Chefchaouen (o Chaouen) es conocida como la ciudad azul de Marruecos, el color con el que están pintadas las casas de su Medina. Se puede recorrer perfectamente en un día en una excursión a Chaouen desde Tanger o bien llegar a ella por libre desde esa misma ciudad. O desde Tetuán, la ciudad que mejor conserva el carácter tradicional de las ciudades y medinas marroquíes. Sea como sea, no hay duda de que merece la pena dedicar al menos un día a los lugares que ver en Chefchaouen.
Si te animas a visitar por tu cuenta los lugares que ver en Chefchaouen, no te pierdas el post del siguiente enlace: Cómo llegar a Chefchaouen desde Tanger o Tetuán. También os animo a pasaros por el post Qué ver en Tetuán. Encontráis toda la información para conocer una de las ciudades más bonitas y menos turísticas de Marruecos.
Índice del artículo
Qué ver en Chefchaouen en Marruecos: visitas guiadas
Aunque es muy sencillo recorrer la ciudad azul por libre, no está de más sumarse a alguna de las visitas guiadas en español por la ciudad. Es la mejor forma de conocer su historia y sus edificios más emblemáticos.
Os dejo varias sugerencias que me parecen especialmente interesantes.
- Tour gastronómico por Chefchaouen. Una ruta perfecta para conocer lo mejor de la comida marroquí. Se hacen paradas en varios puestos para probar diferentes aperitivos antes de ir a comer a un restaurante. Siempre acompañados por un guía en español.
- Free tour en la Perla Azul de Marruecos. Uno de los free tours mejor valorados de Chefchaouen. Podéis realizarlo en horario de mañana o de tarde cualquier día de la semana
- Explora las gemas ocultas de la Perla Azul. Un free tour con un guía natural de la ciudad recorrerás durante dos horas el laberinto de calles de la Medina de Chefchaouen.
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Por qué Chefchaouen es azul
Seguro que mientas paseas por las calles de Chefchaouen en algún momento te vas a preguntar cuál es la razón de que sus edificios estén pintados, en su mayoría, de distintos tonos de azul.
Hay varias teorías al respecto. Una de ellas la que dice que el color azul espanta a los mosquitos. No sabemos hasta que punto esto puede ser cierto, pues parece que estos insectos no distinguen los colores, tan solo si algo es claro u oscuro.
Otra de las explicaciones más extendidas sobre el color azul en las casas de Chaouen es que los judíos que emigraron a esta zona de Marruecos en el siglo XX comenzaron a pintar sus casas de azul para distinguirlas de color verde tradicionalmente musulmán. En otras ciudades del país, en barrios judíos como el mellah que ver en Essaouria, el color azul están menos presente, pero también hay fachadas, puertas e interior de sinagogas con ese color.
La tercera de las teorías sobre el color azul es la que parece más aceptada por la gente de la ciudad y que dice que ese tono es para recordar el mar que está a solamente 40 kilómetros pero que resulta poco accesible.
Hay un última teoría que justifica el color azul en las casas de Chefchaouen. Dice que al pintar de azul las fachadas se consigue conservar los hogares más frescos, evitando que suba la temperatura interior durante los cálidos veranos del Rif.
¿Cuál os parece a vosotros la teoría más acertada?
Qué ver en Chefchaouen, la perla azul de Marruecos
Antes de entrar en materia, contaros que nuestra excursión a Chefchaouen no empezó con buen pie. Y nunca mejor dicho. Cuando íbamos a la estación de autobuses de Tetuán para comprar los billetes y poner rumbo a Chaouen, me tropecé y me caí de boca. Dicho así parece más de lo que fue. Pero el golpe que me di en la rodilla me dejó fastidiada todo el día. Herida e hinchazón. Y un dolor constante aunque soportable.
A esto se sumó el mareo que pillamos en el autobús. Chefchaouen está ubicada en la ladera de una montaña del Rif. Y para llegar hasta ella hay más de una curva que te va dejando el estómago a la altura de la boca. Tomar nota de esto, y no olvidéis la Biodramina. Mejor prevenir que vomitar.
Sumando ambas cosas, llegamos tanto mi amiga Cris como yo bastante tocadas al destino. Así que decidimos tomarlo con calma y llegar hasta donde el cuerpo, la rodilla y los estómagos aguantaran. Por ello se nos quedaron un par de sitios a las afueras de la ciudad sin ver. Os los mencionaré de todos modos al final del post para que los tengáis en cuenta.
Bab El Ain, entrada a la Medina de Chefchaouen
Es una de las puertas de acceso a la Medina de Chefchaouen en Marruecos. No se trata de una puerta monumental, incluso se puede decir que el restaurante con letreros azules a su izquierda la hace desmerecer como una de las entradas a la Medina con siglos de historia. Sin embargo, es la puerta más grandes de las que se conservan en la muralla. Y también muy popular, puesto que es el punto de unión entre la ciudad moderna y la antigua.
Al igual que en otros edificios emblemáticos de que ver en Chefchaouen, en esta puerta, cuyo nombre quiere decir “puerta de la fuente” (la fuente la veréis nada más cruzar la puerta) veréis una cártel escrito en árabe, español e inglés con alguna información.
El Kharrazine, uno de los barrios de la antigua Chaouen
Tras cruzar la puerta, estaremos en el barrio El Kharrazine. Si camináis hacia la izquierda podréis recorrer algunas calles más tranquilas en las que os cruzaréis con más gente local que en otros puntos del centro histórico.
Uno de los rincones más bonitos de esta parte de Chaouen es el Callejón Derb Benyaakoub . Su suelo de colores, su arcos y las pinturas que representan escenas típicas de la ciudad hacen de este lugar uno de los más pintorescos que ver en Chefchaouen.
Plaza Uta al-Hammmna, imprescindible que ver en Chefchaouen
Es el corazón de la Medina. La gran plaza que ver en Chefchaouen. Rodeada por algunos de los edificios más emblemáticos de la ciudad, es un lugar muy animado gracias a la presencia de bares y restaurantes. Sin duda es el sitio perfecto para hacer una parada en el camino y sentarse a comer o sencillamente a tomar un té y unos dulces típicos. Lo que difícilmente podréis hacer es beber una cerveza. Recordad que Marruecos es un país musulmán, religión que prohíbe tomar alcohol.
No es raro que estando en la plaza aparezca algún grupo de bereberes bailando y tocando sus instrumentos tradicionales. Hacen lo que mejor saber, animan con su música a los visitantes y no está de más darles algo de dinero a cambio de su arte y esa alegría que desprenden.
Gran Mezquita de Chefchaouen
Construida sobre una plataforma que domina la anterior plaza, esta mezquita del siglo XVI en uno de los edificios más emblemáticos de Chaouen, con un singular minarete octogonal. Los no musulmanes tenemos que conformarnos con verla desde el exterior, aunque si podemos subir a la terraza que rodea este edificio para disfrutar de la panorámica de la plaza.
Si quieres conocer mejor la historia de la ciudad y de esta mezquita puedes reservar un tour de 3 horas en español por Chefchaouen (té a la menta incluido) o un free tour con una duración de 2 horas.
Villa Mirabella y sus maravillosas vistas
En una esquina de la plaza, la más cercana a la mezquita, se encuentra esta tienda de arte y decoración. Entrar en ella es como acceder a la cueva de los tesoros de Alí Babá. Alfombras, figuras de madera, tejidos llenos de color,… Artesanía marroquí para todos los gustos.
La gente de la tienda es muy amable y todo el mundo es bien recibido. Aunque no quieras comprar nada, dedica unos minutos a curiosear y termina subiendo a su azotea para disfrutar de unas vistas privilegiadas de la Plaza Uta al-Hammmna.
Zaouia Kadiri, una fachada verde en Chefchaouen
En una ciudad en la que todo es azul, es imposible pasar por alto esta tumba perteneciente a un destacado miembro de la orden Qadiri. Precedida de una amplio patio con una fuente y unos naranjos, la fachada de azulejos blancos y verdes de este mausoleo del siglo XIX se cuenta, a pesar de no ser azul, entre las más bellas de Chefchaouen.
La Kasbah, otro lugar que ver en Chefchaouen
Es una de las grandes construcciones que ver en Chefchaouen. Se trata de una fortaleza del siglo XV construida para proteger la ciudad. Tiene un amplio patio interior ocupado por un frondoso jardín atravesado por varios senderos y decorado con fuentes y un estanque.
El acceso es de pago y permite también la entrada al Museo Etnográfico, a lo que fueron antiguas celdas y a la torres de vigilancia de la fortaleza.
Fondouk, un lugar con historia que ver en Chefchaouen
Un fondouk (también podéis encontrarlo escrito como funduk o funduq) es un espacio público. Antiguamente se utilizaba como posada, almacén y establo para los animales de aquellos mercaderes que llegaban a una ciudad tras un largo viaje. En Chefchaouen se conserva solamente uno de estos antiguos espacio, muy cerca de la kasbah. Y mantiene algo de esa tradición que se remonta cinco siglos atrás.
En la planta bajo, tras los arcos que rodean un patio, hay un pequeño bazar en que distintos artesanos trabajan. La planta superior tiene habitaciones que los comerciantes pueden utiliza para descansar durante la jornada laboral.
Callejear por Chefchaouen
Justo al norte de la Plaza Uta al-Hammmna se encuentran las calles más pintorescas que ver en Chefchaouen. Rincones cubiertos de alfombras, tiendas de recuerdos, fuentes, murales, talleres de artesanos. Yo os recomiendo callejear, dejaros llevar por vuestro instinto porque esta ciudad de Marruecos está llena de lugares encantadores dignos de ser fotografiados y recordados.
Como esta parte de la Medina de Chefchaouen es bastante laberíntica, si hay algo concreto que quieres ver, nunca está de más preguntar a la gente de la ciudad por esos lugares que no te quieres perder. De paso, más de uno te recomendará otras placitas o calles menos conocidas pero también llenas de encanto. Eso sí, recuerda que la ciudad está construida en la ladera de una montaña, por lo que las cuestas y las escaleras son tan inevitables como fotogénicas.
Una buena idea es tomar como referencia la Calle Hassan I, al norte de la Medina. Es una calle bastante larga y algo serpenteante que va desde Bab Souk a Bab El Onsar. A largo de esta vía hay restaurantes, alojamientos, tiendas de artesanos, alfombras colgando de las paredes. Y muchos callejones que suben y bajan haciendo las delicias de quienes visitan la ciudad.
También merece la pena fijarse mientras se recorre la ciudad en las puertas que van a pareciendo en el camino. Son verdaderas maravillas pintadas también de azul.
Lugares más fotogénicos que ver en Chefchaouen
Aunque muchas veces no es posible dar con el nombre de las calles por las que pasamos, si es cierto que hay pequeñas calles y callejones que se han hecho especialmente famosos en Chefchaouen y que son algo más sencillas de localizar.
Los vecinos decoran cada día con sombreros típicos, espejos, cuadros y plantas algunas de esas vías públicas. En ocasiones, los mismos vecinos os pedirán 5 dirhams por haceros una foto en esa calle que han decorado con esmero. Es chocante porque no deja de ser la vía pública. Pero también es cierto que es la gente de la ciudad la que dedica su tiempo a convertir algunas calles en lugares especialmente llamativos y fotogénicos.
En el caso de que no estéis dispuestos a dejar una propina a cambio de una foto, no pasa nada. Vais a encontrar infinidad de preciosas calles pintadas de azul a lo largo de la ciudad en la que hacer preciosas fotos sin que nadie os ponga el sombrero para que dejéis unas monedas.
Yo os dejo aquí algunos de los rincones más fotografiados entre los que ver en Chefchaouen.
El Patio Azul
Se trata de un patio privado al que los dueños permiten el paso y las fotografías previo pago de unos dirhams. Lo tienen muy limpio y cuidado. No falta un detalle, desde mesitas a cortinas y hasta un juego de té.
Callejón El Assri
Sus escaleras, los arcos y las macetas colgando de sus paredes le han convertido en un lugar perfecto para hacer bonitas fotos. No serán muy originales, porque es un sitio muy típico, pero es imposible resistirse al encanto del callejón. Además, aquí no te querrán cobrar por hacer una foto.
Sidi Bouchouka
Muy cerca del anterior callejón, Sidi Bouchouka es especialmente fotogénico gracias a las puertas de estilo árabe y los mosaicos que la decoran.
Callejón Azul
Lo más llamativo de esta calle, a pocos metros del anterior callejón, es el color azul que en este caso cubre paredes, puertas y hasta el suelo.
Puesto de naranjas
Justo frente al callejón azul hay un puesto que hace zumos de naranjas frescas durante todo el día. Los dueños han montado un precioso spot con cestos y naranjas como protagonistas. Si te quieres hacer una foto, solamente tendrás que comprar un zumo (aunque no quieras foto, tómate un zumo porque están deliciosos).
Calle de las alfombras
No es la única calle que ver en Chefchaouen cubierta de alfombras. Pero si será la única con esta decoración en la que os intenten cobrar por haceros una foto ya que cada día los comerciantes la decoran con cortinas para darle un aire más especial. Si bajáis unos cuantos escalones, os perderán de vista y podréis hacer fotos aunque desde otra perspectiva. Para dar con esta calle, deciros que está a la espalda del fondouk del que antes os hablé.
Rue Ibn Asskar
Esta calle escalonada que ver en Chefchaouen es una de esas que los vecinos decoran con cuadros, plantas y sombreros cada día. Os van a pedir 5 dirhams por haceros una foto. Lo mismo que en otras calles similares de la ciudad. Son 50 céntimos de €. Es una cuestión personal decidir si vale la pena o no pagarlos en una ciudad repleta de lugares fotogénicos. En nuestro caso los dimos gustosamente y nos hicimos unas cuantas fotos.
Otros lugares que ver en Chefchaouen
Ya os contaba que la mañana de nuestra excursión a la ciudad azul de Marruecos, me caí. La verdad es que estaba bastante dolorida, la rodilla me molestaba y con tanto subir cuestas y escaleras, la cosa no mejoraba.
Por eso dejamos de caminar hasta otros lugares destacados que ver en Chefchaouen. Entre ellos hay que mencionar la que para muchos es la puerta más impresionante de la ciudad: Bab El Onsar (del siglo XVI). Atravesando esa puerta se llega a un espacio natural muy popular, con terrazas para tomar algo. Se trata de Fuente Ras el Maa, con un río y unos pequeños saltos de agua.
Los más andarines (y no lesionados) pueden animarse a caminar los 20 minutos que separan el centro de la ciudad de la Mezquita Española. Está en lo alto de una colina, en el que dicen es el mejor mirador que ver en Chefchaouen.
Dormir en Chefchaouen: riads, apartamentos y hoteles
Si quieres disfrutar de la ciudad azul de Marruecos y pasear por los lugares más bonitos que ver en Chefchaouen con poca gente, entonces tienes que dormir en la ciudad. Es algo que te dará más tiempo para conocerla y podrás disfrutar también de su cara nocturna, mucho más tranquila. Además, amanecerás en Chaouen y podrás salir a sus calles y recorrer sus enclaves más atractivos antes de que los turistas lleguen desde Tanger o Tetuán. ¿No te parece un buen plan?
Como en casi todas las ciudades de Marruecos, alojarse en un riad es un planazo. Casas tradicionales reconvertidas en coquetos hotelitos. Los hay muy sencillos y baratos. También los hay realmente encantadores, aunque algo más caros. Sin duda, entre todos ellos podréis encontrar la opción más adecuada a vuestro bolsillo y a vuestro gusto.
Los que prefieran hoteles más convencionales, también los encontrarán. Incluso hay algunos apartamentos que aportan espacio y privacidad a los que quieran pasar más noches en la ciudad para conocer también los alrededores.
Os dejo a continuación varias opciones que valoré cuando tenía en mente pasar una noche en Chefchaouen.
Riads en Chefchaouen
La ubicación de los siguientes riads es perfecta para conocer los lugares que ver en Chefchaouen. Todos están en el corazón de la Medina.
- Riad Tassili Chaouen. A pocos metros de la Plaza Uta al-Hammmna, este riad tienen varias habitaciones dobles con paredes pintadas de intensos colores y suelos tipo hidráulico. En el precio está incluido el desayuno.
- Riad Mauritania. Céntrico, con un interior pintado en blanco y azul, un bonito patio y una fantástica terraza con vistas. Ofrece una excelente relación calidad/precio e incluye el desayuno.
- Riad Nila. Probablemente uno de los riads más bonitos de Chefchaouen (también de los más caros). Su decoración es de tipo marroquí pero con mucho estilo. Madera, azulejos y celosías caracterizan este hotelito que se cuenta entre los mejor valorados de la ciudad.
- Dar Yakout. Aunque no es realmente un riad, por su estilo lo podemos incluir en este apartado. Es uno de los alojamientos mejor valorados de la ciudad. Su decoración con muchas telas de colores es uno de sus fuertes. El otro, su delicioso desayuno. Y todo con unos precios bastante ajustados.
Hoteles en Chefchaouen
Aquellos que quieran contar con más comodidades para alojarse y disfrutar de los lugares que ver en Chefchaouen, seguro que encuentran la opción perfecta en alguno de los siguientes hoteles.
- La Petite Chefchaouen. Uno de esos hotelitos boutique que tanto me gustan. Sus habitaciones con baño son amplias, luminosas y modernas. En las zonas comunes, mobiliario confortable y vistas para no olvidar. Es algo más caro que otros alojamientos para dormir en Chefchaouen, pero su calidad lo justifica.
- Hôtel ZIRYAB. Amplias habitaciones de distintas categorías con vistas a diferentes puntos de la ciudad y una piscina hacen de este hotel el favorito de muchos de los que pasan más de una noche en la ciudad.
Apartamentos en Chefchaouen
También podéis elegir para alojaros en la ciudad azul de Marruecos alguno de los apartamentos en alquiler. Los hay dentro y fuera de la Medina, pero siempre cerca de los lugares que ver en Chefchaouen.
- Aparthotel Dar Nowara Chaouen. Un apartamento con capacidad para tres personas, ubicado en la Plaza Mohammed V, muy cerca del casco antiguo.
- Casa Mablu. En el corazón de la Medina, con capacidad para 4 personas, terraza compartida y decoración tradicional.
Excursiones desde Chaouen
Si te quedas en la ciudad más de un día, puedes aprovechar para conocer algunos lugares que ver cerca de Chefchaouen sumándote a alguna de las excursiones más populares entre los que visitan Chaouen.
- Excursión al Puente de Dios. Anímate a dejar atrás las casas azules de la ciudad para conocer la pasarela a 30 metros de altura que une los dos lados de un impresionante cañón en pleno Parque Nacional de Talassemtane.
- Excursión a las cascadas de Akchour. Esta excursión es una de las más bonitas que hacer desde Chefchaouen. El paisaje es espectacular, con las montañas del Rif de fondo y pozas de agua turquesa en las que darse un baño. Se realiza con guía en español y tiene una duración de 7 horas.
- Excursión a la cueva de Knadel. Con un guía de habla española entraréis en esta cueva objeto de numerosas leyendas. Un recorrido entre estalactitas y estalagmitas a través de grutas subterráneas.
