Uno de los edificios más representativos que ver en Gante es su castillo. Ese edificio de piedra en el centro de la ciudad levantado en siglo XII cumple con la típica imagen que tenemos de como debe ser un castillo medieval. Está rodeado de un foso, tiene un puente levadizo, almenas y torretas. Su tamaño es pequeño si se compara con otras fortalezas de la época. Pero el Castillo de los Condes de Flandes esconde mucha historia tras sus muros.
Índice del artículo
Cómo llegar al Castillo de los Condes de Flandes
Si se llega a Gante en tren, lo mejor es bajar en la estación de Gent Sint-Pieters. Hay trenes directos desde Bruselas, Lovaina o el aeropuerto de Zavantem entre otras opciones. Una vez allí, saliendo de la estación y caminando hacia la izquierda está la parada del tranvía nº 1. Los billetes se compran en las máquinas expendedoras que hay allí mismo. El precio por trayecto es de 3 euros y hay que validar el billete en el interior del tranvía. El trayecto cruza la ciudad y en unos 15 minutos llega al castillo.
Los que no quieran gastar esos euros en transporte público (mejor en un gofre y gastar caminando la calorías ingeridas) pueden hacer el trayecto a pie. Es bastante recto y a buen paso se puede tardar algo más de media hora.
Historia del Gravensteen
El origen del Castillo de los Condes de Flandes se remonta al siglo X. Entonces fue cuando el conde Arnolfo I levantó un edificio de madera. No mucho después éste fue reemplazado por una construcción de piedra con tres salas superpuestas. Empezaba ya a ser un edificio digno de la corte. Había chimeneas, ventanas y hasta letrinas.
Durante el siglo XII se realizaron nuevas obras en lo que ya era un castillo. Se levantó una muralla creando un patio y se construyeron nuevas estancias de madera alrededor del edificio principal. Sin embargo un incendio en 1176 destruyó el edificio.
Por aquel entonces la clase alta de la ciudad estaba empezando a reclamar poder. Así que el conde Felipe de Alsacia no dudó en reconstruir en 1180 el Castillo de los Condes de Flandes cincelando su nombre y la fecha en el portón de entrada. Había que dejar claro quien mandaba allí.
Ya en el siglo XIV, los condes decidieron cambiar su residencia. El castillo resultaba demasiado austero y prefirieron vivir en una nueva residencia con todas las comodidades: Prinsenhof (Corte de los Príncipes). Allí fue donde nació Carlos I de España. El Castillo de los Condes de Flandes quedó relegado y pasó a ser utilizado como Tribunal del Consejo de Flandes y cárcel.
A finales del siglo XVIII el castillo fue vendido a unos particulares. Y terminó convertido en una hilandería de algodón. Cuando el castillo dejó de servir a ese fin, fue abandonado y quedó casi en ruinas.
Hoy en día, el que fue símbolo del poder feudal ha sido restaurado y su visita se ha convertido en una de esas cosas que hacer en Gante para todo el que visita la ciudad.
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Qué ver en el Gravensteen
Dentro del Castillo de los Condes de Flandes hay sobre todo salas desiertas que destacan por su arquitectura. En algunos casos se han aprovechado estos espacios para instalar exposiciones. Una de ellas es la del Museo de Armas. Una de las colecciones de armas más bonitas de Flandes. En ella se pueden ver espadas, puñales, ballestas o pistolas.
La otra exposición corresponde al Museo Judicial, con objetos de tortura. Entre los elementos expuestos hay una guillotina, un collar de púas y unas esposas también con púas.
Para recorrer las estancias solo hay que seguir los números de cada sala e ir escuchando las explicaciones en la audio guía que entregan con la entrada. Una de la estancias más atractivas de este castillo es la sala de fiestas de estilo románico. Iluminada por sus cuatro lados, un gran arco la separa de la capilla. Desde esta misma sala una escalera sube hasta la habitación del vizconde.
Además de pasar por los establos, la sala de audiencias o el aljibe, no hay que dejar de subir a la Torre del Homenaje. Para ello hay que utilizar la escalera de caracol que lleva a lo más alto del Castillo de los Condes de Flandes. Una vez arriba se puede disfrutar de una buena vista de Gante entre troneras y almenas.
Desde donde ver el Castillo
Hay un punto en el que todo el mundo se para para hacer fotos al Castillo de los Condes de Flandes. Es el puente de Rekelingestraat, la calle por la que se entra al castillo. Es sin duda un buen lugar para conseguir bonitas fotografías con el castillo reflejándose en el canal. Pero hay otros dos lugares desde los que conseguir buenas vistas y hacer buenas fotos de este edificio medieval.
Para llegar a otro de esos lugares, solo hay que caminar unos metros por Geldmunt hasta llegar a una zona cubierta de césped. En esa calle sin salida se puede conseguir otra bonita vista del castillo con mucha menos gente que el puente que antes os dije.
Por último, os cuento otro rincón que puede pasar casi desapercibido y que aparte de alguna familia de patos es posible encontrar sin un solo turista. Para llegar allí hay que cruzar el puente junto al castillo, torcer por la primera calle a la derecha, Gewad, y luego la primera calle de nuevo a la derecha. Enseguida se ve una pequeña placita con unos bancos y unas escaleras que bajan al río. Desde allí podréis ver el castillo y hacer bonitas fotos.
Sin duda este castillo bien es merecedor de ser visitado. Sin ser un edificio impresionante, mantiene la esencia de lo que es un castillo medieval, que en el caso de este de Gante resulta también muy atractivo cuando al caer la noche se ilumina como todo el centro histórico de Gante.
Visitar el Castillo de los Condes de Flandes
Este castillo medieval flamenco no es demasiado grande. Aún recorriendo todas las estancias y dando la vuelta completa al paseo de ronda no se tarda más de una hora en verlo.
Horarios
Del 1 de abril al 31 de octubre: de 10 a 18 horas.
Dek 1 de noviembre al 31 de marzo: de 9 a 17 horas.
Solamente cierra los días 24,25 y 31 de diciembre y el 1 de enero.
Precios
Adultos: 10 €
Jóvenes hasta 25 años: 6 €
Niños: gratis.
Con la entrada se entrega una audio guía en diferente idiomas.
Si se decide adquirir la City Card Gent para visitar la ciudad, sabed que la visita al Castillo de los Condes de Flandes está incluida. En esta tarjeta también se incluye el transporte en la ciudad.
12 comentarios
Este castillo es espectacular. Estuvimos en Gante solo unas horas y no nos dió tiempo de entrar a verlo,asi que después de este articulo y tus fotos me dan aún más ganas de volver.
Le debo una visita
Vaya el castillo me parece imponente, digno de servir de escenario a juego de tronos 😉despues de leer tu post dan ganas de ir!! me lo apunto para visitarlo
Si pasas por Gante merece la pena visitarlo, sobre todo porque es muy sencillo llegar y apenas se tarda en velo.
Sin ser un gran castillo lo cierto es que teniendo tiempo merece la pena recorrer su interior y descubrir que encierran sus muros.
Sin duda lo visitaría en un viaje a Gante. Fácil para llegar y con orígenes en el siglo X! Me ha encantado, otro motivo más para organizar una escapada. Un abrazo guapa.
Lo tiene todo para que nadie deje de visitarlo si va a Gante. 🙂
¡Vaya! Nosotros estuvimos en Gante paseando alrededor del castillo y no entramos porque nos habían dicho que el interior estaba totalmente vacío… Si hubiéramos sabido de la existencia del Museo Judicial y el Museo de Armas habríamos entrado a verlos. 😭 Bueno, ya tenemos excusa para volver a Gante. 😜
Saludos.
Además ver algunas de las estancias y las vistas desde las almenas hacen que merezca la pena visitar el interior.
Qué maravilla de castillo, he estado doa veces en Gante, en la primera visita no lo vi y en la segunda, solo lo vi por fuera. Una pena a juzgar de tus fotos, es impresionante. Tengo previsto volver pronto por la zona y si puedo quiero repetir Gante, a ver si me da tiempo. Bonitas fotos Cris!
Un beso
Volver a Gante siempre es una buena idea, y se se tiene en pendientes visitar este castillo, mucho más 🙂
Como me gustó Gante y el castillo de los condes de Gante es una de las visitas imprescindibles. Me sorprendió mucho la ciudad, me gustó un montón a pesar de no ser de las más conocidas.
Yo creo que Gante cada vez está tomando más protagonismo en el panorama viajero, y ya son muchos los que se declaran fans de esta preciosa ciudad.