El Castillo de Beaufort es uno de los edificios históricos que visitar en Luxemburgo. A las afueras de la pequeña población que le da nombre, el castillo está rodeado por colinas cubiertas de praderas y bosques que con la llegada del otoño se tiñen de dorado gracias a los robles que crecen en ellos.
Este castillo de origen medieval comenzó a ser construido en el siglo XI finalizando las obras seis siglos después. Sus imponentes ruinas, deshabitadas durante 300 años, fueron objeto de reformas hace un siglo, tras las cuales el Castillo de Beaufort abrió sus puertas a los visitantes. Actualmente es junto con el Castillo de Vianden y el Castillo de Bourscheid uno de los más visitados en Luxemburgo.
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Cómo llegar al Castillo de Beaufort
Si se cuenta con un vehículo privado, la mejor forma para recorrer el país, se puede llegar hasta el Castillo de Beaufort en 45 minutos desde la capital, tras descubrir los mejores lugares que ver en Luxemburgo Ciudad.
En el caso de estar en la capital de Luxemburgo, para llegar al castillo en transporte público no queda más remedio que utilizar dos autobuses. El primero desde la capital hasta Mersch, y el segundo desde esa localidad hasta Beaufort. La parada del autobús está a 10 minutos a pie del castillo. La parte buena de hacer el trayecto en transporte público es que es gratuito en todo el país. La mala, que tardaréis mínimo 90 minutos en ese trayecto.
Otra forma de visitar este castillo es reservar la excursión a Beaufort, Vianden, Echternach y cascada de Schiessentümpel que tiene una duración aproximada de 8 horas.
Castillo Medieval de Beaufort
Una de las mejores cosas de ir a ver este castillo luxemburgués es que no veréis un castillo, sino dos. Y es que muy cerca del idílico lago Haupeschbaach hay un castillo medieval y otro renacentista. Ambos abiertos al público.
Primero vamos a hablar del más antiguo, el medieval. Un edificio cuya construcción tuvo lugar en cuatro periodos diferentes, dando lugar a un castillo en el que conviven los estilos románico, gótico y renacentista.
Fue en el siglo XI cuando, sobre las ruinas de una pequeña fortaleza que dominaba el Valle del Mosela, se comenzó a levantar el castillo. La ubicación tenía gran importancia, pues formaba parte de una línea de fortalezas en la frontera de los tres países por las que fluye el Mosela: Francia, Luxemburgo y Alemania.
A finales del siglo XII se reforzaron los muros del castillo, se levantó una torre y se amplió el acceso a la fortaleza. Ya en el siglo XIV, el Castillo de Beaufort cambió de manos y los nuevos dueños realizaron varias ampliaciones, aunque siempre manteniendo el estilo arquitectónico.
En el siglo XVI, tras pasar la propiedad de la fortaleza a una nueva familia, se abrió en el castillo una amplia galería de estilo renacentista con grandes ventanales.
Este castillo llegó a pertenecer al emperador Carlos V y más tarde a Felipe II, su hijo. Este último otorgó su propiedad a algunos de sus vasallos, uno de los cuales tuvo que venderlo por no poder hacer frente a sus deudas ni a las reparaciones que podría necesitar el castillo tras la Guerra de los Treinta Años.
Visitar el castillo medieval
La zona de Luxemburgo en la que se encuentra el Castillo de Beaufort es conocida, por sus valles, bosques y colinas como la pequeña Suiza. Un entorno que convierte a esta fortaleza europea en un atractivo lugar para visitar, no solamente por su historia. También por el bonito paisaje que la rodea.
Desde la carretera que lleva al parking se tiene una bonita vista, con las ruinas del castillo sobre una colina, rodeado de praderas y árboles. Sus muros de piedra y sus torres redondas, con ventanas ojivales, forman una bonita estampa. En los días otoñales, la niebla que llega del lago parece bailar a su alrededor, dando al lugar un ambiente mágico y sugerente.
Una vez en el interior, se pueden recorrer los pasillos del castillo para llegar a la cámara de tortura, a la torre de vigilancia y a la sala en la que se expone una maqueta del Castillo de Beaufort.
Horario del castillo medieval
El castillo abre todos los días del 15 de marzo al 30 de noviembre (comprobar fechas pues puede variar de un año a otro).
El horario es de 9:00 a 18:00 horas, siendo la hora permitida para el último acceso las 17:15 horas.
Precios del Castillo de Beaufort
- Entrada general 7 €
- Grupo a partir de 12 personas 6 € (por persona)
- Niños menores de 6 años entrada grauita.
- Niños de 7 a 18 años 4 €
- Estudiantes hasta 27 años 4 €
- Entrada gratuita con la Luxemburg Card
Castillo Renacentista de Beaufort
Cuando el vasallo de Felipe II vendió el castillo, lo adquirió el Barón de Beck, personaje que llegó a ser gobernador de Luxemburgo. El continuó con la ampliación de estilo renacentistas. Pero falleció y fue su hijo el encargado de finalizar las obras.
Desde la carretera no se puede ver la silueta de este castillo, del siglo XVII. Pero basta caminar unos metros más para encontrar el segundo de los castillos que ver en Beaufort.
Este segundo Castillo de Beaufort se fue renovando a lo largo de los siglos, ampliaciones incluidas. Sin embargo, ha mantenido prácticamente intacto su estilo original.
Sus estancias conservan la antigua e impresionante decoración que dejaron los últimos propietarios del castillos, así como los jardines e incluso, la vieja destilería, cuyos licores de frutas del bosque se siguen comercializando.
Horario del castillo renacentista
Este castillo abre de jueves a domingo entre marzo y noviembre.
Solamente se puede visitar en uno de los dos recorridos que se realizan cada día, a las 11:00 y a las 16:00 horas.
Fuera de esos horarios se pueden solicitar visitas privadas, siempre con antelación, en cualquier fecha del año, excepto las vacaciones de carnaval y los días 24 y 25 de diciembre y 1 de enero.
Precio del castillo renacentista de Beaufort
- Entrada general 14 €
- Menores de 6 años entrada gratuita.
- Niños hasta 18 años y estudiantes menores de 27 años 7 €
- Acceso incluido con la tarjeta turística de Luxemburgo.
