Isla de Java: 5 lugares que no te puedes perder

Muchos son los viajeros que van a Indonesia para conocer Bali, Lombok o Borneo. Pero un alto porcentaje olvida en su periplo la maravillosa isla de Java, un lugar muy diferente a su vecina y espiritual Bali, pero con lugares que sin duda podemos contar entre los más impresionantes del archipiélago indonesio e incluso de Asia.

Algunos de ellos están muy cerca o en la misma la capital cultural de la isla de Java, Yogyakarta. Es sencillo recorrerlos todos en un día y regresar a la ciudad a pasar la noche. Pero para el resto, no quedará más remedio que atravesar la isla en su busca, algo que sin duda es ya de por si un placer gracias a ese paisaje donde volcanes, arrozales y campos de café se mezclan hasta donde llega la vista.

Qué ver en la Isla de Java

Kraton, el Palacio Real de Yogyakarta

En el centro de la ciudad se encuentra es que es seguramente el más bello palacio de la isla de Java. Se trata del palacio de los sultanes de Yogyakarta, eje de una pequeña ciudad amurallada dentro de la propia ciudad, en cuyo interior viven alrededor de 25.000 personas. Los edificios donde reside el actual sultán se construyeron a mediados del siglo XVIII, aunque ciertos toques de estilo europeo que se pueden ver durante la visita se añadieron posteriormente.

El Kraton es un gran ejemplo de arquitectura palaciega javanesa, que aquí nadie espere encontrar un gran edificio lleno de lujosas estancias. En la isla de Java, los palacios se componen de patios y pabellones. Entre estos últimos cada uno tiene una función, desde la de ser salas de recepción a dormitorios o salas de estar.

Hoy en día estos pabellones tienen diferentes funciones, como acoger actuaciones de gamelan (orquesta indonesia) o funcionar como museo de distintas colecciones reales. Una de las habitaciones más interesantes tiene en su interior el árbol genealógico de la familia real, así como fotos antiguas y retratos de antiguos sultanes.  Algo llamativo que hay que buscar son las entradas para mujeres y hombres indicadas por dragones femeninos y masculinos.

Para visitar el Kraton: la entrada es de pago, se puede hacer guiada y abre todos los días de 8:00 a 14:00 h, excepto el viernes que cierra a las 13:00 h.

Borobudur, un templo budista que ver en Java

Rodeado de palmeras y arrozales, el templo budista de Borobudur aparece magnífico ante el visitante como uno de los lugares más maravillosos de Asia. Construído entre los años 750 y 850, fue abandonado con la caída del budismo en la isla de Java y quedó olvidado hasta en a principios del siglo XIX, en tiempos de la colonia holandesa, se limpió y apareció de nuevo en toda su grandeza.

Desde 1991 forma parte de la lista de lugares Patrimonio de la Humanidad y hoy en día es sin duda una de las visitas imprescindibles no solo en la isla de Java, también en Indonesia. El templo está formado por varias terrazas cuadradas y circulares a las que sea accede por puertas con preciosas tallas. Para llegar a lo alto del templo uno puede ir recorriendo los diferentes niveles para descubrir en sus paredes las bajorrelieves que narran la historia de Buda, absoluto protagonista de este templo, son cientos los relieves y esculturas de él que se encuentran repartidos por toda la estructura.

Una vez arriba, la sorpresa son una colección de estupas huecas en cuyo interior esconden más imágenes de Buda, alguno de los cuales se puede ver sin esa cubierta y aparece mirando impávido el maravilloso horizonte que tiene frente a él. Una vez en lo más alto lo que se ve bien podría ser como un mandala, pero en este caso hecho para perdurar en el tiempo.

Visitar Borobudur

Todo los días el templo abre de 6:00 a 17:00 horas. La entrada es de pago (cara, pero merece la pena rascarse el bolsillo, y sobre todo no enfadarse porque los indonesios pagan mucho menos que los extranjeros). Para llegar hasta el templo lo más cómodo es un transporte privado ya sea alquilando una moto, un taxi o un coche con conductor como hicimos nosotros.  Quien quiera ahorrar podrá hacer el viaje en los autobuses de la compañía Trans-Jogja.

Prambanan, un templo hindú en una isla musulmana

Del templo budista más importante de la isla de Java nos vamos al templo hindú más destacado no solo de la isla, también de Indonesia. El complejo de Prambanan lo forman varios templos siendo el de  Candi Siva Mahadeva el más destacado por su tamaño y la riqueza de sus detalles escultóricos . La aguja principal de este templo se eleva hasta 47 y en su base se pueden ver motivos que caracterizan la decoración en Prambanan: pequeños leones rodeados de árboles y criaturas celestiales.

También en este templo de Siva, y siguiendo siempre la dirección de las agujas del reloj se pueden observar escenas del Ramayana, ese libro hindú que narra como Sita, la esposa de Rama, es raptada por el dios mono, Hanuman. Rodeando el templo de Siva, otros templos completan un conjunto de gran belleza que dedica un templo a cada uno de los tres dioses principales de la religión hindú: Candi Brahma y Candi Visnú. El templo de Candi Nandi, frente al de Siva, contiene una figura del toro Nandi, vehículo de Siva.

Caminando tan solo unos cientos de metros se alcanza Candi Sewu, el último de los templos que forman el conjunto de Prambanan y en el que destacan  los nichos tallados sobre la galería interior del templo principal.

Para quien se quede con ganas de más, en este misma zona podrá conocer los templos de Plaosan donde lo más llamativo es la mezcla de imágenes budistas e hindúes, o acercase a los llamados grupos Sur y Oeste, en los que encontrará templos en distinto estado de conservación pero con interesantes relieves y esculturas.

Visita a Prambanan

Entrada de pago (precios especiales para estudiantes). Este templo está a 17 kilómetros de Yogyakarta, y el recorrido se puede hacer con los autobuses de Trans-Jogja o en transporte privado, más cómodo y rápido pero más caro. El horario de apertura es de 6:00 a 18:00 horas.

Monte Bromo y el amanecer en la isla de Java

Si hablamos de naturaleza en la isla de Java seguramente el lugar más destacado sea el Monte Bromo, un volcán que si se compara con otros picos de la isla es enano, pero es que en este caso la belleza reside en el escenario que lo rodea, un lugar muchas veces oculto tras la bruma y unas nubes entre las que asoman victoriosos los picos de montañas y volcanes.

Para visitar este volcán activo hay que llegar hasta la antigua caldera del Tennger, de cuyo cráter que medía 10 kilómetros emergieron tres volcanes. No hay que perderse el amanecer desde el mirador de Gunung Penanjakan , cuando uno llega allí se encuentra ante la oscuridad absoluta y poco a poco el  cuadro más maravilloso que puede pintar la naturaleza va tomando forma al ritmo que el sol comienza a aparecer por el horizonte. Más tarde llega el momento de llegar al Bromo para subir los escalones que llevan al borde de su cráter y ver rugir la tierra mientras se rodea parte del camino que hay en lo alto del volcán.

Visitar el Monte Bromo

Hay que pagar para visitar los miradores, para subir al jeep que te lleva a través de la caldera del Tennger hasta un templo hindú que ahí allí y luego por ir a caballo hasta el punto donde comienza las escaleras que suben hasta el cráter. Nada de todo esto es barato, hay tour organizados que lo hacen todo por ti y cuyos precios se han multiplicado por cuatro en pocos años. No olvidar ropa de abrigo para visitar esta zona de la isla de Java, aunque uno no lo crea, puede hacer mucho frío.

Kawah Ijen y el lago turquesa

A 2.148 metros sobre el nivel del mar y rodeado por las paredes de un volcán se puede contemplar un lago de aguas turquesas que es un regalo para el que consigue llegar hasta él. La subida no es sencilla, hay mucho desnivel y no todo el mundo es capaz de hacer algo que parece sencillo pero que no lo es. Uno puede ver a mineros cargados con cestas de azufre subir y bajar como si tal cosa con cestas que contienen hasta 25 kilos del amarillo elemento que extraen en lo alto de la montaña, junto a ese lago.

Caminan con botas de agua, con chanclas, y lo hacen con la seguridad del que repite varias veces ese camino cada día. Sin embargo cuando es el viajero el que tiene que subir esos 3 kilómetros por la ladera de la montaña pensará que es imposible hacerlo con agilidad y pocos son los que consiguen recorrer esa distancia en menos de hora y media.

Hay que estar preparado para escurrirse más de una vez y para enfrentarse al humo de azufre que se eleva en impresionantes columnas. Aún así, estar en lo alto de Kawag Ijen es uno de los regalos más maravillosos en la isla de Java ofrece al viajero que se empeña en llegar a lo más alto.

Visitar Kawah Ijen

Se puede acceder a la montaña entre las 7:00 y 17:00, pagando una entrada y firmando en un libro al acceder y abandonar el lugar.

Ya solamente queda una cosa de la que tomar nota en la isla de Java: tomar una buena taza de ese café que se produce en las plantaciones de esta isla indonesia y que muchos consideran el mejor café del mundo. Seguramente no hay mejor modo de terminar el día tras visitar cada uno de estos impresionantes lugares de Indonesia.