Comer en Cerdeña: 10 platos típicos sardos

Si os gusta la comida italiana, está claro que comer en Cerdeña será para vosotros un placer. Nosotros hemos disfrutado de muchas cosas en esta isla, y os aseguro que una de ellas ha sido su gastronomía. Buenas pastas, pescado fresco, deliciosos quesos. Comida sencilla elaborado con productos de la tierra, del mar y yo diría que siempre, con una buena dosis de cariño. Uno se sienta a la mesa y muchas veces siente estar comiendo en casa algún plato preparado por la mamma o la nonna.

Comer en Cerdeña

Perteneciendo a Italia, está claro que la pasta tiene que formar parte de la gastronomía sarda. No hay un restaurante o trattoria en cuya carta no aparezcan diferentes pastas en la lista de primeros platos. Más no solo de pasta viven los sardos. Ni tampoco los turistas que llegan a la isla.

En los menús de muchos restaurantes aparecen platos tan típicos y conocidos cómo los spaghetti carbonara o al pesto. Por mucho que os gusten y conozcáis, animaros a probar todo lo que se puede comer en Cerdeña y que raramente los encontraréis en otros lugares de Italia. Porque la comida sarda, por muy sencilla que sea, no deja de ser especial.

Platos típicos que comer en Cerdeña

Cómo os decía, la base de la comida en Cerdeña son productos de proximidad. Cerca del mar es más habitual encontrar marisco y pescado, mientras que en el interior los embutidos y las carnes son los protagonistas de la comida. La calidad de los productos es buena, las verduras son frescas y los quesos están considerados de los mejores de Europa.

A continuación os voy a dejar una pequeña relación de platos típicos que comer en Cerdeña. Algunos se pueden encontrar preparados de diferentes formas, pero siendo la base siempre la misma pasta, carne o pescado.

Pane Carasau, pan al estilo sardo

Nada más sentarte a la mesa en cualquier restaurante de Cerdeña te traen una cesta o una bolsita de papel con diferentes panes. No esperéis los típicos grisines tan habituales en los restaurantes italianos. En Cerdeña, el rey de la cesta del pan es el pane carasau. Elaborado con trigo duro, agua y sal, la masa que se pasa dos veces por el horno. El resultado es un pan crujiente y tan fino que deja pasar la luz. Es por ello que también se le conocer como papel de música. Un verdadero vicio, está muy bueno y es perfecto para acompañar embutidos y quesos.

Bottarga, de lo más típico para comer en Cerdeña

Los sardos no han sido un pueblo con tradición de pescadores. A la isla llegaban piratas e invasores con frecuencia, por lo que era mejor no alejarse de la costa y alimentarse de lo que lo hubiera cerca de ella. Como los salmonetes, a cuyas hembras se les extrae la bolsa ovárica. Se lava y se cubre de sal marina para más tarde secar todo lo posible y secar al sol. Así se consigue la bottarga. Un producto que se puede consumir cortado en finas láminas o rallado sobre huevos, pastas o arroces. Es fuerte y da un sabor muy característico.

Queso pecorino

Los quesos pecorinos sardos están hecho con leche de una raza concreta de oveja, la raza sarda. Llevan siglos produciéndose quesos en Cerdeña, isla en la que se puede encontrar la mayor variedad de quesos pecorinos de Europa. Si en un restaurante se pide como antipasti una bandeja de quesos sardos, habrá más de uno de este tipo. Pero en este caso lo mejor es ir a un mercado, cómo el de San Benedetto, un lugar que merece la pena visitar en Cagliari. Allí, en cualquiera de sus puestos, os darán a probar varios pecorinos hasta que encuentres el que más te gusta.

Embutidos de Cerdeña

Los embutidos de Cerdeña forman parte de cualquier bandeja de antipasti di terra que se pida. No faltarán en esa bandeja salami, lomo y jamón. Todos ellos poco especiados y con un inconfundible sabor ahumado. Un imprescindible para comer que podréis encontrar en mercados y restaurantes de todas las localidades que ver en Cerdeña.

Culurgiones

Llegamos al apartado de la pasta para comer en Cerdeña. Los culurgiones son una pasta rellena generalmente de queso, si es pecorino mejor que mejor. Se pueden encontrar recetas con verduras y diferentes salsas. Yo sin duda me quedo con la receta básica y más típica, la que cubre la pasta de hierbas aromáticas y salsa de tomate. Simplemente deliciosa.

Fregola, algo muy típico para comer en Cerdeña

Hay quien compara esta pasta sarda con el cuscús. A mí este último no me gusta y la fregola me pareció deliciosa. Se puede encontrar en sopas o en platos con marisco, algo parecido a una paella, pero a la italiana. Nos gustó mucho, pero inevitablemente, en algunos lugares la probamos mucho más buena que en otros.

Salsiccia

A los sardos parece que les gusta añadir salchichas a cualquier plato, ya sea fresca o en forma de embutido. De hecho, la pizza sarda lleva entre sus ingredientes salsiccia. Podéis encontrarlas de carne de cerdo, pero también de caballo e incluso de asno. En la carta de muchos restaurantes, en la sección de carnes, es habitual encontrar carne de caballo.

Marisco

Las gambas, mejillones y almejas se emplean en la elaboración de muchos platos de pasta, incluso en pizzas. Llegan a la mesa con sus conchas, así que no queda más remedio que terminar con las manos manchadas si uno quiero disfrutar a tope del plato.

Otro plato de marisco típico para comer en Cerdeña es la langosta. La temporada va de marzo a agosto, y el lugar perfecto para probarla es en Alghero, ciudad en la que se ofrece aragosta alla catalana (con tomate y cebolla).

Seadas, un postre típico que comer en Cerdeña

Para terminar una comida típica de Cerdeña hay que pedir seadas. Es un postre dulce y pesado para el que hay que dejar un buen hueco en el estómago. Son una especie de empanadillas rellenas de ralladura de naranja y queso y cubiertas de miel. Es raro el restaurante en el que tienen este postre sardo.

Mirto

Se puede dar por terminada la comida o la cena tomando un licor digestivo. El más clásico entre los licores sardos es el mirto (rosso o bianco).  Este licor típico de Cerdeña se elabora con los frutos de un arbusto del mismo nombre. Se sirve bien frío, en copitas pequeñas. Es fuerte, pero tiene un sabor agradable.