Dormir en Almagro: Hotel Spa La casa del Rector

Hace unos meses gané gracias a una colaboración en Instagram una noche de hotel en alguno de los establecimientos asociados a la cadena Rusticae. Valoramos las opciones que nos ofrecieron para disfrutar de ese premio. Finalmente nos decidimos por visitar los famosos molinos de viento de Campo de Criptana y dormir en Almagro. Nos alojarnos en La Casa del Rector, un hotel muy peculiar que por las diferentes áreas que lo forman bien se podría decir de él que son tres hoteles en uno: rústico, moderno y de diseño. Sin duda, un estilo para cada cliente.

Dormir en Almagro: La Casa del Rector

Nada más acceder al hotel uno se encuentra en un cuidado patio manchego con fuentes y columnas, pero como peculiaridad está cubierto para de este modo poder aprovechar el espacio como zona de comedor o estar para los clientes. Fue esta zona, la que corresponde al hotel rústico, con la que La Casa del Rector abrió sus puertas en el año 2001 tras restaurar una casa del siglo XVIII que perteneció a una acaudalada familia judía de la ciudad. Consiguieron conservar todo el sabor de una casa antigua combinada con múltiples pinceladas de color. A este patio se abren algunas de las suites del hotel, todas decoradas en ese estilo rústico que el patio ya nos muestra.

Para aquellos que este estilo les resulte demasiado recargado o anticuado, hay una segundo patio en torno al cual se encuentra el hotel moderno. Esta zona se inauguró algo más tarde con un aire totalmente diferente al del patio manchego que sirve como recepción del hotel. El espacio también pertenecía a la casa original, siendo la zona de las cuadras. Aquí las habitaciones son también suites aunque de distintos tamaños y todas con una decoración cuidada y moderna en la que no faltan los detalles. Tan acogedoras son que la actriz Penélope Cruz eligió la de las fotos de abajo como alojamiento mientras rodaba con Pedro Almodovar la película “Volver”.

La última zona del hotel en abrir al público fue la que ocupa el hotel de diseño y el Spa del establecimiento. Aquí también hay una patio interior al que se abren algunas de las habitaciones, la piscina del Spa y el comedor el hotel, común para todos los huéspedes.

Es en esta zona donde estaba nuestra habitación. La verdad es que cuando la vi me agradó bastante por su tamaño, decoración y por tener todo lo que se puede necesitar para pasar cómodamente una noche fuera de casa. Aire acondicionado, TV, mini bar, servicio de té y café, caja fuerte, amenities en el gran baño… Además cosas tan importantes para mi como un buen aislamiento lumínico o acústico estaban perfectamente conseguidas.

Detalles como varias almohadas o la ropa de cama y baño cuidada son cosas que me resultan muy agradables en un hotel, y aquí lo tenían. La iluminación de la habitación era buena, pero la verdad es que había tantos interruptores y opciones que era un verdadero jaleo conseguir tener encendida nada más que la luz que uno quería.

En cuanto a la limpieza en general era bastante correcta, sin embargo creo que en un establecimiento de esta categoría las cosas tienen que estar perfectas, y no se pueden permitir lavabos con manchas o una ducha bajo cuya base de madera el cliente pueda ver esos restos de humedad acumulada que tan mal efecto causan. No solo tiene que estar limpio lo que se ve….

Es en esta zona de diseño del hotel donde se encuentra la suite más llamativa, tanto por decoración como por color, tamaño o vistas. Es tan exclusiva que para llegar a ella hay que tener un código especial de acceso en el ascenso.

Mencionar que el hotel también sirve como sala de exposiciones en todo su espacio, por lo que el cliente verá colgadas de sus paredes obras de arte de diferentes artistas, todas ellas a la venta.

Espero que después de este post os animéis a conocer y dormir en La casa del Rector de Almagro. Su ubicación es muy buena, en una tranquila calle a pocos minutos andando de los lugares que ver en Almagro. Se puede aparcar con bastante facilidad, pero si alguno prefiere tener su coche en un parking cerrado, el hotel cuenta con plazas (su precio 11,50 euros por día).

Y para quien quiera desayunar en el propio hotel, se puede optar por el desayuno buffet (11 € por persona) o por el continental (5 €).

En cuanto a los precios del hotel dependerán de la habitación, pero hay que calcular que parten de 80 € la habitación doble standard. Cuantan con paquetes para más noches en las que se pueden incluir comidas o entradas para el teatro.

Por último dar las gracias al dueño y director del hotel por contarme cosas sobre el mismo y dejarme curiosear por algunas de sus habitaciones.