suerte y paciencia es posible encontrar un hueco en la zona de aparcamiento gratuito que hay junto a la Plaza del Adelantado. En una calle que sale a la derecha tras pasar la Ermita de San Miguel.
Qué ver en la Laguna: visitas guiadas
En el caso de que quieras conocer a fondo la historia de los lugares que ver en La Laguna, sin ninguna duda merece la pena que te unas a alguna de las interesantes visitas guiadas que se realizan. Os recomiendo sin ninguna
15 comentarios
Nosotros fuimos por allí en mayo pasado y nos encantó pasear por todas esas calles coloridas. Me recordó mucho Antigua en Guatemala. Es curioso el microclima que tienen, nosotros como tu esa primera vez, en Tenerife buen tiempo y allí lloviendo.
No nos dio tiempo a ver tanto como tu has visto asíq ue tendremos qeu volver pronto por allí.
Un saludo
Pues ya sabéis, dad una segunda oportunidad a la ciudad. Aunque de verdad, aún ahora me pregunto si me gustó más verla con lluvia y solitaria, o llena de gente y con sol…
Muy buen resumen de una ciudad realmente bonita. He podido visitarla en varias ocasiones y en cada una siempre descubro algo nuevo 🙂 El balcón con celosía de Santa Catalina ¡me encantó!, cerquita está la calle de las Desesperadas dónde las solteras salían a pasear en busca de marido…imagino a las monjas cotilleando desde el convento jajaja
¡Un abrazo guapa!
Imagina a las monjas saliendo a buscar un marido que las retirase de la vida conventual jajajaja. Un besazo
¡Hola! Yo soy de La Laguna, la ciudad es maravillosa y quería dejar alguna recomendación para comer (mayoritariamente para tomar algo).
Si estáis buscando un sitio para tomar algo y charlar, sin duda, id al Café 7. Es una cafetería con un patio con banquitos y plantas autóctonas, muy natural y tranquilo. Además, tienen opciones veganas.
El Época es otro bar/restaurante genial. Tienen una carta enorme, también con opciones veganas. Es un sitio que lleva abierto años! Y es mágico, suelen tener música y exposiciones de arte, y tienen mesas y sillones geniales para pasar el rato. Además tienen una variedad de chocolates calientes increibles y riquísimos (yo voy cuando hace frío) y tartas deliciosas.
El Tamarindo es un bar (para almorzar o cenar) fenomenal, aunque si buscáis platos muy elaborados o típicos no es lo que buscáis.
También el Café Mundial (tienen batidos increibles) o la Cafeína (con una variedad de cafés de todo el mundo).
De cualquier forma, está llena de bares y restaurantes magníficos, y todos en el centro de la ciudad. Y siempre podéis preguntar a alguien de por ahí!
Desde luego que recuerda a las ciudades coloniales de Latinoamérica!!! No sabía que era la primera ciudad que se construyó con un nuevo estilo tras la Edad Media, me encantan esas curiosidades 😉
Hace muchos años que estuve en Tenerife, pero no fui a La Laguna, para la próxima!! Me gusta mucho ese tipo de arquitectura, no quiero perderme la calle San Agustín!
Un beso guapa!
Pues tienes que volver a Tenerife, porque te perdiste la ciudad más bonita de la isla 😉
Abrazo fuerte.
Si no leo el título del post me parece que estoy recorriendo una ciudad de sudamérica, no me digas porqué, pero es mi sensación. Unas construcciones muy diferentes a lo que estoy acostumbrada de España, me ha gustado mucho.
Un abrazo
Carmen
Pues no andas muy desencaminada porque La Laguna tiene ese aire de algunas ciudades coloniales de América 😉
La laguna es preciosa. Pude visitarla hace muchiiiiiisimos años. Incluso me falla el recuerdo. Me has despertado las ganas de volver. Me encantan todas las islas de este archipiélago.
Saludos
GranPumuki
Pues si te han entrado ganas de volver ¡¡aprovecha y vete a las Canarias unos días!!
¡La Laguna y su clima particular! Como bien comentas, cuando el tiempo es adverso, sus calles se envuelven de un encanto especial.
La Laguna es un lugar con mucha magia. Llana para poder caminarla.
Aunque algo cara para el tema de los alquileres.
Pero tengo la suerte de vivir en ella.
Gracias por tu reportaje, me alegro que te haya gustado mi ciudad.
Un blog genial, no sabía que había tanto para ver.