Creta es una isla muy especial, muy alejada de esa imagen de casas blancas y cúpulas azules que llegan al mar tan típica de otras muchas islas griegas. Creta posee magníficas ciudades que conservan la impronta de venecianos y otomanos. Cuenta con maravillosas playas y un importante patrimonio arqueológico. Pero no acaban ahí sus atractivos. En este post os voy a mostrar la cara más rural de la isla y os voy a hablar de los pueblos más bonitos de Creta. No serán blancos, pero os aseguro que todos tienen algo especial.
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Los pueblos más bonitos de Creta
Ya os decía que en Creta lo de las casas encaladas hay que olvidarlo. En los pueblos más bonitos de Creta encontraréis pequeñas iglesias ortodoxas, casas de piedra, monasterios en ruinas y calles en las que las adelfas y las buganvillas son las protagonistas.
Antes de organizar nuestro viaje no había oído hablar de ninguno de los pueblos que voy a mencionar. Descubrí alguno gracias a internet, pero fueron los propios cretenses quienes me recomendaron visitarlos, y yo no puedo hacer otra cosa que darlos a conocer para que no queden en el olvido. Lo bueno de cualquiera de estas localidades es que podéis llegar en coche en un trayecto corto desde otros lugares imprescindibles de la isla y desde esas playas en Creta que atraen a tantos viajeros.
Arhanes, una escapada cerca de Heraklion
Este pueblo construido sobre las ruinas de una antiguo palacio minoico está bastante cerca del famoso Palacio de Knossos y de la capital cretense. Es sin duda uno los lugares que ver en Heraklion si se cuenta con un poquito de tiempo para descubrir los alrededores de la ciudad.
Muchas de las casas de este pueblo han sido reconstruidas. Algunas de ellas son ahora tiendas de antigüedades. Otras han sido ocupadas por tabernas. Basta callejear por la parte más antigua de la localidad, algo laberíntica, para encontrarse con estrechas calles, museos, iglesias y coquetos rincones inundados por las flores.
Si bien varias de sus tabernas se encuentran en la moderna plaza de Arhanes, yo os animo a ir a la calle Tsikritzi. Allí hay también varias tabernas, algunas frecuentadas por los lugareños (solamente hombres). Encontraréis meses a la sombra de las parras.
Argyroupolis, otro de los pueblos más bonitos de Creta
No muy lejos de Rethymno se puede visitar uno de los pueblos mas bonitos de Creta: Argyroupolis. Su ubicación, rodeado de montañas es realmente espectacular. Hay que animarse a callejear cuesta arriba para llegar al mirador junto a la iglesia y la torre de reloj que dominan el pueblo.
Las calles para llegar a lo alto son un verdadero laberinto. Aquí y allá se van bifurcando y uno nunca tiene claro por donde continuar. Pero no importa. Se elija el camino que se elija siempre aparecerá una casa pintoresca, un puerta de color o una fachada cubierta de flores.
Para finalizar la visita a este pueblo, merece la pena desplazarse hasta las cascadas de Argyroupolis. No son espectaculares, pero el lugar es muy agradable, boscoso y fresco. Hay muchas tabernas y en todas se puede elegir que pescado comer en alguna de sus peceras o disfrutar de carne a la brasa hecha en una originales parrillas a la vista de los clientes.
Margarites, el pueblo de los alfareros
Otro de los pueblos más bonitos de Creta que ver en los alrededores de Rethymno es Margarites. Una localidad famosa por sus artesanos y una parada que merece la pena hacer si también se tiene intención de conocer el Monasterio de Arkadi, uno de los más interesantes de la isla.
Margarites gira en torno a su iglesia del siglo XIV dedicada a San Juan Bautista (Agios Ioannis Theologos). Calles que suben y bajan, tabernas y fachadas en las que la veintena de artesanos del pueblo exponen sus obras. Hay objetos sencillos y más tradicionales, desde soles a pájaros. También se pueden ver y por supuesto adquirir otras obras más elaboradas y exclusivas.
Algunos alfareros trabajan en la propia tienda, lo que permite ver las técnicas utilizadas. Incluso si alguno se anima a practicar, se ofrecen cursos en algunos de los talleres. Para completar la visita, no puede faltar la parada en alguna taberna para tomar una cerveza fresca y algunos de los platos típicos de la gastronomía griega. Sin duda, un pueblo que forma parte de la lista de lugares que ver en Creta.
Spili, el pueblo más bonito cerca de Rethymno
Solamente 27 kilómetros separan Spili, uno de los pueblos más bonitos de Creta, de Rethymno. La ruta deja atrás la costa para adentrarse en las montañas. Es en ellas donde se encuentra Spili, rodeado de un paisaje que se puede contemplar desde varios puntos de la localidad.
En su calle principal llaman la atención las tabernas y las flores. Está claro que no hay pueblo griego que se precio que no se tiña de rosa gracias a las buganvillas. También en esa calle se encuentra el Monasterio de Spili. El acceso es gratuito y su iglesia suele estar abierta. Merece la pena pasear por el recinto para disfrutar de una buena panorámica de los alrededores.
Vamos, uno de los pueblos más bonitos de Creta
Entre La Canea y Rethymno se encuentra Vamos. Un pintoresco pueblo en el que se han conservado y restaurado varios edificios antiguos. Uno de ellos es precisamente el que ocupa la Oficina de Turismo. El lugar perfecto al que acudir en este pueblo para recabar información y solicitar un plano.
Vamos fue ocupado por los turcos, tras haber sido siglos antes tierra de piratas. La gente local no aceptó la presencia otomana y luchó por recuperar su libertad, algo que consiguieron en 1896. Su patrimonio, con edificios públicos que cuentan con elementos neoclásicos y elegantes casas, permite al visitante pasear por antiguas calles empedradas en las que, cómo no, crecen adelfas y buganvillas.
En el casco antiguo se pueden diferenciar sin esfuerzo las que fueron casas de ricos (conakia), grandes y elegantes, de las que pertenecían a los vecinos con menos recursos (kamarospita, casa de una habitación).
A tres kilómetros de Vamos no hay que dejar de visitar el Monasterio de San Jorge. Es un lugar tranquilo, cuidado, con una pequeña iglesia y unas atractivas ruinas en la parte que fue la almazara del monasterio. La entrada al edificio cuesta 2 € y junto al monasterio hay una zona de estacionamiento gratuita.
¿Te han gustado estos pueblos? Si conoces otro que debiera estar en esta lista, no te cortes y deja un comentario. Seguro que algún viajero toma buena nota de todas las sugerencias.