Dónde comer en Toulouse: 8 lugares recomendados

Elegir donde comer en Toulouse puede no ser una tarea sencilla. Cafeterías, restaurantes de comida rápida, boulangeries, restaurantes,… En algunas calles de la ciudad la oferta es tan variada que uno no sabe que local elegir para comer o cenar.

El primer fin de semana que pasé en la ciudad rosa el pasado mes de noviembre tuve unos días movidos. Si quería visitar todo lo que hay que hay que ver en Toulouse no me podía permitir invertir mucho tiempo sentada en un restaurante a la hora de comer. Anochecía pronto y preferí aprovechar las horas de luz para recorrer la ciudad. Así que madrugaba y dedicaba tiempo a tomar un buen desayuno en mi alojamiento, Le Cour des Consuls Hotel&Spa. De ese modo me bastaba tomar un tentempie a mediodía y así aguantaba recorriendo Toulouse hasta la hora de cenar.

Trae ese primer viaje he podido regresar dos veces a Toulouse para seguir conociendo la ciudad y sus restaurantes. Aquí comparto con vosotros todas esas experiencias culinarias en la capital de Occitania.

Dónde comer en Toulouse

Repartidos por todo el casco histórico de la ciudad, en sus estrechas calles, hay un buen número de bistrós. A mi todos me parecían encantadores. Sobre todo por la noche. Cuando sobre la mesas titilaban las velas y los locales tenían ese aire romántico tan francés. Sin embargo no me decidí por ninguno de ellos.

Brasserie Flo (1 quai de la Daurade)

Cuando llegué a la ciudad, un viernes por la noche, y mientras caminaba hasta el hotel, vi muchos pequeños y coquetos restaurantes. En casi todos ponía que cerraban a las diez. ¡Y eran más de la nueve cuando llegue al hotel! Tenía dos opciones: ir la centro, a la zona de la Place du Capitole y probar suerte a ver si encontraba algo abierto, o bien preguntar en el hotel por algún local que cerrase más tarde. Estaba cansada, así que una vez instalada en la habitación bajé a recepción y pregunté por un lugar para cenar. Así decidí el restaurante en el que cenar mi primera noche en Toulouse.

La Brasserie Flo está junto al río Garonne, en la parte baja del Hotel Beaux Arts. La decoración del restaurante tiene cierto aire art decó, algo que me gustó. A pesar de que eran más de las diez cuando llegué, el restaurante estaba lleno. De comensales disfrutando de bandejas de ostras y marisco. En ese momento me di cuenta de que la cena no sería precisamente barata. Pero no tenía ninguna de salir en busca de otro lugar. Así que tomé asiento, pedí una cerveza, la carta y me dispuse a disfrutar de mi cena.

A mi el marisco no me gusta. Las ostras tampoco. Y aunque no había duda de que esos eran los platos estrella de la Brasserie Flo, yo me decidí por una hamburguesa. Una de las hamburguesas más caras que he comido (o así lo recuerdo), pero reconozco que estaba espectacular. La presentación entraba por los ojos. Y la carne estaba realmente sabrosa. Así que si no os importa pagar 24 euros por ese plato y una cerveza, os recomiendo este restaurante como uno de locales donde comer en Toulouse. O en el que cenar si se os va un poco la hora.

Le Murano (5 Boulevard de Strasbourg)

La segunda noche de mi viaje acepté una sugerencia de la Oficina de Turismo. Tuve que ir hasta el Boulevard de Strasbourg. Una avenida muy animada llena de restaurantes. Había pasado por allí esa mañana y en algunos había visto que la gente hacía fila esperando su turno para entrar a comer. El nombre de este restaurante es L’Entrecôte y está en el número 15 del Boulevard de Strasbourg. Yo no soy muy fan de la carne, pero ante la cantidad de gente que había allí está claro que debe ser un buen lugar donde comer en Toulouse.

El restaurante en el que cené es uno de los locales de moda en Toulouse. Le Murano es local es muy atractivo, con unos grandes anillos de cristal colgados la entrar. La cocina está abierta y en ella el chef Valentin Neraudeau y sus ayudantes elaboran los singulares platos que llegan a la mesa. Yo tuve que conformarme con cenar en la planta de arriba, un lugar mucho más sencillo e informal. Y es que el local tenía todas sus mesas reservadas.

De primero tomé un gofre de patata con crema de queso y pato. De segundo me decidí por una delicioso plato con verduras, carne y una salsa que le daba un toque oriental al plato. En cuanto al postre, todo lo que aparecía en la carta tenía una pinta tan buena que me dejé asesorar y me tomé una copa con helado, tarta y almendras. Sencillamente deliciosa.

Para beber pedí una cerveza. Y como en todos los restaurantes de Francia, me pusieron una botella con agua de forma gratuita. Algo de lo que en otros países deberían tomar nota.

Aunque este no es un restaurante barato (el menú de tres platos cuesta 28 euros), creo que merece la pena tenerlo en cuenta para una cena tranquila. Y más aún si se viaja acompañado.

Desde Turismo de Toulouse me comentan que este restaurante ha cerrado.

Les Halles de Victor Hugo (Marché Victor Hugo, Place Victor Hugo)

Otro lugar por el que pasé y me pareció perfecto para comer fue el Halles de Victor Hugo. Su planta baja es un mercado con algunos locales donde tomar un vino y comer queso. La planta de arriba está llena de restaurantes que ofrecen menús a buen precio. Elaborados con materia prima recién comprada en el mercado. Son locales sencillos pero me parecieron una buena idea para una comida informal.

Si hace buen tiempo, sin duda debe merecer la pena aprovechar la mesas que hay instaladas en la terraza exterior. Una buena forma de comer y disfrutar de las alturas sin estar sentados  pie de calle y con los coches pasando a tu lado.

La Gourmandine (17 Place Victor Hugo)

En uno de mis siguientes viajes conocí este restaurante que sin duda se ha convertido en mi favorito para comer en Toulouse. Está muy cerca de Halles de Victor Hugo y cuenta con un terraza perfecta para comer los días en los que el tiempo es agradable.

El interior del local se divide en dos plantas decoradas ambas con mucho estilo. No faltan papeles pintados en las paredes (incluso el baño está cubierto con un papel lleno de plantas y pájaros). A mi me gusta más la planta superior pues tiene grandes ventanales que permiten contemplar del ajetreo de la calle mientras se disfruta de la comida de La Gourmandine.

Nosotros comimos en este atractivo local en el que ofrecen un fabuloso menú de tres platos: entrante, principal y postre por 36 €. No es barato, pero la calidad de los productos (orgánicos y de temporada) y la fabulosa elaboración hace que pagar ese precio merezca la pena. Es un menú fantástico por sabor y presentación. Para los que quieran comer menos, al mediodía ofrecen también un plato del día por 13,90 €.

Si tuviera que recomendaros un plato ese sería el magret. Servido de forma generosa y muy sabroso. Yo no soy muy amiga de esta carne, pero reconozco que en este caso estaba espectacular. Comimos también un plato de vieras, tan bonito, que daba pena pinchar en él. Y de postre… Ay esos postre. Son caros, pero no os quedéis sin probarlos. El postre más recomendado es la tarta de limón y merengue. Muy suave. Pero si queréis llevaros un grata sorpresa, pedid la pera con chocolate. No os cuento más porque para mi es el postre más rico y sorprendente que he comido nunca. Y hasta ahí puedo leer.

Le Genty Magre (3, Rue Genty Magre)

Muy cerca del Museo de los Agustinos se encuentra este restaurante que abrió sus puertas hace ya 15 años. Sus platos aprovechan los productos de estación por lo que la carta varía a lo largo del año. Ofrecen distintos menús con platos siempre basados en la cocina tradicional de la región.

Los precios de los menús oscilan entre los 14 € del plato del día y los 50 € de menú de tres platos que incluye un vino para cada uno de ellos. En la carta no faltan carnes, pescados ni por supuesto el famoso cassoulet. Este último plato está bien para comer, pero no lo recomiendo para cenar (puede resultar algo indigesto).

Personalmente a mi el local me resultó acogedor a pesar de sus sencillez, nada que ver con esos locales modernos que proliferan para comer en Toulouse. En cuanto a la comida no terminó de convencerme, ni la presentación ni el sabor. He de reconocer que la atención es muy buena y sólo os recomiendo este local si queréis descubrir la gastronomía occitana.

Cosmopolitain (1 Rue des 3 Journées)

A dos pasos de la Place Wilson se encuentra este gran y moderno local. Frecuentado por gente joven, es el lugar perfecto para una comida o cena informal y para reunirse con amigos para beber e incluso bailar. Y es que este local hace las veces de restaurante y de local de copas. Los comensales que vimos por la noche en las mesas iban desde grupos de gente joven a familias disfrutando de lo que en España llamaríamos “unas raciones” (aunque en España, la verdad, son más generosas).

Tienen carta para mediodía y para la noche, diferentes entre ellos. El primero ofrece varias opciones de menú y por supuesto, platos a la carta. La noche tiene una carta mucho más reducida. En ella hay desde sencillas patatas fritas a carpaccio, gambas o costillas. Sin duda una vez terminada la cena, lo mejor es pedir algún cóctel de su larga lista. Una buena forma de despedir la noche.

5 Wine Bar (5 Rue de la Bourse)

Este local recomendado en revistas especializadas y reconocido como “el mejor bar de vinos de mundo” es sin duda un lugar no sólo para comer en Toulouse. También para beber, pero no cualquier cosa. A este restaurante se va a beber vino. Cuentan nada menos que 4.000 vinos diferentes que llegan a sumar 20.000 botellas. Ante tal variedad, lo mejor es dejarse aconsejar por los camareros de 5 Wine Bar. Ellos te hacen algunas preguntas para conocer tus preferencias y luego te ofrecen algunas posibilidades que se adaptan a ellas.

Cuenta con un menú de mediodía (con una opción vegetariana), y por la noche tiene también varias opciones que giran siempre en torno a la cata de vino. Se van sirviendo pequeñas tapas creativas, bien presentadas y elaboradas que se acompañan de diferentes vinos.

El local a pie de calle es bullicioso, allí está la barra y hay algunas mesas en las que se apiñan los clientes. El nivel inferior, de ladrillo visto, resulta mucho más tranquilo. No es un restaurante al uso de mesas altas, aquí se invita al relax en cómodos sofás o sillones. Un lugar para acudir en pareja o con amigos y disfrutar de una velada con los mejores vinos. Importante: no olvidéis reservar.

The Flower’s Café (6 Place Roger Salengro)

¿A quién no lo apetece un té o un café con una buena tarta? Incluso estando de viaje, hay quien no se resiste a ese tipo de paradas, que además de servir para endulzar el día, también vienen genial para hacer una parada y reponer fuerzas. Si vais a viajar a Toulouse y queréis conocer alguna cafetería coqueta con tartas deliciosas, yo os recomiendo The Flower’s Café.

En la planta baja del local, que también es tienda, podéis ver en las vitrinas todas las tartas y pasteles que ofrecen en su carta. El primer piso, decorado con mucho encanto, es el lugar en el que sentarse y disfrutar de un momento dulce. Lo mejor es buscar una mesa cerca de las ventanas sobre la animada plaza, pero ya os digo que es algo complicado.

La carta incluye una gran variedad de tés: de China, de Ceilán, del Himalaya, con menta, con naranja,… Por supuesto también hay café, pero no tantas opciones. En cuanto a las tartas todas tienen un aspecto delicioso. Las hay de chocolate, de frambuesa, limón, nuez o queso. Las porciones no son caras, 4 € si se consume en el local y un poquito menos si es para llevar. Una deliciosa merienda a un precio más que ajustado.

Estas son mis recomendaciones de lugares donde comer en Toulouse. ¿Vosotros conocéis esta ciudad? ¿Tenéis alguna sugerencia?