Llegado el momento de viajar entre Siem Reap y Phnom Penh, dudé si hacer el trayecto entre estas dos ciudades en autobús nocturno y llegar de madrugada a la capital camboyana o mejor hacer el viaje en avión para aterrizar descansados. Valoré muchas opciones, pero cuando encontré un vuelo de Cambodia Angkor Air que salía de Siem Reap a las 8 de la mañana, no lo dude y decidí que esa sería nuestra opción.
En aquel momento me pareció una elección muy acertada. Con ese horario de Cambodia Angkor Air íbamos a aterrizar temprano en el Aeropuerto de Phnom Penh y tendríamos todo el día para conocer la ciudad. Pero todo eso fue lo que pensé al principio. Porque tan solo un par de semanas antes de emprender nuestro viaje rumbo a Asia empezaron a llegarme notificaciones de cambio de horario en la salida de nuestro vuelo. Primero una hora más tarde. Pocos días después uno nuevo retraso y tan solo tres días antes un último aviso que retrasaba nuestra salida cuatro horas.
Intenté por todo los medios contactar con Cambodia Angkor Air. Explicar que con una demora de más de tres horas el cliente tiene derecho a devolución del importe o plaza en un vuelo de su conveniencia (todo esto asesorada por alguien que conoce el tema). Pero nada, la negativa a mis peticiones fue su respuesta y sólo me quedaban dos opciones: perder el importe de lo billetes e irme en autobús o aguantarme y ver en Phnom Penh aquello a lo que nos diera tiempo. Lo único que me ofrecían era cambiar mi vuelo a la noche anterior pagando por cada plaza un extra que pasaba a duplicar el precio original. Y por supuesto, nada de indemnización por ese retraso de cuatro horas.
Estaba realmente enfadada con este tema. No entendía que habiendo encontrado al hacer la compra vuelos en tantos horarios, todos ellos se fueran cancelando para dejar al final solamente uno a las doce de la mañana. Yo seguía pensando que había gato encerrado en todo aquello. Y claro que lo había. Cambodia Angkor Air vende sus billetes y luego sencillamente reagrupa en el vuelo que más le interesa a todos los viajeros. Aquella mañana, de los cuatro vuelos que en teoría debían haber salido desde Siem Reap a Phnom Phen, tan sólo voló el nuestro. Y no iba lleno.
Cambodia Angkor Air: nunca más
Os he querido contar mi experiencia con esta compañía para evitar que alguno más caiga en la misma “trampa” que yo. Aunque la atención a bordo fue buena y no tengo queja sobre el viaje, lo cierto es que este tipo de cosas afectan al viajero y sus planes. Gracias a esta compañía tuve que dejar en pendientes algunos de los lugares que ver en Phnom Penh. Cuando se viaja sin billete de vuelta, un retraso de unas horas puede no importar. Pero cuando estamos de viaje con fecha de retorno, unas horas pueden ser un gran trastorno.
Ante mi experiencia, sabiendo lo que ahora sé, hubiera tomado otra decisión. Hubiera viajado desde Siem Reap a Phnom Penh en autobús nocturno. Éstos llegan a la capital camboyana alrededor de la 5 a.m. Hubiera reservado una noche más de hotel para a nuestra llegada ir a darnos una ducha y quizá dormir un poco. Y con todo eso, me hubiera gastado menos de lo que me costaron los dos billetes de avión (92 €).