Laguna Nivaria, un hotel que apuesta por el medio ambiente

Cuando supe que volvíamos a Tenerife tenía claro que estaba vez iba a cambiar nuestra forma de recorrerla. En nuestra primera visita a la isla elegimos un hotel en Adeje, y desde allí, con nuestro coche de alquiler, fuimos a todos los lugares que queríamos conocer. Pero en este nueve viaje decidí que nuestro aeropuerto sería Los Rodeos. Allí alquilaríamos un coche para recorrer la isla pernoctando en varios puntos. La primera de esas noches de nuestro periplo tinerfeño fue en La Laguna. Me apetecía especialmente dormir esta bonita ciudad Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y así poder verla también iluminada al anochecer. La oferta hotelera de la ciudad no es excesiva. De entre los alojamientos que encontramos nos decantamos por el Hotel Laguna Nivaria.

Localizar este hotel es sencillo pues está en uno de los laterales de la Plaza del Adelantado, la más importante del casco histórico de La Laguna. Aunque no se puede aparcar en su puerta, si se puede estacionar para dejar el equipaje. El problema viene a la hora de buscar una plaza en la que dejar aparcado el coche. Con un poco de suerte se puede encontrar una en la misma plaza. O bien ir al parking gratuito que hay tras ella. Si el caso es muy desesperado porque no hay forma de encontrar un hueco, siempre se puede recurrir al parking de pago situado en un lateral del Hotel Laguna Nivaria.

Todo sobre el Hotel Laguna Nivaria

El hotel lo componen dos edificios: Laguna y Nivara. El primero está ubicado en una mansión del siglo XVI. Dicha mansión es parte del edificio principal del Hotel Laguna Nivaria. Ahí está la recepción, la escalera que lleva a los pisos superiores, algunos salones y también varias de las suites. Son varios los espacios comunes en esta parte del hotel, perfecto para reunirse en ellos cuando el tiempo en  La Laguna es más desapacible o en esos días de lluvia tan frecuente en esta localidad que ver en Tenerife.

A este edificio se le ha añadido un anexo con habitaciones y el restaurante. Tras este conjunto, se ha levantado otro edificio, el Nivaria, con más habitaciones, todo en el mismo estilo y color. En el este edificio también están el gimnasio y el spa del hotel. En el espacio que queda entre estas construcciones, han aprovechado para colocar un pequeño jardín y la terraza del restaurante. Un lugar perfecto para relajarse tras la visita a San Cristobal de la Laguna.

El Hotel Laguna Nivaria puede presumir de haber obtenido distintos reconocimientos, desde los que agradecen su ayuda con el colectivo de discapacitados a los que premian su apuesta por el turismo sostenible. Este hotel de La Laguna está empeñado en minimizar el impacto medioambiental y por ello está diseñado para aprovechar la luz natural o reducir las emisiones de CO2. Los productos de limpieza tienen sello ecológico. Y muchos de los productos utilizados en su restaurantes proceden de su propia finca: huevos de “gallinas felices” y frutas y verduras ecológicas.

En cuanto al personal del hotel es extremadamente amable. Desde la recepción a los camareros todo son buenos gestos y atención para que te sientas como en casa.

Las habitaciones del Hotel Laguna Nivaria

Nos alojamos en una de las suites, la 202. No encantó que estuviera en el edificio Laguna, algo que quedaba patente en sus gruesos muros, las puertas francesas y sus ventanas con marcos de madera y vistas a la Plaza del Adelantado. Se trata de una habitación muy grande. Tras cruzar el umbral de la puerta se accede al salón. En esta estancia hay también una pequeña cocina americana y una mesa perfecta si se decide cocinar para comer o cenar en la suite.

Una puerta conduce al dormitorio. Allí nos esperaba una gran cama, un escritorio y una butaca junto a la puerta que daba al vestidor. Otra puerta en el dormitorio da paso al baño.

Lo mejor de la habitación

• Cama muy confortable. Y las almohadas, algo a lo que casi siempre pongo pegas, también eran perfectas.
• Todo estaba ordenado y perfectamente limpio.
• A pesar de estar en un calle muy transitada, la insonorización es buena. Al cerrar las ventanas todos los ruidos quedaban fuera.
• El wifi está disponible en todo el hotel y en las habitaciones funciona perféctamente.
• En el baño encontramos variedad de amenities, incluidos cepillos de dientes, y unas toallas grandes y esponjosas.
• Aunque no la utilizamos, tener una cocina no esta mal. Sobre todo por la nevera, que aunque estaba vacía, siempre está bien para tener algún refresco o agua fría.
• Me encantaron los ventiladores de techo, perfectos para refrescar un poco cuando no hace tanto calor como para poner el aire acondicionado.
• Un punto a favor del Hotel Laguna Nivaria por la buena iluminación, tanto en la zona de estar como en el dormitorio. No me gustan esas habitaciones en las que tienes que ir a tientas porque no tienen suficientes puntos de luz.

Lo que no me convenció de la habitación

• En la cocina teníamos un hervidor de agua y tazas, pero curiosamente no encontramos el habitual servicio de té y café que suelen ofrecen tantos hoteles cuando tienen ese electrodoméstico.
• Algunos de los muebles necesitan un cambio urgente. Están bastante estropeados y les falta encanto, algo que no entiendo estando en un hotel tan acogedor como este.
• La bañera es demasiado alta. Hay que hacer equilibrios para salir de ella.
• Pequeños detalles como las perchas rotas en el baño restan puntos a un hotel que tiene todo para ser el mejor de La Laguna.

El desayuno del Laguna Nivaria

Me gustó la opción de poder disfrutar del desayuno buffet en el patio del edificio Laguna o dentro del restaurante. Nosotros elegimos una mesa en el patio, tranquila y muy luminosa. En el comedor había varios mostradores con productos variados. En uno encontramos huevos, bacon e incluso judías. Todo para un perfecto desayuno inglés. En otros había fruta fresca, quesos, yogures o cereales.

También se ofrece en el desayuno del hotel pan y bollería recién hecha. Hay tostadores disponibles así como máquinas para los zumos y los cafés. Yo desayuno té, y eché en falta más variedad de infusiones.

Servicios del hotel

• Spa
• Parking de pago
• Restuarante
• Ascensor
• Salones de reuniones
• Cafetería
• Transporte de pago a y desde el aeropuerto
• Alquiler de coches y bicicletas
• Visitas guiadas

Qué ver cerca del Hotel Laguna Nivaria

Para mi la ciudad tinerfeña de San Cristobal de la Laguna es la ciudad más bella de Canarias. Pasear por las calles de su casco antiguo es un placer, ya sea a la luz del día o al caer la noche. Durante el paseo no hay que perderse estos lugares:

• La Catedral, declarada Bien de interés Cultural en 1983. Su fachada neoclásica es el único elemento que perdura de la edificación original.
• Real Santuario del Santísimo Cristo de la Laguna, a las afueras del casco histórico.
• La Casa Salazar, hoy Palacio Episcopal. Hay que curiosear para descubrir sus bellos patios.
• Palacio Lercaro. Actualmente aloja el Museo de Historia. Visitarlo ofrece la oportunidad de descubrir el interior de una de las mansiones más impresionantes de La Laguna.
• Casa de los Capitales Generales. No hay excusa para no visitar esta casa, pues en ella está la Oficina de Turismo de la ciudad.
• Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción. Es uno de los templos más antiguos de la isla y en ella destaca su torre, que sobresale sobre los edificios que la rodean.
• Casa de Ossuna, sede del Instituto de Estudios Canarios. Es una de las construcciones más bonitas de la ciudad, con un agradable jardín en su parte delantera.