Si has circulado en alguna ocasión por la A-6, seguro que entre Madrid y Medina del Campo te ha llamado la atención un lugar en el que un castillo se asoma, encaramado sobre las rocas, a la carretera. Cerca, altas torres sobresalen entre los tejados. Son algunos de los lugares que ver en Arévalo. Uno de las localidades más bonitas y con más historia de la provincia de Ávila.
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Dónde está y cómo llegar a Arévalo
A 125 kilómetros del centro de Madrid y a 60 kms de Tordesillas, Arévalo está perfectamente comunicado gracias a la cercanía de la autopista A-6. Es sencillo llegar en coche y buscar un sitio para estacionar antes de comenzar a recorrer la localidad. Yo os recomiendo ir a la Calle Ramón y Cajal, a la derecha nada más cruzar el río Arevalillo por el Puente de Medina.
También se puede ir a conocer los lugares que ver en Arévalo en tren. La línea Madrid-Hendaya pasa por esta ciudad abulense, y numerosos trenes procedentes tanto de Madrid como del norte del país tienen parada en su estación, que se encuentra a 2 kilómetros del centro histórico.
Arévalo, la ciudad de los cinco linajes
La historia de Arévalo se remonta muchos siglos atrás en el tiempo. La abundancia de agua y sus fértiles tierras animó a crear los primeros asentamientos en la zona, probablemente en tiempos de los celtas.
Fue en la Edad Media cuando la villa tuvo su época de mayor esplendor, llegando a ser uno de los núcleos de población más importantes de Castilla tras la conquista de Toledo, cuando comenzó el periodo de repoblamiento y gobierno de cinco familias: los Briceños, los Sedeños, los Montalvos, los Verdugos y los Tapias. Cinco linajes que dieron a Arévalo el sobrenombre con el que aún se la conoce.
Más tarde, la Corte castellana llegaría a la villa, comenzando a ser frecuentes las estancias de los Trastámara en Arévalo a partir del siglo XIV.
La invasión de las tropas de Napoleón también pasó por esta localidad, momento en el que perdió gran parte de su patrimonio. A finales de ese mismo siglo, en 1894, la corona española le concedió a Arévalo el título de ciudad que desde entonces ostenta.
Qué ver en Arévalo
Arévalo es una ciudad que se puede recorrer perfectamente en un día. Solamente hay que cuadrar horarios de los lugares a visitar para poder verlos todos sin problema ni prisas.
Los lugares más significativos que ver en Arévalo están en el casco antiguo. Un lugar que antaño estuvo rodeado de una muralla de la que poco queda en pie y protegía la parte urbana de la villa. Fuera de ese perímetro hay algunos otros lugares a los que también merece la pena acercarse y en los que antaño estuvieron la judería y la morería.
Yo os voy a llevar a recorrer Arévalo del mismo modo que lo hicimos nosotros y os recomiendo, que si podéis, visitéis esta ciudad un día entre semana fuera de las temporadas más turísticas. Nosotros así lo hicimos y nos encontramos con una ciudad medieval de calles desiertas y plazas en las que el silencio solamente lo rompían nuestros pasos y el crotorar de la cigüeñas.
Plaza del Real y un palacio desaparecido
Se trata de una de las tres plazas principales que ver en Arévalo. Aquí estaban las llamadas Casas Reales de Arévalo o Palacio de Juan II. Fue la residencia de los Trastámara en la villa, en él pasó la futura reina Isabel la Católica parte de su infancia (hasta su traslado con 10 años al Alcázar de Segovia) y en este palacio falleció su madre, Isabel de Portugal.
No queda nada de ese palacio que en el primer cuarto del siglo XVI se remodeló para alojar a una congregación de monjas cistercienses. Finalmente fue destruido por completo en 1978 para construir en su lugar viviendas particulares.
Ya en el siglo XXI, la plaza es un espacio público arbolado, porticado y decorado con esculturas de algunos personajes relevantes de la localidad. Aquí se encuentran el Ayuntamiento de Arévalo y el Arco de Alcocer, principal entrada a la ciudad amurallada. Bajo el arco está la Oficina de Turismo y a los lados de la puerta se conserva parte de la muralla.
Al otro lado del arco se puede ver una escultura que recuerda a la joven Isabel, una reina que cambió la fisonomía de nuestro país y que aún, a fecha de hoy, podría representar el tan de moda empoderamiento femenino.
Museo del Cereal y Centro de Interpretación de la Naturaleza
Antes de dejar la Plaza del Real merece la pena hacer una parada en uno de los museos gratuitos que ver en Arévalo. En realidad son dos espacios expositivos que ocupan lo que fue la cárcel de la villa desde el siglo XVI.
Tras subir las escaleras, dejando a un lado el oratorio que precedía a la cárcel, está el Museo del Cereal. En sus cuatro salas se acerca al visitante a los cereales, su cultivo y su evolución a lo largo de la historia. A través de fotografías y maquetas podemos conocer un poco más de estas plantas que tanta importación han tenido en nuestra alimentación desde hace siglos. Seguro que descubrís alguna cosa curiosa.
Yo, por ejemplo, no tenía ni idea de que el pan candeal debe su nombre al tipo de trigo con el que se elabora (pensaba que era un nombre sin más, he tenido que ir a Arévalo descubrir lo que quería decir ese “candeal”). Es en este museo donde se pueden ver lo que fueron una celda común y una celda de castigo de la cárcel arevalense. En esta última se ha recreado una panadería tradicional en la que no falta ni el horno de leña ni reproducciones de los dulces típico de Arévalo.
Un piso más arriba está el Centro de Interpretación de la Naturaleza. Una exposición que a través de fotografías y dioramas acerca al visitante a los principales ecosistemas de la comarca de la Moraña de la que Arévalo es capital, con las aves como especies destacadas en todos ellos.
Horario del Museo del Cereal
- Martes y miércoles de 10:00 a 14:00 horas y de 16:30 a 18:30 horas.
- Jueves a sábado de 10:00 a 14:00 horas y de 16:30 a 19:30 horas.
- Domingos de 10:00 a 14:00 horas.
Los demás museos que ver en Arévalo tiene estos mismos horarios y todos cierran los lunes.
Calle Santa María y sus palacios
Llega el momento de adentrarse en el centro histórico. Y una buena calle para hacerlo es la Calle Santa María. Un calle que nos llevará hasta una de las plazas más bonitas de España mientras por el camino podemos ver restos de antiguos edificios nobiliarios. Por ejemplo, la fachada renacentista del Palacio de los Ballesteros y el Palacio de los Señedo.
Del primero solamente queda la fachada mientras que el segundo, a pesar de estar en ruinas, conserva en pie su fachada principal con un arco de medio punto, el escudo familiar y restos de esgrafiado. También sigue en pie su torre, la parte más antigua del palacio, con 18 metros de altura.
Plaza de la Villa, el lugar más bonito que ver en Arévalo
Habíamos oído que esta plaza es una de las más bonitas de España, pero la verdad es que superó nuestras expectativas. El conjunto es realmente atractivo y está muy cuidado.
Al igual que las otras plazas principales que ver en Arévalo, esta Plaza de la Villa está rodeada de soportales que garantizaban la actividad comercial independientemente de la nieve, la lluvia o el implacable sol del verano.
En esta plaza, las casas son de entramado y en las fachadas se combinan como elementos constructivos el ladrillo, la madera y la piedra. El resultado es un conjunto de gran armonía en el que parece haberse detenido el tiempo.
Iglesia de Santa María
La flanquean dos iglesias. Una de ellas es la Iglesia de Santa María, que fue la más importante de Arévalo en la época medieval. De estilo mudéjar, su ábside da a la plaza, mientras que su torre campanario se eleva sobre la Calle Santa María. Son muy alabadas las pinturas de su interior, pero no es fácil encontrar la iglesia abierta para verlas. Más adelante os contaré dónde podéis ver fotografías y encontrar más información sobre esta iglesia.
Museo de Historia, un interesante lugar que ver en Arévalo
Al lado de la anterior iglesia se puede visitar otro de esos museos gratuitos que ver en Arévalo, el Museo de la Historia. Ocupa un edifico histórico de la ciudad. Fue lugar de reunión de los procuradores de la Comunidad de Villa y Tierra de Arévalo y más tarde, alojería. Yo no tenía ni idea de lo que era eso, así que por si vosotros tampoco lo sabéis, os lo cuento: era una tienda donde se hacía y vendía aloja, una bebida de agua, miel y especias que debía tener bastante éxito hace unos siglos.
Parece ser que fue también en este edificio que aloja el museo donde los Reyes Católicos ratificaron el Tratado de Tordesillas. Ese en el que se establecía una nueva división territorial entre Portugal y España en función del descubrimiento de América.
En cuanto al museo, el visitante hace un viaje a lo largo de la historia en sus salas, desde los celtas a las tres culturas que convivieron en la ciudad. Si conseguís hacer la visita guiada lo agradeceréis y descubriréis muchas curiosidades tanto de Arévalo como de la que fue su más destacada vecina, Isabel la Católica.
Centro de Actividades del Mudéjar
De un museo gratuito a otro que también está en la Plaza de la Villa. En este caso en la que fue residencia del escritor Nicasio Hernández Luquero, en la esquina de la plaza con la calle que lleva el nombre del mismo escritor.
La visita a este museo inaugurado en 2019 (si tenéis suerte y no hay mucha gente, el encargado del centro os acompañará durante el recorrido y os contará un montón de curiosidades) acerca al visitante a la cultura mudéjar y a la evolución de un estilo arquitectónico que es una fusión de elementos y religiones. Conocer este museo sirve para recordar la historia de los musulmanes que convivían con cristianos y judíos en los reinos hispanos medievales, que mantenían su religión pero siempre con el compromiso de obediencia al rey y el pago de tributos.
Es en las salas del Centro de Actividades del Mudéjar de Arévalo donde podréis ver fotografías del interior de la Iglesia de Santa María de la que antes os hablé. Por si no podéis ver su interior, que al menos sepáis que es lo que hay tras sus muros.
Iglesia de San Martín
La Iglesia de San Martín es la otra iglesia de la Plaza de la Villa de Arévalo. Tiene dos torres gemelas y un precioso pórtico románico orientado al sur. El interior actualmente se utiliza como espacio dedicado a exposiciones y otros eventos culturales. En un futuro, la iglesia formará parte, junto al vecino Colegio de los Jesuitas, del centro expositivo COLLEGIUM.
Frente a esta última iglesia podemos ver una de las fuentes de la villa, la Fuente de los Cuatro Caños. . Lo más especial de ella es sin duda su ubicación por debajo del nivel de la plaza. ¿La razón? Facilitar la llegada del agua a la fuente desde el acueducto mudéjar que se encuentra a varios metros de profundidad.
El Castillo, un imprescindible que ver en Arévalo
En lo alto de un barranco en el punto, en el punto en que confluyen los ríos Adaja y Arevalillo, se encuentra uno de los lugares imprescindibles que ver en Arévalo: su castillo. Se trata de una construcción de planta pentagonal que aprovecha la forma de la roca sobre la que se encuentra y que cerraba por el norte de la ciudad la muralla arevalense.
Data del siglo XV y sufrió varias reformas en ese siglo para convertirse en fortaleza artillera. Más tarde, en el siglo XVII, fue prisión. Y durante las guerras de Sucesión e Independencia quedó en ruinas. Fue abandonado, pasando a ser cementerio hasta finales del siglo XIX y cantera para otras construcciones locales.
A mediados del siglo XX, el Castillo de Arévalo pasó a pertenecer al Ministerio de Agricultura, que instaló silos en su interior. Actualmente, el castillo aloja en su interior precisamente una exposición llamada “Castillo y Silo. Un lugar único en el mundo”. Ha sido muy restaurado y se ha convertido en un lugar destacado e interesante por si historia para visitar en Arévalo.
Horario del Castillo de Arévalo
- Junio a septiembre abre viernes, sábados y domingos de 10:00 a 20:00 horas.
- Octubre a mayor abre sábados y domingos de 10:00 a 18:00 horas.
- Entre semana se pueden organizar visitas para grupos llamando al teléfono 913476500.
- La entrada es de pago.
Mirador sobre el río Adaja
Al este del centro histórico de Arévalo, al final del Callejón los Novillos, se encuentra este fantástico mirador sobra la antigua muralla desde el que se tienen unas bonitas vistas de los campos que rodean la ciudad. En este mirador se rinde homenaje con un placa a José Jiménez Lozano. Escrito abulense que recibió el Premio Cervantes en 2002.
Plaza del Arrabal, otra plaza que ver en Arévalo
Llega el momento de dejar atrás el casco antiguo para ver otros lugares que ver en Arévalo. El primero de ellos es sin duda la Plaza del Arrabal. La más importante actualmente entre las plazas de la localidad. Fue y sigue siendo el centro comercial de Arévalo. Y como en las otras plazas que os he mencionado, también en esta se conservan los pórticos con columnas de piedra o de madera.
El origen de este espacio público se remonta al momento en el que la población superó la capacidad que tenía el recinto amurallado. Fue entonces cuando comenzaron a poblarse los arrabales de la villa y en ellos se ubicaron la morería y la judería.
Iglesia de Santo Domingo de Silos
Esta iglesia está en la Plaza del Arrabal y es ahora el principal templo de Arévalo. En su interior se encuentra la imagen de la patrona de la ciudad, la Virgen de las Angustias.
Su construcción se comenzó en estilo mudéjar y de esa época se conserva el ábside semicircular de ladrillo. En los siglos XVI y XVIII, la iglesia se modificó añadiendo a su estructura y decoración elementos renacentistas y barrocos.
Plaza de El Salvador
Pocos metros al sur de la Plaza del Arrabal se encuentra esta plaza que poco tiene que ver con las otras de la ciudad. Sin embargo es un bonito lugar que ver en Arévalo gracias a la presencia de la iglesia que la da nombre. Nosotros la encontramos cerrada y sin indicaciones sobre horario de apertura. Nos hubiera gustado verla por el retablo de Juan de Juni que guarda en su interior y por los pasos de Semana Santa que se guardan en su interior.
Paseo fluvial a los pies de la ciudad
Unos días antes de nuestra visita a Arévalo había llovido mucho y parte del paseo fluvial de la ciudad no era transitable. Si vosotros tenéis más suerte, no dejéis de recorrer el paseo por la ribera de los ríos Adaja y Arevalillo. Desde él se tiene una perspectiva diferente de la ciudad y de su entorno.
Además, durante el recorrido se pasa junto a algunos lugares que ver en Arévalo, tales como los puentes de Medina y de Valladolid o el Molino de Don Álvaro de Luna.
Dónde comer en Arévalo
Después de conocer los lugares que ver en Arévalo hay que darse tiempo para disfrutar de otro de los platos fuertes de esta ciudad de Ávila. Y nunca mejor dicho, porque toca hablar de comida. Porque Arévalo es un excelente lugar para disfrutar de la mejor comida castellana. Productos de la tierra que llegan a la mesa elaborados con recetas tradicionales que a más de uno le harán chuparse los dedos.
Qué comer en Árevalo
El rey de la mesa arevalense es sin duda el cochinillo asado. Y es que Arévalo es desde el siglo XVI la “cátedra” de este asado que ostenta la marca Tostón de Arévalo. En esta localidad se puede comer un cochinillo especialmente tierno ya que el lechón se sacrifica con 20 días o menos. A ello se suma la dieta de dieta de la madre, a base de piensos cuyo principal componente son los cereales a la comarca.
Las legumbres de la Moraña también mucha fama. Los garbanzos y las judías se encuentran en la carta de muchos restaurantes y también en las tiendas de Arévalo, por ejemplo, en alguna especializada de la Plaza del Arrabal.
Antes os decía que en el Museo del Cereal descubrí que candeal es un tipo de trigo. Pues bien, en Arévalo se elaboran muchos panes pero entre todos ellos destaca el pan blanco elaborado con trigo candeal.
Los embutidos también están presentes en comercios, bares y restaurantes ya que el clima de la zona facilita su curación.
Por último los dulces. Si queréis disfrutar de los más típicos de Arévalo tendréis que probar los jesuitas (un hojaldre con crema y piñones) o los rozneques (una masa azucarada y anisada y frita). Estos últimos son típicos de la Semana Santa. La Pastelería Álvarez es un buen lugar para comprar dulces típicos. La encontraréis en la Calle Zapateros, una vía peatonal que parte de la Plaza del Arrabal.
Mejores restaurantes en Arévalo
Si estando en Arévalo queréis comer comida tradicional de la comarca vais a encontrar un buen número de locales para hacerlo. La mayoría de ellos están en los alrededores de la Plaza del Arrabal, en algunos casos en la misma calle uno detrás de otro. Entre semana no es complicado encontrar mesa, pero si queréis comer en un restaurante en concreto lo fines de semana o en temporada alta, os recomiendo reservar con antelación o es más que probable que no encontréis mesa.
Durante el mes de enero son varios los restaurantes que cierran, por lo que la oferta en esas fechas queda algo más limitada.
Tener en cuenta también que desde el último fin de semana de febrero hasta el primero de marzo se celebran cada año las Jornadas Gastronómicas del Cochinillo Asado y Tostón de Arévalo. Durante esos días los restaurantes ofrecen un menú completo con legumbres y asado a un precio reducido.
De entre todos los restaurantes donde comer en Arévalo yo os voy a dejar el nombre de tres. Su reputación en la ciudad es alta y todavía no he oído a nadie decir que haya comido mal en ellos.
- Las Cubas (Calle Figones, 8). Tiene tres amplios salones y un horno de leña en el que preparan el cochinillo desde 1982. Sus embutidos, la mollejas y la leche frita se cuentan también entre los platos más recomendables.
- Asador Museo Siboney (Calle Figones, 4). Ubicado en un palacete colonial decorado con obras de arte y horno a la vista, este restaurante es sin duda el más bonito y uno de los mejores de Arévalo. Eso sí, sus precios son ligeramente más elevados que en otros locales.
- Los Cinco Linajes (Plaza del Tello, 5). Este restaurante a la espalda de la Plaza del Arrabal ofrece mesas en su elegante comedor y también en el exterior, algo que cuando llega el buen tiempo puede apetecer a más de uno.
Dormir en Arévalo
Si os apetece pasar un par de días conociendo la comarca de la Moraña podréis elegir entre hoteles y casas rurales para hacer noche. Estos son los mejores alojamiento en Arévalo.
- Mi Villa Arévalo. Esta casa rural con capacidad para hasta 7 personas es uno de los alojamientos mejor valorados de la zona. Y no es de extrañar. Solamente su ubicación en la Plaza de la Villa, uno de los destacados que ver en Arévalo, ya es un gran punto a su favor.
- Apartamentos turísticos Desiree. Estos apartamentos cerca de la Plaza del Arrabal son tan coquetos que dan ganas de quedarse un temporada en ellos. Perfectos para una escapada en pareja.
- Hotel Spa Viña Real. Los que prefieran tener todo hecho y dedicarse solamente a visitar Arévalo pueden elegir este hotel como lugar para alojarse en la localidad. Me parece un poco caro, pero su calidad está a la altura de lo que cuesta.
- Posada Real Los Cinco Linajes. Puede que para algunas este hotel de 4 estrellas tenga una decoración demasiado clásica. Pero su ubicación y la amplitud de las estancias puede compensar.
