La reina de la fiesta en Croacia es Dubrovnik. Cuando alguien piensa en viajar en Croacia seguro que le viene esa ciudad a la cabeza. Con sus calles de mármol, su muralla y sus palacios nadie la quita protagonismo. En segundo lugar, también en la región de Dalmacia, estaría Split. Patrimonio de la Humanidad gracias al Palacio de Diocleciano, esta ciudad se está haciendo cada vez más popular entre los viajeros. Y seguramente poca gente fuera de Croacia pueda nombrar más localidades de esa parte del país. No por falta de otras ciudades bellas. Solamente por desconocimiento. Una de esas ciudades posee una de catedrales más bonitas de Croacia. Está en un precioso enclave junto al mar. Pero es la gran olvida de Croacia. Os cuento qué ver en Sibenik, una ciudad bella y tranquila junto al Adriático.
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Qué ver en Sibenik
Sibenik se puede dividir en tres zonas: la parte nueva, la parte alta con las fortalezas y la ladera de la montaña con estrechos callejones y muchas cuestas. Estas dos últimas partes de la ciudad se pueden visitar cómodamente en una mañana.
Nosotros estábamos alojados en la cercana Trogir y desde allí fuimos en coche para conocer la ciudad. Le dedicamos varias horas y recorrimos sus lugares más señalados con tranquilidad. Nos dimos cuenta que son pocos los viajeros que llegan a la ciudad. Probablemente porque desconocen que ver en Sibenik. Seguro que no saben que la ciudad posee un barrio medieval, una fabulosa catedral y antiguos palacios de ventanas ojivales.
Nosotros empezamos nuestro recorrido dejando el coche junto al canal que baña la zona en la que está el casco antiguo. Paseando junto al mar pusimos rumbo a la parte histórica de Sibenik
Obala Franje Tudmana
Podría ser un paseo marítimo. Pero sin terrazas en las que sentarse a tomar un helado. Esta avenida tiene un paseo junto al mar, calzada para coches y otra acera junto a los edificios. Es un bonito lugar desde el que disfrutar de la estampa de la ciudad trepando por la ladera de la colina en la que está construida.
Catedral de San Jacobo
Nada más pasar el Museo de la Ciudad hay que cruzar un arco para entrar en el casco antiguo de Sibenik. De este modo lo primero que se ve de la catedral de la ciudad es su ábside encajonado entre los antiguos edificios. Hay que rodearla para descubrir el monumento más emblemático de Sibenik y una de las joyas de Dalmacia.
En este templo se pueden ver elementos del gótico veneciano, gótico florido y renacimiento. Posee elementos que la diferencian del resto de catedrales no solo de Croacia, también de Europa. El probable que uno de sus elementos más singulares sean la 71 cabezas que decoran un friso en la parte exterior. Cuentan que son retratos de personajes de Sibenik que donaron dinero para construir el templo. Cada uno tiene una expresión y dicen las malas lenguas que cuanto más tacaño fue el donante más exagera es su retrato. Una joya del arte que puede presumir de estar en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Visitarla es una de las cosas que hay que hacer en Dalmacia.
Dicen que la Catedral de Sibenik es el mayor templo del mundo construido solamente con piedra, sin utilizar otros elementos como madera o ladrillo. Esa piedra llegó desde distintas islas croatas. El templo, además de su entrada principal cuenta con una lateral conocida como el Portal del León. En él dos leones sujetan columnas con las figuras de Adán y Eva.
Contemplando el exterior del templo llaman la atención otros elementos. Una es ese rompecabezas de cúpulas y bóvedas que se van elevando hasta la cúpula de piedra sobre el crucero del templo. La otra, que esta catedral no tiene campanario.
Si el exterior del templo merece verse con detenimiento, el interior es otro de los lugares que ver en Sibenik. Para ello hay que pagar una entrada que permite visitar la Catedral. Lo más llamativo entre todo lo que hay que ver en ella las escaleras laterales junto al altar que llevan por un lado a la sacristía. Y por el otro al baptisterio, una joya escultórica desde la pila bautismal al techo.
Plaza de la República Croata
Es una de las plazas más bonitas de Dalmacia. En uno de sus laterales está la Catedral con el Portal del León. Enfrente está el Ayuntamiento del s. XVl. Lo que vemos es una reconstrucción ya que esté quedó totalmente destruido en 1943 por los bombardeos aliados. Posee un balcón para las autoridades que hoy está acristalado. Actualmente el edificio acoge un bonito restaurante cuya terraza es perfecta para sentarse a tomar una cerveza.
Otros edificios de la plaza son el Palacio Episcopal y antiguos casas. Algunas de ellas se han convertido en hoteles o tiendas. Y en uno de esos edificios está el mejor restaurante de Sibenik: Pelegrini.
Casco antiguo
Después de conocer la Catedral hay que poner ruta a la parte alta de la colina. Para ello nada mejor que pasear sin rumbo por las estrechas calles de la ciudad. Palacios, iglesias y escaleras. Muchas escaleras. Pero no hay que perder el ánimo porque sin duda llegar a lo más alto de la ciudad merece la pena.
Jardín medieval del monasterio de San Lorenzo
En mitad de las calles de la parte antigua de Sibenik está este jardín. Se accede a él desde una cafetería restaurante. Nosotros habíamos leído que se pagaba entrada para verlo, pero nadie nos indico allí que hubiera que hacerlo.
Fue una parada estupenda para coger fuerzas y contemplar esta recreación de un jardín medieval junto a lo que queda del monasterio de San Lorenzo. En él diferentes hierbas y plantas medicinales en cuidados arretes.
Fortaleza de San Miguel
Abierto desde la 9 de la mañana a las 9 de la noche esta fortaleza es uno de los lugares que ver en Sibenik. Las vistas desde este lugar son la recompensa para quien llegue a lo más alto de la colina dejando atrás las casas y los palacios medievales. Para acceder a esta fortaleza del siglo XV hay que pagar entrada. Una vez dentro además de recorrer las murallas se pueden ver distintas estancias que funcionan con museo y que muestran la historia del lugar. Un enclave que parece ser ya estuvo habitado en tiempos prehistóricos, aunque los que dejaron mayor huella fueron los venecianos.
La fortaleza de San Miguel abre sus puertas también por la noche. Es entonces cuando se convierte en un magnífico escenario desde donde disfrutar de conciertos de artistas nacionales e internacionales.
Curiosidades de Sibenik
Si al ver las fotos de este post te suenan esos lugares puede ser porque la famosa serie Juego de Tronos rodó su quinta temporada en la esta ciudad.
Además esta ciudad es famosa por ser el lugar de nacimiento del jugador de baloncesto Dražen Petrović. Y también del inventor del paracaídas.
También como curiosidad, decir que Sibenik fue la primera ciudad del mundo que utilizó la corriente de alterna. Y que es la ciudad de Croacia con más escaleras.
Cómo llegar a Sibenik
Si viajas por libre seguramente hayas alquilado un coche. Sin duda es el medio de transporte más sencillo para llegar a Sibenik. Nosotros viajamos desde Trogir hasta esta ciudad y eso nos permitió hacer una parada intermedia en otra pequeña y preciosa ciudad: Primosten.
Una vez en Sibenik hay que saber que no se pude aparcar en cualquier lugar y que además todo el centro histórico es peatonal. Hay una zona de aparcamiento cerca de la Fortaleza de San Miguel. Y un parking de pago cerca de Obala Franje Tudmana y junto a una gasolinera.
Si no cuentas con coche propio eso no será excusa para no visitar Sibenik. También se puede llegar a esta ciudad en autobús desde diferentes ciudades de Croacia.
12 comentarios
Pues después de leer tu entrada me ha dado coraje. Cuando recorrimos la costa croata pasamos por delante y no nos paramos porque no teníamos referencias de ella, si llegamos a leerla antes.
Dormimos en Split, Trogir y Zadar, podíamos haber parado para ver la plaza que tiene una pinta estupenda y visitar el fuerte. En lugar de dormir en Trogir podríamos haber dormido allí.
Vaya descubrimiento que habéis tenido.
Saludos Viajeros
Mira que lo siento, porque de verdad es una ciudad muy atractiva. Solamente un paseo por casco antiguo ya merece la pena… Igual regresas en un futuro. Entonces no tendrán perdón que pases por Sibenik. Un abrazo.
Desde luego lo más impresionante es la catedral. No recordaba esto de que era la mayor del mundo construida en piedra. Bien curioso. Me quedé con las ganas de visitar el PN Krka que está cerquita de aquí. ¿lo visto tu?
También nos quedamos con ganas de visitar Krka, pero somos lentos, nos entretenemos demasiado y no había tiempo para todo. 😉
Nosotros somos de esos que hemos visitado Dubrovnik y tenemos pendiente conocer Sibenik. Habrá que ponerle solución…
¡Saludos!
¡¡Pues ya tenéis una excusa para volver a Croacia!!
Tengo una espinita clavada con Croacia porque hace unos años teniamos previsto un viaje allí pero, por circunstancias de la vida, no pudo ser. Tengo el viaje planificado, pero Sibenik no estaba incluido en el recorrido. Lo voy a incluir ahora mismo, porque nunca se sabe cuando puedes coger las maletas con destino a Croacia!!
Harás bien en incluir Sibenik. Seguro que aunque no sea tan monumental como otras ciudades de Dalmacia disfrutas de un paseo por sus tranquilas calles.
En el próximo mes de julio, tengo previsto viajar por Croacia, en tren, Viniendo de Barcelona en avión, continuando en tren hasta Eslovenia
Que ruta me aconsejerias y que ciudades visitar, en que aeropuerto es mejor ir desde Barcelona, para seguir la ruta.
Muchas gracias,
Saludos, Josep
Hola Josep, siento no poder ayudarte, yo viajé desde Madrid y toda la información sobre mi breve viaje por Croacia la tienes en el blog.
Un cordial saludo.
Hola!!! Me ha resultado curioso lo de “Catedral de San Jacobo”; siempre creí que la catedral era la de San Santiago. Ya me habéis “liao” 😉
Hola, Jose
Pues realmente es lo mismo:
“La Biblia se refiere habitualmente al Apóstol Santiago con el nombre de Jacobo, procedente del hebreo Ya’akov, que pasó al latín como Iacobus, derivando en una gran diversidad de nombres propios en las distintas lenguas europeas al extenderse el cristianismo: Jacobo, Iago, Yago, Tiago, Diego, Santiago, Xacobe, Jaime”