Hasta este año nunca se había cruzado en nuestro camino Singapur. Tengo amigos y conocidos que la han visitado en escalas a otros destinos. Y todos hablaban bien de este país de poco más de 50 años de existencia. Por fin este año, al organizar nuestro viaje a Malasia decidí que era la oportunidad perfecta para descubrir Singapur. Nuestro viaje por el sudeste asiático terminaría ahí. Serían tres días para visitar templos y pasear a la sombra de modernos rascacielos. La lista de lugares que ver en Singapur era amplia. Aún así parecía tiempo suficiente para disfrutar de una de las ciudades más atractivas y modernas de Asia.
Sin embargo la lluvia y un pequeño accidente el último día de nuestro viaje trastocaron un poco los planes. A pesar de ello pudimos hacer casi todo lo programado y conocer bastantes rincones de la ciudad. Tres días pueden dar para mucho, solo hay que organizar qué ver en Singapur, dividir la ciudad por zonas y salir a patear con ganas.
Índice del artículo
Qué ver en Singapur en tres días
Es probable que si no hubiera llovido tanto el segundo día de nuestra estancia hubiéramos sacado más partido a nuestro paso por Singapur. Si no me hubiera torcido dos veces el pie el último día de nuestro viaje, habríamos podido caminar más y más lejos. Pero las cosas salen así. A pesar de ello cumplimos con el 95% de lo que iba a apuntado en nuestra lista de cosas que hacer y que ver en Singapur.
Nosotros nos limitamos a visitar la ciudad. No fuimos más allá de los rascacielos en los que termina la parte urbana de Singapur. Ni dedicamos tiempo a ir a la playa. Selva y mar son también algunos de los lugares que se pueden conocer en este país. En nuestro caso ya íbamos servidos de ambos tras nuestro paso por Malasia. Por ello, todo lo que estaba en nuestra lista de cosas qué ver en Singapur se encontraba en la parte urbana.
Al viajar a Singapur es interesante dividir la ciudad por barrios o zonas para organizar las visitas. De ese modo se evita ir de acá para allá invirtiendo más tiempo y dinero en transportes del necesario. Aquí os dejo que ver en Singapur en cada uno de sus barrios o zonas más atractivas. Todo corresponde a los lugares que nosotros visitamos. Luego bastará llevarlos a un mapa para decidir en que orden visitar cada uno de ellos.
Qué ver en Singapur: Barrio Colonial
Es el barrio más elegante de la ciudad. Amplias avenidas. Parques. Museos. Y de fondo un skyline formando por los más modernos rascacielos. También en esa zona se pueden visitar lo que fueron antiguos muelles hoy convertidos en atractivas zonas de ocio. La visita a esta zona se puede unir a la de Marina Bay , tal y cómo hicimos nosotros, o a Chinatown.
La mejor forma de llegar a este barrio es en metro. Las estaciones de Clarke Quay, City Hall o Raffles Place son perfectas para empezar el periplo por el Singapur colonial.
Coleman Bridge
Un buen lugar para comenzar la visita al barrio colonial de Singapur. Estando sobre él se puede ver hacia un lado uno de los antiguos muelles de la ciudad, Clarke Quay. Hoy se ha convertido en una de las zonas nocturnas más populares de la ciudad. Sus antiguas shophouses han pasado a estar ocupadas por bares y restaurantes. Desde el mismo puente se obtiene también una buena perspectiva del edificio más famoso de Singapur: el hotel Marina Bay Sands.
Ministerio de Cultura
El edificio del Ministerio de Cultura se encuentra junto al puente. Lo que anteriormente fue la estación de policía ha pasado a convertirse en un atractivo edificio. Su fachada blanca aparece salpicada por los intensos colores con los que han sido pintadas todas las ventanas del edificio. En su patio interior hay una galería de arte y una original fuente. Caminando hacia el norte por Hill St se llega a otro de esos bonitos edificios de estilo colonial, la estación de bomberos. No hay que desviarse para verlo si tu destino, como fue el nuestro, es la Catedral de San Andrés. Este templo blanco, ejemplo de arquitectura gótica inglesa, fue financiado por los comerciantes escoceses de Singapur.
National Gallery
Aunque no visitamos su interior si pudimos contemplar desde la calle la impresionante National Gallery. El museo ocupa lo que antaño fueron el Tribunal Supremo y el Ayuntamiento de la ciudad. El conjunto esta dominado por una cúpula que se ve desde distintos puntos del barrio colonial.
Edificios coloniales
Se puede continuar paseando por este bonito barrio hacia el río Singapur. De este modo se pueden ver algunos bonitos edificios coloniales: el Teatro Victoria y la Casa de las Artes. Entre ambos edificios, cerca del río y rodeada de árboles de frangipani está la blanca estatua de Sir Stamford Raffles. Fue el fundador de Singapur en 1819. Es desde esta orilla del río desde donde mejor se puede ver otro de los antiguos muelles de la ciudad, el Boat Quay.
Elgin Bridge
Para cruzar al otro lado del río nada mejor que hacerlo por el Elgin Bridge. Desde ese lugar se puede pasear junto a las shophouses que hasta la década de 1960 formaban parte del Boat Quay. Hoy en día el gobierno de la ciudad la ha declarado zona protegida. Las antiguas casas y tiendas hoy están ocupadas por restaurantes. Algunas de sus mesas están en agradables terrazas junto al río.
Cavenagh Bridge
Al acabar este antiguo muelle uno se encuentra de repente en otra ciudad. Atrás quedan los edificios coloniales. Ahora todo son modernos rascacielos, los turistas son menos y más los oficinistas rumbo al trabajo. Pero antes de despedirnos del barrio colonial hay una cosa que ver en Singapur: uno de sus puentes más bonitos sobre el río de la ciudad. El Cavenagh Bridge. A su lado una sencilla y divertida escultura rinde homenaje a los niños que hace décadas jugaban en las aguas del río Singapur.
Qué ver en Singapur: Marina Bay
No creo equivocarme si digo que los lugares turísticos que encierra este barrio son los más conocidos de la ciudad. Todos los viajeros tienen anotados alguno de sus puntos de interés en la lista de que ver en Singapur. El hotel y los jardines más espectaculares de la ciudad están aquí. En una zona en la que hace una década no había nada. Con este proyecto hecho realidad se ha convertido en uno de los lugares más turísticos de la urbe.
Nosotros lo visitamos tras el recorrido que os he contado por el barrio colonial. Si decidís llegar hasta Marina Bay directamente el metro sigue siendo una buena opción: Bayfront, Esplanade o Raffles Place son las estaciones más cercanas.
Merlion Park
En Merlion Park es donde encontraréis en cualquier momento del día o de la noche más turistas. Todo el mundo quiere hacer una foto con el león fuente que escupe agua sobre el gran lago en el que cada noche se reflejan las luces de la ciudad. Este león se ha convertido en el icono de Singapur y aparece en imanes, bolsos y camisetas. Lo que no todos saben es que tan solo uno metros más atrás, rodeado de arbustos, hay otra fuente con el mismo león pero mucho más pequeño.
Jubilee Bridge
Fue en el año 2015 cuando Singapur celebró 50 años de su independencia. Con ese motivo se realizaron distintas obras en la ciudad y se inauguraron diversas construcciones. Entre ellas el Jubilee Bridge, un puente peatonal que permite caminar desde Merlion Park hasta los teatros con aspecto de durian al otro lado de la desembocadura del río Singapur.
Marina Bay Sands
Puede que el hotel más famoso del mundo sea el Marina Bay Sands. Con sus tres altos edificios sobre los que parece estar varado un barco, su silueta forma parte desde hace menos de una década del horizonte singapurense. Alojarse en él es sin duda un capricho. Nosotros no nos lo dimos pero si disfrutamos de las mismas fantásticas vistas que los clientes alojados en él. Para ello tan solo tuvimos que subir al CÉ LA VI, el bar en el piso 57 del hotel. Antes de subir hay que abonar 20 $ por persona para utilizar al consumir bebidas en el bar o el restaurante. Puede parecer caro, pero subir a la plataforma de observación del hotel cuesta 23 $ y no te dan ni un vaso de agua. Además, desde el bar se tienen vistas de la piscina.
Paseo marítimo
Los que quieran tener las mejores vistas sobre el hotel Marina Bay Sands pueden darse una caminata por el paseo marítimo que rodea Marina Bay. Además de ver el hotel ofrece impresionantes vistas de los modernos rascacielos de la ciudad. Este paseo también es el lugar al que acudir para ver el espectáculo nocturno de luces y laser. Nosotros nos quedamos con las ganas. Fuimos a verlo, pero viendo que pasaba la hora de inicio y no ocurría nada preguntamos. Nos dijeron que durante todo el mes de mayo estaba cancelado. Tendremos que volver…
Gardens by the Bay
Gardens by the Bay es una de las cosas que ver en Singapur de día y de noche. Se trata de un jardín botánico de aspecto futurista. Unos árboles gigantes por los que trepan distintas plantas dominan el lugar. Entrar a los jardines es gratuito. Se pueden recorrer muchas partes de los mismos sin pagar nada. Tan solo hay que pagar entrada para subir al OCBC Skyway, la pasarela flotante que une dos de los grandes árboles artificiales. El precio es de 8 $ por persona y ofrece una visión diferente del parque. Merece la pena subir en ascensor y bajar andando para apreciar como son estos árboles en su interior. Entrar en los distintos invernaderos con vegetación tropical o mediterránea también requiere el pago de una entrada. Nosotros no los visitamos, no os puedo contar si merece la pena o no.
Por la noche hay que regresar a Gardens by the bay para ver el espectáculo nocturno. Algo que sin duda merece la pena. A pesar del calor, de tener que regresar al mismo lugar, del cansancio al final del día. Es una de las cosas que ver en Singapur y que merecen la pena sin lugar a dudas. Es gratuito y tiene lugar todos los días el año a las 19:45 y 20:45. Los grandes árboles se iluminan con distintos colores al ritmo de la música, el día de nuestra visita fue la de Star Wars la que sonaba de fondo.
Qué ver en Singapur: Kampong Glam
Dejamos atrás la parte más moderna de la ciudad para conocer el barrio musulmán. Es otro de los lugares que ver en Singapur y que sorprende y gusta a partes iguales. En sus renovadas calles hay cafeterías donde fumar narguile o tomar un delicioso té, tiendas de perfumes, de telas, restaurantes libaneses y modernos bares que cada noche se llenan de jóvenes.
El sonido de este barrio es la llamada a la oración y las mujeres visten cubriendo su cabeza. Sin embargo aquí todo el mundo es bienvenido. Al fin y al cabo, son muchas las personas en Kampong Glam que viven del turismo. De nuevo el metro es el medio de transporte ideal para llegar a este barrio que hay que ver en Singapur. Las paradas: Lavander y Bugis.
Mezquita del Sultán
Mezquita del Sultán. Con sus dos cúpulas doradas, su fachada blanca y sus minaretes es la estrella de este barrio de Singapur. Originalmente se construyó en 1825 con la ayuda financiera de Raffles, el fundador de la ciudad. Pero en 1928 la mezquita original fue sustituida por la actual, un templo al que los no musulmanes podemos acceder si vestimos con decoro y sin entrar en la sala de oración. Los horarios para la visita varían. Excepto el viernes, que solo se abre por la tarde, el resto de los días se puede entrar de 10:00 a 12:00 y de 14:00 a 16:00 horas.
Muscat Street
En los alrededores de la mezquita hay que recorrer Muscat St. A ella se abren otra colección de esas casas restauradas que tanto embellecen Singapur. La mayoría de ellas son tiendas y restaurantes.
Arab Street y Haji Ln
Arab St y Haji Ln son otras dos bonitas calles llenas de arte urbano decorando las fachadas de las antiguas casas hoy convertidas en bares de moda. De día es una zona tranquila, pero cuando merece la pena pasar por aquí es las noches del fin de semana. Música en vivo, terrazas al aire libre, gente guapa tomando algo tras la cena,… Una cerveza aquí cuesta el triple que en Chinatown, pero un día, es un día.
Parkview Square
El primer día en la ciudad, al ir al metro Bugis, vimos un edificio que llamó nuestra atención. Nos recordaba a Empire State, al Flatiron, a Gotham, la ciudad de Batman. Es un precioso edificio en el que al contrario que en otros edificios que ver en Singapur, el cristal no es el protagonistas. En este edificio llama la atención su color marrón, sus líneas redondeadas y sus atlantes en la parte superior.
Era tal la atracción que nos causaba este edificio que no pudimos acercarnos hasta él. Se llama Parkview Square. En la calle, ante la puerta principal, nos encontramos con una fantástica colección de esculturas al aire libre: Botero, Dalí y la enorme aleta en metal de un tiburón. Entramos al edificio y nos encontramos con uno de esos cafés/restaurantes elegantes que parecen llevarte a la vieja Europa: Atlas. Una visita sorprendente e inesperada que nos descubrió un precioso edificio. Quisimos subir al Museo de los tiburones, pero a esa hora estaba cerrado y no tuvimos tiempo para regresar.
Mercado de Bugis Street
Si quieres ir de compras en Kampong Glam pero no te gusta lo que ves en las tiendas musulmanas siempre puedes ir al Mercado de Bugis Street. Antaño fue la zona más sórdida de la ciudad. Hoy es el mercado cubierto más famoso de Singapur. En él puedes comprar camisetas, bolsos y todo tipos de recuerdos. Es barato, más o menos al mismo nivel que las tiendas de Chinatown y tienen los mismos artículos.
Qué ver en Singapur: Little India
Guirnaldas de flores a las puertas de los templos. Música de Bollywood sonando a todo volumen. Aroma a incienso. Mujeres vestidas con sari. Ese es el paisaje de Little India, el barrio donde sus habitantes parecen, con su piel oscura, recién llegados de Tamil Nadu.
A los que conocemos India pasear por este barrio es como un sucedáneo de la realidad. Aquí hay más limpieza y orden que en la mayoría de las ciudades de India, pero aún así, sus habitantes, con su color de piel y su peculiar movimiento de cabeza, nos hacen sentir un poco en su país de origen. Si decidís llegar hasta este barrio en metro, las paradas son Little India, Jalan Besar o Boom Keng.
Little India está comprendido entre dos calles: Jalan Besar y Serangoon Road. Hay que recorrer las calles principales paseando bajo los soportales de las antiguas shophouses. Tindas y más tiendas en las que comprar comida, incienso o artesanía. Pero también muchos negocios dedicados a la electrónica. Hay que desviarse y curiosear por las calles del barrio. Son más tranquilas que las avenidas principales y hay mucha vida en ellas. El olor a curry, a flores y a incienso te hacen sentir durante un rato lejos de Singapur.
Mezquita de Abdul Gafoor
Si en Chinatown encontramos un templo hindú, en Little India podemos visitar la Mezquita de Abdul Gafoor. Su construcción terminó a principios del siglo XX y parece sacada de un cuento de hadas. En ella se mezcla la arquitectura musulmana con la victoriana y la del sur de India. Se permite el acceso al interior, pero no a la sala de oración. Antes de entrar, hay que mirar hacia arriba para ver el reloj del sol con 25 rayos decorados con el nombre de 25 profetas en caligrafía árabe.
Sri Veeramakaliamman
El templo más importante de este barrio y uno de los que ver en Singapur es el de Sri Veeramakaliamman. Dedicado a la diosa Kali, su colorido gopuram es su elemento más destacado. Hay que descalzarse para acceder al interior. Cuando nosotros llegamos alguien nos dijo que estaba cerrado, pero yo vi la puerta abierta y no dudé en entrar. Nadie me puso ninguna pega y pude recorrer el interior del templo observando todos los elementos tan característicos de los templos dravídicos.
Sri Srinivasa Perumal
Dicen que el templo de Sri Srinivasa Perumal posee una impresionante gopuram. No puedo decir si es verdad o no. Nosotros lo encontramos totalmente en obras.
Sri Vadapathira Kaliamman
El último templo que visitamos en Little India fue Sri Vadapathira Kaliamman. Solamente pudimos ver el exterior, uno de los más bonitos de entre los templos hindúes que ver en Singapur. Este en concreto debe su colorido exterior cubierto de esculturas a una importante reforma que se llevó a cabo en 1969.
Qué ver en Singapur: Orchad Road
Esta calle de 2,5 kilómetros hará las delicias de los compradores compulsivos (y con muchos dólares en la cartera). Lo que antaño era poco más que un espacio dedicado a la plantación de especias hoy es el lugar donde encontrar los más elegantes centros comerciales de la ciudad. Es uno de esos lugares que hay qué ver en Singapur. Lo de comprar ya es otra cosa.
Desde el elegante ION Orchard Mall hasta Paragon, en Orchad Road los centros comerciales tienen uno tras otro tiendas de firmas internacionales como Gucci, Prada o Chloé. En la misma calle, con pocos metros de diferencia, las mismas marcas. Y en todas había gente. No sabemos si la razón era la lluvia o sencillamente que quienes viven o visitan Singapur se pueden permitir comprar en esos comercios.
Hablando de lluvia. Orchad Road es un buen lugar al que acudir si uno se encuentra cerca y no para de llover. Puede pasar el día de centro comercial en centro comercial, o incluso pasear por la calle casi sin mojarte. Y es que las aceras de estas calles se encuentran junto a los escaparates de las tiendas y siempre con la parte superior cubierta por la estructura del edificio.
En cualquier caso, te guste o no ir de compras, te recomiendo un par de visitas y que tengas en cuenta que aunque mucha gente llega a Orchar Road en taxi, se puede hacer en metro. Las paradas son Dhoby Ghaut, Somerset y Orchad.
Emerald Hill
Una de las calles más bonitas que ver en Singapur es Emerald Hill. Al lado del bullicio y la locura consumista se puede recorrer está calle con árboles de frangipan y las casas más cuidadas y bellas de la ciudad. Las shophouses cercanas a Orchad Road se han convertido en bares y restaurantes. Pero basta subir un poco más por la empinada calle para descubrir hileras de cuidadas casas en las que a más de uno nos gustaría vivir. La del número 56, construida en 1902, es uno de los edificios más antiguos de la ciudad.
Cathay Gallery
En uno de los extermos de Orchad Road está el que fue primer rascacielos de Singapur. En su interior, además de los típicos multicines y algunas tiendas hay un museo: Cathay Gallery. Está dedicado al mundo de cine producido en Singapur. El acceso es gratuito y en su interior hay bucatas de distintas épocas, cámaras, vestuario, carteles y programas de varias películas. No es una visita obligada, pero si está bien si como en nuestro caso te toca un día de esos en los que parece que nunca va a dejar de llover.
Qué ver en Singapur: Chinatown
Con tantos rascacielos y edificios coloniales la verdad es que uno se siente en cualquier menos en pleno sudeste asiático. Aunque unos días antes habíamos pasado por Kuala Lumpur, nos habíamos sorprendido por su modernidad y nos habíamos quedado sin palabras bajo las Torres Petronas, la verdad es que Singapur es una ciudad mucho más atractiva que la capital de Malasia, más occidental, más cómoda para el visitante. Sin embargo no todo es acero y cristal en Singapur. También hay varios barrios que ver en Singapur y que sorprenden por lo bien restaurados que están. Pero sobre todo por ser como pequeñas islas que te trasladan a otras culturas sin abandonar una de las ciudades más modernas que podáis imaginar.
Es el caso de Chinatown. Aquí los chinos son los reyes de la calle. Se pueden ver impresionantes templos a la sombra de altos edificios, curiosear en tiendas de medicina tradicional (¿por qué no entraría a enseñar mi pie a ver si tomando sopa de lagarto hubiera mejorado?). O tomar cerveza mucho más barata que en otras partes de la ciudad. Para llegar hasta este barrio basta subir en metro y bajar en la parada Chinatown.
Chinatown Heritage Centre
Si al bajar del metro en Chinatown elegís la salida de Pagoda St apareceréis en una animada calle peatonal llena de puestos de recuerdos. En ella se encuentra el Chinatown Heritage Centre, un museo que permite conocer la historia de este barrio. Yo lo tenía en la lista de lugares que ver en Singapur, pero con mi recién hecho esguince tuve que ser comedida y decidí no entrar la museo.
Sri Mariammam
Al final de la misma un templo que parece fuera de lugar: Sri Mariammam. Se trata del templo hindú más antiguo de Singapur. Se construyó en 1823 y lo más llamativo del complejo es el colorido gopuram de la entrada. La verdad es que después de haber conocido los templos de Tamil Nadu ninguno de lo que vimos en Singapur nos impresionó. Como en todos los templos hindúes debimos dejar los zapatos en la puerta. Ya descalzos se puede curiosear por el interior del templo y buscar las imágenes de yeso de Visnú, Siva y Brahma.
Templo del Diente de Buda
Tras visitar este templo hay que caminar por South Bridge Road hacia la derecha. A poca distancia uno se encuentra ante uno de los lugares más bonitos de Singapur: el Templo del Diente del Buda. A los que hayáis viajado a Sri Lanka, más concrétamente en Kandy, os sonará el nombre. Y que ambos templos budistas presumen de guardar en su interior un diente del mismo Buda. En el caso del templo de Singapur parece que bajo la estupa de oro de la cuarta planta se guarda un colmillo del fundador del budismo.
Sea cierto o no, este templo es uno de esos lugares que ver en Singapur y que de verdad merecen la pena. El templo, consagrado en 2008 consta de cinco plantas. La inferior tiene una gran sala presidida por una imagen de Buda. Cuando llegamos escuchamos desde la calle que había algún tipo de ceremonia en su interior. Tras cubrirme los hombros pudimos acceder al templo y allí vimos a decenas de personas rezando junto a un puñado de monjes que tocaban campanas y gongs. El sonido te envolvía. Me resultó muy emotivo recorrer la sala acompañada por esos rezos que suenan como canciones.
Detrás hay otra sala más pequeña a la que se accede también por la parte posterior del templo. Los rezos también tenían lugar en esa sala, pero en este caso está prohibido sacar fotos. No termina la visita al templo en este planta. Se puede subir en ascensor hasta el último piso. Allí está el jardín de la orquídeas. En el centro de la terraza abierta un pabellón aloja una gran y colorida rueda de oración.
En la cuarta planta está el diente que da nombre al templo. Además es lugar de meditación, por lo que se puede ver a algunos budistas en una actitud relajada y ausente de todo. La tercera planta aloja un bonito museo. En él vimos algunas reliquias y un preciosa colección de esculturas de Buda procedentes de distintos países. La segunda planta es una galería que rodea la gran sala de oración de la primera planta. En ella una especie de museo que homenajea a algunos monjes budistas.
Thian Hock Keng Temple
Aún hay otro templo en Chinatown que merece ser visitado. Es el Thian Hock Keng Temple, uno de los templos más antiguos que ver en Singapur. Para llegar hasta él hay que caminar por la bonita Ann Siang Road no sin antes parar en la esquina que la une a South Bridge Road. En ese lugar podrás ver una tienda de medicina tradicional china: Eu Yan Sang. En sus estanterías hay infinidad de botes con especias y ramas de todos tipo. Pero también hay lagartos, ranas o caballitos de mar.
Siguiendo el camino hacia el templo hay que cruzar un bonito parque, Ann Siam Hill. Es un pequeño pulmón en el corazón de Chinatown en el que incluso está prohibido fumar. Al abandonar el parque y pocos metros más allá se encuentra la parte trasera del templo. Merece la pena prestar atención porque en su muro está pintada la historia de este barrio y del templo. Construido en 1839, originalmente estaba junto al mar.
A este templo acudían los marineros chinos antes de embarcarse. Eso antes de que la ciudad ganara terreno al mar. Hoy el templo es un lugar muy tranquilo con pocos turistas. El templo es una obra maestra arquitectónica de piedra, tejas y madera. Entre los más llamativo están las esculturas de dragones y columnas decoradas con intrincadas esculturas.
Shophouses
Tras haber visitado todos los templos más bonitos de Chinatown nada mejor que dar un paseo por sus calles. Muchas de sus antiguas shophouses han sido bellamente renovadas, algunas se han convertido en hoteles, otras en bares, algunas son tiendas. Pero sin duda ofrecen una estampa muy especial: esas casas con historia tras las que se levantan magníficos rascacielos, imagen de la moderna ciudad de Singapur.
Pagoda Street
Si quieres ir de compras en este barrio, la citada Pagoda St es un lugar entretenido. Pero también puedes Sago St con más puestos de artesanía y recuerdos. O incluso ir hasta Yue Hwa Chinese Products, unos grandes almacenes con una fachada art decó cuyo interior está lleno de productos chinos. En ellos se puede comprar desde comida a artesanía.
Y si se hace la hora de comer o sencillamente quieres tomar una cerveza, Food Street será el lugar perfecto para ello. Aquí se come barato, rápido y además la cerveza es más barata que en otros lugares de la ciudad.
Qué ver en Singapur fuera del centro
La mayor parte de los lugares que ver en Singapur están relativamente cerca unos de otros. Incluso con tiempo es posible caminar entre Marina Bay y Kampung Glam. Pero más allá de esta amalgama de lugares interesantes hay un lugar que nosotros visitamos y que a mi me gustó bastante. Se trata del conjunto de casas peranakan más bonitas de la ciudad.
Se encuentran en un tranquilo barrio residencial. Para llegar hasta ellas se puede ir en metro hasta la estación de Eunos. Luego hay que caminar para localizar las dos calles en las que están estas casas: Koon Seng Rd y Joo Chiat Pl. Azulejos importados de Europa, dragones y cangrejos de estuco, ventanas de madera, puertas de vaivén,… La mayoría de ellas han sido renovadas con mucho acierto, en algunos casos se han pintado de intensos colores. Al contrario de lo que ha ocurrido en otros barrios de la ciudad, aquí aún son viviendas particulares. No es raro ver salir de ellas a expatriados que residen en Singapur.
Aquí están todos los lugares que nosotros visitamos. Algunos no hay duda que deben estar en cualquier lista de lugares que ver en Singapur. Otros dependerán del tiempo con el que uno cuente y los intereses de cada viajero. A todo esto además hay que sumar varios museos. Algunos pueden resultar atractivos sobre todo si se tiene tiempo de sobra para recorrer sus salas. En nuestro caso organizamos la ruta de tres días por Singapur del siguiente modo:
- Barrio Colonial y Marina Bay
- Kampung Glam, Little India y Orchad Road
- Casas peranakan y Chinatown
26 comentarios
Que bonito todo, me ha encantado este tour por Singapur. A ver si algún día puedo conocerlo, aunque con tu post es como si me hubiera trasladado allí y fuera yo la que estaba paseando por sus calles templos. Saludos
Espero que lo conozcas ¡¡porque en vivo es aún mejor!! (salvo por el calor jejejeje)
Acabo de enamorarme profundamente de Singapur! Vaya maravilla!, no he visto ni un solo rincón en tus descripciones del que pueda decir algo malo. Me quito el sombrero y por supuesto que me lo apunto (¿cuantas horas de vuelo voy a tener que dejar mis uñas clavadas en los reposabrazos? jajajaja)
Un abrazo Cris y recuerda que tu mala pata no fue tan mala, fue al acabar el viaje, por cierto, espero que estés casi bien ya.
Carmen
Solamente trece horitas de nada 😉
Voy mucho más despacio de lo que pensaba, pero es lo que hay.
Un abrazo grande.
Me ha encantado tu post…qué ganitas de ir. Nosotros también iremos después de estar por Malasia y antes de volver a España. Vamos con mucha ilusión con ambos destinos. No conocía las Casas peranakan, me las apunto!! Un saludo.
Nosotros también dejamos Singapur para después de Malasia. Creo que es un buen colofón para ese viaje. Un abrazo ¡¡y a disfrutar de Asia!!
Lo primero, espero que estés mejor de tu tobillo, y por ser positivo, al menos fue al final del viaje. Las fotos increibles y sería un sueño hospedarse el el hotel marina bay sands y nadar en esa piscina!!
Muchas gracias. Poco a poco voy mejorando. 🙂
Anotados todos y cada uno de tus consejos. Qué post tan completo!. Nos va a servir de gran utilidad para nuestro próximo viaje a Singapur. Muchas gracias! Olga.
No sabes cuanto me alegro. Eso sí, por favor, no terminéis el viaje como hice yo. Un abrazo y a disfrutar de Singapur.
Me ha encantado! Me gustaría regresar porque yo sube tuve la oportunidad de visitarla en sendar paradas de 12 horas. para más inri, una de ellas coincidió con la Formula 1, que ocupaba todas las calles del centro, de manera que nos fuimos al zoo. Por cierto, los 20 usd del la entrada al hotel permite en uso de esta piscina. Que bonito!
No Jordi, esos 20 $ te los gastas en beber o comer… y ves desde esa perspectiva la piscina 😉
wow! vaya pasada de ciudad
lo unico que sabia y veia de Singapur era el hotelazo Marina Sands Bay, ya veo que hay muchisimas cosas por ver y de gustos muy distintos, mezquitas, jardines alucinantes, parques, etc…
Y las fotazas que nos traes son preciosas
buen post compañera!
A mucha gente le pasa cómo a ti, que no saben mucho de Singapur más allá de ese hotelazo. ¡Me alegra que te haya gustado!
Wow. Qué post más completo, y eso que no pudieron hacer el 100 por ciento de lo que tenían previsto. Singapur siempre me ha atraído, no tengo ninguna razón en particular, pero me causa mucha curiosidad, así que me voy a guardar este posts en mis favoritos. Por cierto, no sabía que era un país tan joven. 50 años no es nada!! Y me han encantado las fotografías, todas!!! Un abrazo!
Creo que Singapur no decepciona a nadie. Es Asia pero con las ventajas y comodidades occidentales. No me convence esa Little India tan pulcra, pero no es India, es Singapur jejejeje. Un abrazo.
¡Unos días súper bien aprovechados! Nosotros hicimos escala y apenas estuvimos un día en Singapur, no será nunca mi ciudad favorita pero sí recomendaría visitarla. Me quedo con barrios como Little India y con el edificio que también a mí me recordó a Batman 😉 Me ha encantado el paseo con tus fotos, un abrazo guapa!
Singapur es una ciudad muy interesante, con mucha vida y rincones fantásticos. Realmente yo creo que en Singapur hay un rincón para cada viajero. Para el que busca lujo, tradición, cultural o gastronomía… Un abrazo.
Singapur: qué gran descubrimiento Cris! Ahora que ya hemos regresado de nuestro viaje y hemos podido explorarlo , tengo que decirte que nos ha fascinado. Qué interesante su mezcla de culturas en tan poco espacio. Y Gardens by the Bay es mágico. Tu post nos ayudó mucho en la planificación de las visitas por la Ciudad. Un abrazo! Olga
Es una ciudad impresionante con una gran oferta tanto cultural como de actividades. A mi me parece uno de esos destinos que uno no se debe cansar de visitar. Me alegra mucho que mi post os haya servido para organizar la visitas. Un abrazo.
Pese a ser uno de los lugares más caros del sudeste asiático, merece incluirlo en alguna escapada allí, es un sitio muy peculiar. A nosotros nos gustó muchísimo. Buen artículo, Kris!
Gracias Maribel… Efectivamente es seguramente el lugar más caro del sudeste asiático ¡¡¡pero merece la pena!!!
Muy buena guía de Singapur. Nosotros estuvimos hace 2 años solo un día y vimos los jardínes, el Marina Bay, Chinatown y Little India. En agosto volveremos y estaremos dos días, así que nos viene muy bien la información sobre el barrio colonial y Orchad Road.
Un saludo
Creo que Singapur siempre es una buena idea, y además un escala genial rumbo a otros destinos asiáticos.
Un saludo
el edificio de parkview square te recuerda a uno de gotham (batman) porque en la primera película de batman que hicieron salir (era el edificio donde vivía batman)
Muchas gracias Irene por la información 🙂