Aunque muchos piensen que es una ciudad sucia y caótica, Katmandú es una de las ciudades del mundo que más me gustan. Desde que la visité por primera vez quedé cautivada por sus calles medievales, sus casas y templos newar, sus leyendas y sus mercados. Tienen tanto que ofrecer la capital de Nepal y el Valle de Katmandú que se hace imprescindible pasar varios días allí para poder conocer lo especial que encierran en cada rincón. De entre todos ellos, la estupa de Boudhanath es uno de mis lugares preferidos de la ciudad. Uno de esos lugares que uno no puede dejar de ver si viaja a Nepal.
A mi de Katmandú me gusta todo. Desgraciadamente la ciudad sufrió un terrible terremoto en el año 2015 y se han perdido para siempre muchos de sus edificios históricos. La Durbar Square nunca será ya la misma sin sus templos centenarios. Pero aún queda suficiente patrimonio cultural en esta ciudad como para que haya que tenerla en cuenta para algún futuro viaje. Cada rincón de la ciudad aporta algo. Desde el animado Thamel con sus cientos de tiendas y hoteles, hasta el tranquilo y poco turístico barrio al sur de Durbar Square, todos los lugares de Katmandú tienen algo especial.
Probablemente uno de los lugares más atractivos y especiales de Katmandú sea la estupa de Boudhanath. Yo tengo un recuerdo mágico de este lugar que he tenido la suerte de visitar en dos ocasiones. De la primera tengo un recuerdo algo difuso. De la segunda recuerdo cada momento como si fuera ayer. Pasamos allí varias horas. Realmente no es necesario, el lugar se puede ver en un rato. Pero, ¿realmente hace falta verlo a toda prisa y salir corriendo hacia otro lugar? Si estás en lugar como este, hay que aprovecharlo con todos los sentidos. Porque Boudhanath no solo se ve. Boudhanath se escucha. Se toca y se huele.
La estupa de Boudhanath es uno de los lugares budistas más importantes de Nepal. Realmente no está en la propia Katmandú, sino a 10 kilómetros en la población de Boudha. Cuando uno se dirige hacia ese lugar realmente no siente en ningún momento haber abandonado la capital. Donde acaba Katmandú, empieza Boudha. Y allí está Boudhanath, una de las estupas más grandes del mundo y probablemente una de las más bellas. Desde el año 1979 forma parte del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Pero, ¿qué es una estupa? Se trata de una construcción budista. Originariamente se utilizaban para guardas las reliquias de Buda. Posteriormente se siguieron edificando estupas con otro tipo de reliquias relacionadas con el budismo. Las estupas son esenciales para el budismo. Se puede decir que serían el símbolo tangible de la mente iluminada de Buda. En lo alto de cada de las estupas de Nepal se pueden ver dibujados los ojos de Buda que miran hacia los cuatro puntos cardinales.
La visita a la estupa de Boudhanath empieza pagando la entrada para acceder a la plaza en la que se encuentra. Enseguida uno se da cuenta de estar en un lugar especialmente turístico por la cantidad de tiendas de artesanía que hay en los edificios que rodean la estupa. Son todos pequeños comercios en los que venden ruedas de oración, rosarios, mandalas y un buen número de recuerdos casi siempre relacionados con el budismo.
La estupa se ve desde la calle, encerrada entre edificios y sobresaliendo sobre ellos. Cerca de ella la perspectiva cambia. Según se camina alrededor de ella, siempre en el sentido de las agujas del reloj, la Boudhanath va ofreciendo una imagen diferente. Depende de si la da el sol. Si hay más banderas de oración. Si a estas las mueve el viento. Uno está ante un edificio de una simetría y proporciones perfectas. Cada elemento que lo forma tienen un significado concreto en todas las estupas budistas, y en Boudhanath todos están perfectamente representados.
- Plinto. Sería el nivel inferior de la estupa. Es cuadrado y representa la Tierra. Cada uno de los lados sería uno de los estados de la conciencia y los cuatro inconmensurables: alegría, ecuanimidad, compasión y amor.
- Kumbha. Es la gran cúpula. Simboliza el agua. Cada año se encala y se decora con motivos amarillos. Estos representan los pétalos del loto, flor ligada a Buda.
- Harmika. Está sobre la cúpula y es una torre cuadrada que simboliza el fuego. Es ahí donde en Boudhanath están los ojos de Buda.
- Aguja. Se trata de una especie de pirámide sobre la harmika. Tiene 13 niveles que representan las 13 fases por las que hay que pasar antes de alcanzar el nirvana.
- Sombrilla. Corona la estupa y simboliza el vacio más allá del espacio.
Boudhanath hay que rodearlo. Primero por el nivel inferior. Allí se pueden ver 108 pequeñas figuras de Buda. Este número es de buen augurio en la cultura tibetana. También ese nivel está rodeado por las ruedas de oración. Se distribuyen en grupos de cuatro o cinco en el interior de cada una de las 147 hornacinas hechas para alojarlas. Al llegar a la parte norte de la estupa hay una escalera que permite subir al nivel superior. Desde ese lugar la perspectiva de Boudhanath cambia de nuevo. Te sientes más cerca de esa mirada entre misteriosa y bondadosa. Y también puedes ver la plaza desde un ángulo distinto. Contemplar a los peregrinos desde un mirado privilegiado.
Pero para mirador realmente privilegiado el que ofrecen las terrazas de los restaurantes alrededor de la plaza. Subir a uno de ellos, buscar una mesa cerca de la plaza y pedir una cerveza. Así lo hicimos nosotros. Pedimos también algo de comer y disfrutamos de la mejor de las vistas que se pueden tener de la estupa de Boudhanath.
En Boudhanath no solamente está la estupa. Tras la invasión china del Tibet, muchos refugiados se instalaron en Bodhnath. Ellos han sido quienes han construido los monasterios o gompas que se pueden ver en las cercanías de la estupa. Son muchos y es suficiente con salir por alguna de las calles de la plaza para encontrarse con ellos. Todos reciben a los visitantes con amabilidad, y puede que hasta te encuentres con alguna ceremonia en su interior.
En la misma plaza de la estupa está el Tsamchen Gompa. Merece la pena entrar en él para ver sus preciosas pinturas murales y su enorme rueda de oración. Si además llegas hasta la terraza superior, el regalo es una vista magnífica de la estupa.
Nosotros abandonamos la plaza en busca de algunos gompas. Hay varios a menos de 300 metros de la estupa. Aunque encontramos varios de ellos no tenemos muy claro el nombre de casi ninguno. Aún así, verlos nos gustó. Y también recorrer esas calles sin turistas donde compramos banderas de oración tibetanas a las familias que las preparaban.
Más tarde regresamos a la plaza. Ya caía la tarde. Y es el momento que recomiendo no os perdáis en Boudhanath. A esa hora, cuando el sol empieza a caer, es cuando los tibetanos salen en procesión a orar y caminar alrededor de la estupa. De fondo suena música budista que sale de alguna tienda. El sonido te va envolviendo, los mantras que cantan en esos discos son el sonido perfecto para acompañar el momento. El sol empieza a teñir la estupa de dorado. El aire huele a incienso y a esas velas de mantequilla que encienden aquí y allá. Hombres mujeres caminan haciendo girar las ruedas de oración con su mano derecha mientras con la izquierda pasan las cuentas de un rosario budista.
No sabes muy bien que hacer, hasta que alguien te sonríe y te anima a sumarte a esa procesión. A caminar siguiendo el compás de ese mantra que suena en toda la plaza. A girar las ruedas de oración. Y a contemplar el más bello atardecer de Katmandú mientras sobre tu cabeza el viento agita las banderas de colores y lleva el aroma del incienso a cada rincón de Boudhanath.
Para mi Boudhanath es el lugar más espiritual que ver en Nepal. Ha sido uno de esos lugares que no solo ves, sino que sobre todo vives. Allí fuimos sin prisa, pasamos horas contemplando un lugar único en el mundo. Vimos Boudhanath blanca y reluciente a la luz el sol. Y dorada y mágica al atardecer. Es por eso que os recomiendo que vayáis a Boudhanath sin prisa, porque es un lugar para ver con calma y sin duda una de los lugares más fascinantes que verás en Nepal.
Cómo llegar a Boudhanath
La forma más sencilla y rápida de llegar a Boudhanath es en taxi. También se puede ir en autobús desde el parque Ratna de Katmandú. Una buena idea para pasar el día es visitar por la mañana el templo de Pashupatinath. Se puede hacer caminando el trayecto entre ambos lugares cruzando campos de cultivo y algunas aldeas. Si uno se siente desorientado, basta con preguntar.
Boudhanath tras el terremoto 2015
La estupa de Boudhanath quedó seriamente dañada en el terremoto de 2015. Sin embargo, tras una minuciosa restauración, la estupa recuperó su aspecto a finales del pasado año. Ya está otra vez abierta a los visitantes. Pasear a su alrededor vuelve a ser una de las cosas alucinantes que hacer en Nepal.
Antes del terremoto el precio de la entrada a Boudhanath era de 150 rupias. Ahora no sé si este precio habrá aumentado.
15 comentarios
Kris,
Que linda entrada que hiciste amiga!!!
Despertaste mi recuerdo de cuando la visité, estar ahí fue uno de los mejores momentos que vivimos en Khatmandú. Nos pasó lo mismo que a vos, estuvimos horas recorriéndolo con Alfredo y no nos queríamos ir.
Se huele, se toca y se escucha. SE SIENTE.
Gracias por el recuerdo y te cuento que al leer este post volví a escuchar dentro de mi el Mantra “Om mani padme hum”
Este lugar es muy especial para los nepalíes y para quien haya tenido la suerte de visitarlo también, porque NUNCA se OLVIDA.
Saludos Viajeros.
Gracias Lilián. Ha sido uno de post que se escriben sin pensar, solo con los recuerdos y las sensaciones que tuve allí. Un abrazo.
Un lugar mágico, sin duda. Katmandú siempre me ha llamado la atención y me gustaría viajar allí en alguna ocasión. Gracias por mostrarnos esta estupa, símbolo de Buda y con unas características únicas y singulares en cada detalle, como bien nos muestras.
Un abrazo.
Ya he dicho que Katmandú es una de mis ciudades preferidas, entre otras cosas por lugares tan especiales como este. Un abrazo.
Leyéndote se nota el cariño que tienes por este lugar. Me ha encantado, genial la información y significado de la estupa. Intrigada me quedo con las velas de mantequilla…
Uno de esos sitios que espero visitar algún día. ¡Besos!
Es un lugar de esos que te hacen sentir lejos de todos… casi en una dimensión distinta. 😉
¡Un edificio con ojos..! Es lo primero que hemos pensado al ver la foto.
Ahora que hemos leído las partes que componen la arquitectura de una estupa nos queda claro qué representan.
Nos alegramos que poco a poco Nepal se vaya recuperando del trágico terremoto y que la restauración de esta estupa sea buen signo de ello.
¡Saludos!
Increíble, me ha encantado la historia de la estupa, la manera en que hay que visitarla y todo el simbolismo que describes con tanta admiración y respeto. Chapeu, como siempre Kris.
Es un lugar único Carolina, hay que visitarlo con respeto y entendiendo que lo que ocurre allí no es un espectáculo. Un abrazo
Pues si que tiene ojos. Pero unos muy especiales que por fortuna vuelven a estar en el lugar que deben tras el terremoto. Un saludo.
Me has hecho viajar a Katmandú contigo… hermoso post!
Me alegra que te haya gustado. Yo viajé allí de nuevo al escribirlo…
hola Cristina. Este mes de Diciembre viajamos a Nepal. A nosotros también nos han ofrecido la excursión a lomos de un Elefante y el baño. Tengo mucha ganas pero no se si podrá conmigo la pena que sentiré si veo como los golpean. Tu crees que hay posibilidad de ver el baño como tú lo viviste??? que tendríamos que hacer?? por lo que cuentas creo que fue una experiencia mucho mas intima además de mas tranquila para ellos.
Hola Juani. El tema de los animales ya sabes que genera muchos conflictos entre los viajeros. YO solo te puedo decir que aquel baño con el elefante fue un momento muy especial, el animal estaba relajado, pude frotar toda su piel y no encontré una sola herida y más tarde puede verle en el lugar que descansa. Sinceramente me alegra haber vivido aquella experiencia, no sé si será o no igual en otros lugares, pero lo que yo sentí fue todo bueno. Sin embargo lo que tengo claro es que no volvería a subir a un elefante tal y como los llevan en Chitwan. Me di cuenta demasiado tarde, no lo disfruté y creo que es mucho más emocionante hacer una ruta a pie buscando huellas de elefantes 🙂
¡Mensaje encantador! Gracias por compartir esta útil información.