Qué ver en Fuerteventura: 26 lugares imprescindibles

La primera vez que visitamos Fuerteventura, hace varios años, volvimos un poco decepcionados a casa. Lo poco que vimos en ella nos pareció hostil. Su paisaje es el que imaginamos podrían tener la Luna o Marte. Sus playas nos parecieron fantásticas, aunque es cierto que el viento nos fastidió más de una día tumbados al sol. Pensamos que nunca íbamos a regresar, pero cosas de la vida, teníamos dos semanas de vacaciones a final de año y decidimos viajar a Lanzarote y aprovechar para conocer los lugares que ver en Fuerteventura y que no llegamos a visitar en aquel primer viaje.

En esta ocasión, la impresión con la que regresamos a casa ha sido muy distinta. Fuerteventura es hostil, árida, mal comunicada y ventosa. Pero todo ello, sin duda, la hace única. Solamente hay que aventurarse e ir un poquito más allá de los lugares más turísticos y trillados de la isla. Olvidarse de los complejos vacacionales de Corralejo o Morro Jable y aventurarse en el interior para descubrir pequeños y coquetos pueblos, conocer la historia de la isla y disfrutar de paisajes mágicos.

El encanto de esta isla no se encuentra solamente en los lugares que ver en Fuerteventura. Su gastronomía es sabrosa y saben como sacar el mayor provecho a los productos isleños. Las puestas de sol pueden convertirse en un momento inolvidable.

Los majoreros son gente amable, sencilla, siempre dispuestos a ayudar con una sonrisa en la boca. Nos han tratado tan bien que han hecho que nos sintamos en casa y nos han dejado con ganas de regresar. Porque aunque hemos hecho muchas cosas en la isla, aún nos han quedado algunos lugares que ver en Fuerteventura.

Para nuestra ruta por esta isla canaria hemos alquilado un coche, medio de transporte imprescindible si se quiere recorrer la isla sin depender de un transporte público con horarios y rutas escasos. Nosotros solemos alquilar con Auto Europe, un buscador que os permite comparar y reservar con las mejores tarifas.

Alojamiento en Fuerteventura

Si vuestra intención en conocer el mayor número de los lugares que ver en Fuerteventura sin pasaros el día metidos en el coche, os recomiendo reservar alojamiento al menos en dos lugares de la isla. Una en la mitad sur y otro en la mitad norte. Así lo hicimos nosotros y fue un acierto.

Os dejo aquí los lugares en los que nosotros nos alojamos por si os sirven de referencia.

• Hotel Rural Huerto Viejo. Un hotelito rural que es un oasis de tranquilidad. Está en la pequeña localidad de Tesejerague. Es un establecimiento sencillo pero cómodo, con una gran terraza común desde la que disfrutar del paisaje de Fuerteventura. Los dueños son encantadores y dan al viajero un montón de ideas sobre lugares menos turísticos para ver o para comer.
• Villa Shepherd Lajares. En el norte de la isla, muy cerca del Calderón Hondo, uno de los volcanes que ver en Fuerteventura, se encuentra esta moderna casa con elegantes habitaciones, piscina y una pequeña cocina de uso común para los huéspedes.

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Qué ver en el norte de Fuerteventura

No voy a negar que las playas de Fuerteventura son uno de sus grandes atractivos. Puede que muchos tengáis la intención de viajar a Fuerteventura precisamente por ello, para pasar unos días al sol tumbados en algunos de los mejores arenales de Europa. Es un plan perfecto, no tengo la menor duda. Pero lo cierto es que hay tantas playas, y tan buenas, que lo complicado puede ser decidirse solamente por una. Eso sí, los aficionados al surf podrán disfrutar de ese deporte en casi cualquiera de ellas.

Habrá también quien visite la isla y quiera aprovechar, además de para ponerse moreno, para conocer algunos de los lugares más atractivos que ver en Fuerteventura. Dependerá solamente de los días de estancia que se puedan visitar más o menos lugares pudiendo pasar también tiempo en la playa. Si ese es vuestro plan, una recomendación: alquilad un coche. El transporte público tiene horarios tan reducidos en algunos que puede ser verdaderamente complicado depender de él para desplazarse por la isla.

En nuestro caso, la intención era visitar todo lo posible en la isla. Hemos dedicado seis días completos a recorrerla. Puede que no nos haya dado tiempo a conocer todo lo que teníamos en la lista, pero nosotros somos cada vez más lentos cuando viajamos. Nos demoramos mucho haciendo fotos, paseando o descubriendo lugares menos conocidos.

Todo lo que os voy a recomendar a continuación sobre que hacer en Fuerteventura es lo que nosotros hemos podido hacer durante esos días. Con más rapidez puede que se puedan incluir más lugares en la lista. De todos modos creo que es una buena lista, y bastante completa, de cosas que merece la pena ver y hacer en esta isla. Y la mayoría de ellas, gratuitas.

Parque Natural de Corralejo

Vamos a empezar la lista de los lugares que ver en Fuerteventura por uno de sus lugares más emblemáticos: Corralejo. Nos os voy a hablar del pueblo, un lugar que ha crecido para dar servicio a los muchos turistas que allí se alojan. Nosotros tan solo pasamos por allí para coger el ferry a Lanzarote y rumbo a las dunas, las grandes protagonistas de este parque de arena.

Las Dunas de Corralejo se extienden desde la costa hacia el interior a lo largo de 10 kilómetros. Una carretera las atraviesa y no es raro verla cubierta de arena, por lo que es importante conducir con precaución. A un lado, dudas que se extienden hacia el interior. Al otro, dunas que llegan al mar. Un paisaje dorado digno de un desierto.

La zona más cercana a Corralejo es perfecta para disfrutar de la playa. Hay que estacionar el coche en el pequeño arcén y caminar muchos metros para llegar a la orilla. Pero aquí las dunas son pequeñas y es un paseo sencillo. Unos metros más al sur es donde comienza el espectáculo de este parque canario.

Hay un espacio de arcén algo más ancho cerca de la zona en la que las dunas alcanzan su mayor tamaño. Lo mejor es estacionar el coche, descalzarse y disfrutar del paisaje mientras se sube y se baja por esas formaciones de fina arena que pueden recordar a uno de los lugares más llamativos que ver en Gran Canaria: las dunas de Maspalomas.

Si no tenéis coche, desde lugares como Puerto del Rosario salen autobuses que hacen varias paradas en la ruta que lleva hasta Corralejo. También podéis reservar alguno de los tours que en un solo día recorren varios de los lugares que ver en Fuerteventura.

Pop Corn Beach, la playa de las palomitas

La conocida como playa de las palomitas se encuentra al norte de Fuerteventura, en un camino lleno de curvas y baches que discurre junto al mar y que llega hasta Corralejo. Pop Corn Beach se ha hecho muy famoso por su presencia en redes sociales, pero su nombre real no es el que la ha hecho popular. Realmente se llama Playa del Hierro y las “palomitas” que la han hecho famosa no son otra cosas que rodolitos, o lo que es lo mismo, los restos de unas algas calcáreas. Cada una de estas piedrecitas tarda años en formarse, de modo que recordad: haced todas las fotos que queráis, pero dejad las palomitas en la playa.

En cuanto a la playa en si misma, no es cómoda para tumbarse en ella, y la costa es rocosa. Por ello no es el mejor lugar para disfrutar del sol y las aguas del Atlántico en un típico día playero.

Majanicho, un pueblo pesquero que ver en Fuerteventura

Continuando hacia el oeste el camino que llega a la anterior playa, se alcanza un pequeño y típico pueblo de pescadores. Su nombre es Majanicho y os aseguro que merece la pena hacer una parada. Es un lugar de los más pintoresco, con sus sencillas viviendas al borde del mar y de pequeños acantilados. Las casas tiene puertas de colores y la arena alcanza incluso la puerta de la iglesia de la población. Las barcas descansan durante el día en la pequeña bahía de Majanicho y el pueblo es un verdadero remanso de paz, fotogénico y tranquilo.

También podéis llegar hasta Majanicho por la carretera desde Lajares, y en dirección oeste, continuar ruta por otro camino lleno de baches con magníficas vistas sobre el mar hasta alcanzar El Cotillo.

El Cotillo

Nosotros llegamos a este pueblo que ver en la costa oeste de Fuerteventura desde Majanicho. El camino no es bueno, pero si no se tiene prisa y sí ganas de disfrutar del paisaje, merece la pena hacer la ruta. También hay una buena carretera que llega hasta El Cotillo desde Lajares, por si alguno no tiene ganas de ir de bache en bache por el camino que nosotros hicimos.

El Cotillo es una agradable pueblo que antaño fue poco más que el hogar de pescadores. Hoy a crecido y el turismo ha llegado, pero de un modo muy diferente al que lo ha hecho a otros enclaves turísticos de Fuerteventura. En El Cotillo la mayoría de visitantes llega atraído por sus puestas de sol o bien por las playas y las olas. No en vano, esta localidad es un punto de reunión de surferos.

Al sur del tranquilo pueblo, que tiene bonitas tiendas y agradables restaurantes, hay un parking junto al Castillo El Tostón, que más bien es una torre. Es un buen lugar para dejar el coche y caminar a los miradores sobre los acantilados, desde los que se pueden vez, azotadas por las olas, las playas de El Cotillo y el Aljibe de la Cueva.

Calderón Hondo

Dejamos la costa y nos vamos hacia el interior para conocer uno de los lugares más impresionantes que ver en Fuerteventura: el volcán Calderón Hondo. Se trata del más famoso de los siete volcanes que forman la alineación del Bayuyo y el acceso hasta su cráter es bastante sencillo.

La ruta total, ida y vuelta, son unos cinco kilómetros. Todo el camino, que comienza al norte de la población de Lajares, junto a la carretera que lleva a Majanicho, está marcado. Solamente hay que llevar un calzado cómodo y tener en cuenta que al final de la ruta hay que subir escalones.

Una vez en lo alto se puede ver el interior de este volcán inactivo, cuya profundidad es de 70 metros. Vimos a algunos visitantes rodeando todo el perímetro del cráter. Nosotros nos aventuramos a recorrer unos metros, pero lo cierto es que no es sencillo, sobre todo si el viendo azota como el día que nosotros conocimos este lugar. Además, no hay que camino que valga. Se camina sobre las rocas y los restos de antiguas coladas, por lo que no es muy seguro (o a mi no me lo pareció).

La Oliva

Esta pequeña localidad al norte de la isla es una de las más bonitas que ver en Fuerteventura. Fue su capital en el siglo XIX y hoy presume de tener entre su patrimonio uno de los edificios más emblemáticos de la isla: la Casa de los Coroneles. Se trata de una construcción del siglo XVIII que fue la residencia de los coroneles que le dan nombre y que ejercieron durante décadas el dominio militar en Fuerteventura.

Actualmente esta mansión es un museo (entrada de pago) en cuyo interior se conservan elementos de la antigua vivienda, como el patio o la capilla. En las múltiples estancias se realizan exposiciones temporales que conviven con las permanentes. Una de estas últimas es un bonito homenaje a las mujeres ganadoras del Premio Nobel.

Otro lugar que merece la pena visitar en La Oliva es la Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria. Una construcción en la que su torre de piedra volcánica contrasta con la blancura del resto del templo.

Montaña de Tindaya

Termino la lista de lugares que ver en el norte de Fuerteventura con la montaña sagrada de Tindaya. Con sus 400 metros de altura, es la montaña con más importancia histórica de la isla. ¿La razón? En ella se han encontrado decenas de petroglifos aborígenes, algunos de los cuales representan huellas que parecen dirigirse hacia el Teide, uno de los lugares imprescindibles que ver en Tenerife.

Aunque un sendero conduce hasta la cima, actualmente está prohibido el acceso a la montaña. Basta acercarse a ella para empezar a ver carteles que informan sobre esta prohibición. No hay que desesperar, pues aunque no se pueda subir a la montaña de Tindaya, si que merece la pena verla al menos en la distancia. En concreto desde el Mirador de Vallebrón. Hay una carretera hasta su aparcamiento, y desde allí unos metros cuesta arriba llevan hasta el mirador que regala unas preciosas vistas del montaña sagrada con el océano al fondo.

Puerto del Rosario

La capital de la isla no es el lugar más atractivo que ver en Fuerteventura. Son pocos los que se animan a dedicar unas horas a recorrer la ciudad. Nosotros decidimos pasar en ella una tarde y la verdad es que me pareció una agradable visita. No es una ciudad de visita imprescindible, pero el arte urbano que decora algunos muros de la ciudad, las esculturas que acompañan a los viandantes en el paseo marítimo o el recuerdo a personajes relacionados con la capital la hacen más atractiva de lo que nosotros pensábamos.

La zona más animada y cuidada de Puerto del Rosario es la que rodea a la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, cerca de la cual hay algunos edificios con historia, como el antiguo Hotel Fuerteventura, lugar en el que se alojó Unamuno durante el tiempo que pasó en la ciudad tras ser desterrado por sus críticas a Alfonso XIII y a Miguel Primo de Ribera.

Qué ver en el centro de Fuerteventura

Al desplazarnos hacia el centro de esta isla canaria es fácil apreciar un cambio de paisaje. Alrededor de Betancuria aparecen las montañas que terminan en acantilados junto al mar. Un poco más al sur, la Vega del Río Palmas y la localidad de Pájara tiñen de verde esta isla desértica. Y la costa de la parte central de Fuerteventura está salpicada de pequeño pueblos pesqueros y playas de arena negra que poco tienen que ver los arenales del norte o el sur majorero.

Pájara, un oasis que ver en Fuerteventura

Tanto para ir hacia Betancuria o Ajuy, lugares de los que luego os hablaré, hay que pasar por Pájara. ¿Merece la pena hacer una parada? Sí, sin ninguna duda. Después de circular por carreteras rodeadas de un paisaje inhóspito, llegar a esta localidad del centro de Fuerteventura es como llegar a un oasis.

Buganvillas y palmeras tiñen de color a Pájara. Algo que invita a dar un paseo por sus calles en las que se conservan algunas casas con los típicos balcones canarios. Aunque los más destacado del pueblo es la Iglesia de Nuestra Señora de Regla, situada frente al Ayuntamiento y una antigua noria de tiro. Hay que fijarse en la portada de la iglesia, en la que no es difícil distinguir decoración de inspiración azteca.

Mirador del Risco de las Peñas

Desde Pájara hay una carretera, la FV-30, que lleva hasta Betancuria. A medio camino, en el punto que una puerta de piedra señala el final de un municipio y el comienzo de otro, se encuentra el Mirador del Risco de las Peñas. Uno de los lugares más espectaculares que ver en Fuerteventura. Tanto como la propia carretera, llena de curvas, que sube y baja entre volcanes y campos de lava mientras al fondo se ve el mar.

La mejor forma de disfrutar de ese paisaje es hacer una parada en este mirador. Allí, rodeados de cuervos y ardillas (no hay que darlas de comer, pues se han convertido en una verdadera plaga), se disfruta de unas de las panorámicas más bonitas de esta isla que con cada nuevo lugar que visitamos nos fue conquistando más y más.

Betancuria, el pueblo más bonito que ver en Fuerteventura

Esta diminuta localidad está considerado uno de los pueblos más bonitos de España. Puede parecer algo artificial de tan perfecto como es y por la sensación de que por allí solamente pasan turistas, que no viviera nadie en esas cuidadas casas. Blanco, limpísimo y perfecto para recorrer a pie, Betancuria es sin duda uno de los lugares más atractivos que ver en Fuerteventura.

Fue capital de la isla y el nombre le vino dado por su fundador, Jean de Béthencourt. Hoy un paseo por sus calles permite conocer algunas de las antiguas construcciones de la localidad, tales como el Ayuntamiento, antiguas casonas ocupadas hoy por restaurantes o la magnífica Iglesia de Santa María, en la plaza del mismo nombre. Hay también un par de museos en el centro y varios restaurantes. A las afueras de Betancuria, junto a uno de los aparcamientos (no se puede circular por el centro del pueblo), se encuentran la Ermita de San Diego y los restos del Convento de San Buenaventura.

Mirador Corrales de Guize

Circulando por la FV-30 hacia el norte, se llega a un mirador doble. Hacia un lado se puede ver el paisaje interior de Fuerteventura. Hacia el otro, las laderas de las montañas que rodean Betancuria y el océano. Las vistas son buenas (si el día está despejado, nosotros lo pillamos nublado y desmereció un poco).

Puede en cualquier caso que lo más destacado de este mirador sean las grandes esculturas de Guise y Ayose, reyes de Maxorata y Jandía, reinos enfrentados en los que estuvo dividida Fuerteventura hace siglos. Hoy ambos gobernantes aparecen unidos en este mirador como lo estuvieron para defender sus tierras de la conquista de Juan de Bethencourt y de Gadifer de la Salle, ante los que finalmente tuvieron que rendirse.

Antigua

No muy lejos del anterior mirador está Antigua, otra de las ciudades que fue capital de Fuerteventura. En este caso, en el siglo XVIII y solamente durante un año. Merece la pena hacer una parada para visitar la blanca Iglesia de Nuestra Señora de Antigua, una de las más antiguas que ver en Fuerteventura. Si la visitáis, fijaros en la columnas que sujetan el coro: son de toba volcánica.

Otro de los lugares que se pueden visitar en Antigua es el Museo del Queso Majorero. Nosotros tuvimos dudas sobre si ir o no. Pero la lluvia nos animó a ponernos a resguardo, y tenemos que agradecérselo. La entrada cuesta 4 € y en su interior hay distintas exposiciones que acercan a la naturaleza de la isla y a todo lo relacionado con el queso majorero, una de las delicias de Fuerteventura. También hay un molino al que se permite el acceso y un fantástico jardín de cactus.

Arco de las Peñitas

Uno de esos lugares a los que de momento no es sencillo llegar pero que se están haciendo populares en las redes sociales, es el Arco de las Peñitas. Se trata de una formación rocosa esculpida por el paso del tiempo. Los materiales con los que está compuesto el arco y las rocas que los rodean se consideran de los más antiguos de las Canarias. Parece ser que se formaron en la profundidad del océano hace más de 100 millones de años, cuando las islas aún no habían salido a la superficie. Esta zona es popular entre los escaladores, y no es raro verlos subiendo alguna de las paredes cercanas al arco.

Hay dos opciones para llegar a este arco. Una de ellas es hacer la ruta de la Vega del Río Peñas a pie, en dirección al Barranco de las Peñitas. Es larga, pero llega a un camino que discurre desde la ermita encaramada en las rocas hasta las cercanías del Arco de las Peñitas. La otra opción es ir en coche por la FV-627 desde Pájara a Ajuy, desviándose hacia Buen Paso.

Al final del camino hay un parking y desde allí hay que caminar intuyendo el camino y siguiendo las pisadas de otros visitantes. Y cruzar los dedos para dar con el lugar, que a nosotros nos costó muchísimo, incluso vimos a gente que abandonaba sin localizar el lugar. Eso sí, hay que ir dispuesto a hacer un poco la cabra para subir las rocas y soportar las miradas de esos animales que te miran sin saber que narices haces allí.

Ajuy y sus cuevas junto al océano

Uno de esos pueblos de pescadores que se pueden ver en el centro de Fuerteventura es Ajuy. Un lugar tranquilo, con barcas en las calles, un playa de arena volcánica y unos impresionantes acantilados. Se accede a estos últimos desde la misma playa, y en recorrido de unos 20 minutos se pasa ante distintas formaciones rocosas y antiguos hornos de cal antes de llegar a unas impresionantes cuevas entre los acantilados. Se puede acceder a ellas si la marea está baja.

Qué ver en el sur de Fuerteventura

En el sur de Fuerteventura vuelven a ser protagonistas las grandes playas. Tanto en la parte occidental como en la oriental se pueden ver algunas de las mejores playas de Canarias. En esta zona de la isla hay varias zonas muy turísticas, debido sobre todo a la presencia de esas magníficas playas. Sin embargo, en el centro, es una de las zonas más tranquilas para alojarse en Fuerteventura y sentirse lejos del turismo de masas.

Mirador de Sicasumbre

Si estando en Fuerteventura solamente tenéis tiempo para visitar uno de sus muchos miradores, intentad que sea este.  Se encuentra en mitad de uno de los paisajes montañosos más espectaculares que ver en Fuerteventura. La ruta para llegar hasta este mirador es impresionante por si sola, y una vez en el mirador, uno no sabe hacia donde mirar. Desde los 300 metros de altura a los que está el mirador se ve un mar de montañas ondulantes que se llegan hasta el océano. Un paisaje tan yermo como bello.

Además, para los aficionados a la astronomía, este mirador es el lugar perfecto en Fuerteventura para contemplar el firmamento. No en vano, la gente de la isla llama a este lugar el “mirador de las estrellas”. Hay paneles que ayudan a localizar las estrellas, y para aquellos que acuden con sus propios telescopios, los soportes necesarios para instalarlos y poder disfrutar de un cielo con muy poca contaminación lumínica.

La Pared

Fuerteventura está llena de lugares para ver la puesta de sol. Uno de nuestros preferidos está en la playa de La Pared. Allí se congregan durante el día un buen número de aficionados al surf que disfrutan de esta playa rodeada de acantilados en la que se mezclan las rocas con fina arena dorada y también con arena más gruesa y oscura.

La roca a la derecha de la playa es un espigón natural con una superficie plana que la hace perfecta para contemplar los alrededores, sentir el sonido del mar al batir contra las rocas y sentarse a ver como el sol se oculta por el horizonte. Eso sí, lo de bañarse mejor olvidarlo. Hay muchas corrientes en esta playa, por lo que mejor dejar lo de remojarse para otras aguas más tranquilas y seguras.

Playas de Jandía, grandes playas que ver en Fuerteventura

En la península de Jandía, en el sur de Fuerteventura, se encuentran algunas de las playas más atractivas de Canarias. Las conocidas como playas de Sotavento son de auténtica postal. Arena fina y dorada, aguas transparentes y tranquilas que bien podrían estar en alguna de esas playas del Caribe con las que tantos sueñan. Lo único malo de estas playas de Jandía es el viento. No en vano, aquí se celebra el Campeonato del Mundo de Windsurfing y Kitesurfing. Si eres aficionado a este deporte, ya sabes donde practicarlo en Fuerteventura.

Estas playas son geniales para disfrutar del mar, pero si quieres acercarte sólo a verlas, hay varios miradores que ofrecen vistas desde diferentes perspectivas. Para mi el mejor de ellos es sin duda el Mirador del Salmo. Cuenta con un pequeño aparcamiento junto a un bonito banco de colores. Desde allí la perspectiva es buena, pero si caminas hacia el mar, las vistas irán cambiando y podrás contemplar la laguna de Jandía y la lengua de arena dorada que se adentra en el mar. Una maravilla, os lo aseguro.

Faro de Punta de Jandía

Dejando atrás las playas de Jandía y la turística localidad de Morro Jable se llega a una camino de tierra que atraviesa uno de los parajes más bonitos que ver en Fuerteventura. A la izquierda, el mar. A la derecha, las montañas tras las que se esconde uno los lugares más espectaculares de la isla y del que luego os hablaré.

En un punto del camino, éste se bifurca. Hay que continuar por el que lleva hacia la costa, pasar junto a un pequeño pueblo de pescadores con una gran zona ocupada por caravanas, y continuar hacia el faro que se ve al final del camino. Es un lugar en el que las olas embravecidas rompen contra los acantilados y el viento puede llegar a ser insoportable. A pesar de todo, merece la pena acercarse a este punto, sobre todo para ver la puesta del sol. Eso sí, no hay que demorarse mucho en regresar porque el camino sin luz no es sencillo para circular por él.

Cofete, el lugar más espectacular que ver en Fuerteventura

Este es el lugar del que antes os decía que es uno de los más espectaculares de Fuerteventura. El camino que lleva hasta sus playas es complicado, lleno de curvas junto a precipicios, baches y tramos demasiado estrechos. No hay duda de que es parte de la aventura que supone llegar a Cofete. Tras una de las muchas curvas de este camino no podréis evitar parar. No tiene pérdida, es uno de los pocos tramos más anchos, en lo alto de los acantilados. Incluso desde el coche las vistas son de dejar con la boca abierta.

Al final del camino se llega al pequeño pueblo de Cofete en el que viven un puñado de personas. Allí hay algún restaurante y nuevos caminos que llevan a tres lugares que ver en Cofete: la magnífica playa, el cementerio y la Villa Winter. El sendero que lleva a los dos primeros no es demasiado malo y termina en una zona de aparcamiento. El que lleva a Villa Winter no puede ser peor. Los baches pasan a ser socavones y hay que tener paciencia para recorrer los metros que llevan hasta esta casa con una oscura historia.

Villa Winter

El misterio rodea a esta mansión construida en Cofete, con vistas al mar y a la sombra de las montañas. La construyó el ingeniero alemán Gustav Winter. Hay quien dice que estaba terminada en 1939. Otros aseguran que no se edificó hasta 1946. Estos últimos aseguran que Winter quería implantar la agricultura en la región. Los primeros sin embargo defienden que esta mansión fue escondite para los nazis y aseguran haber encontrado diversos objetos que dan fe de ello.

Nosotros nos animamos a visitar esta casa y la familia que reside en ella nos la mostró. Nos fueron explicando temas sobre la construcción y comparando ciertas estancias con otras de campos de concentración nazis. La verdad es que el parecido es más que razonable. Incluso nos enseñaron los sótanos de la casa. Fue tanta la información recibida que casi nos creemos que hay submarinos baja la casa. No sabemos si será verdad o no, creo que hay que conocer el lugar, escuchar los datos y luego decidir en que se cree: en la casa de agricultores o en la mansión de los nazis.

Qué ver en Fuerteventura: Molinos

Con el viento que hay en Fuerteventura, no podían faltar los molinos. Se cree que se número alcanza los 1.000, un número nada desdeñable. A lo largo y ancho de la isla se pueden ver en diferentes estados de conservación. También los hay de diferentes tipos, ya sean para sacar agua, moler grano o generar energía. Solamente hay que fijarse para encontrar al menos uno de cada tipo.

Aeromotores

Estos molinos se pueden ver en toda la isla. Siendo Fuerteventura un lugar en el que llueve poco, es necesario excavar pozos. Sobre ellos se colocan los aeromotores que con la fuerza del viento (de eso no falta en esta isla canaria) consiguen sacar de la tierra hasta 150 litros por minutos. Los hay con palas de chapa, de doble circunferencia y algunos artesanales. Seguro que os recuerdan a los que salen en algunas películas americanas.

Molinas

Las molinas son unas construcciones dedicadas al molido del grano, pero con una estructura más sencilla que los tradicionales molinos, ya que todo se encuentra en una sola planta. La idea de estas molinas data del siglo XIX y tienen una ventaja evidente para el molinero: al estar todo en un solo nivel, se evita tener que subir y bajar escaleras cargado con los granos de cereales. Nosotros vimos una molina en Valles de Ortega, junto a la carretera. Qué yo sepa, hay otra en Tefia.

Molino de Tefia

Se trata del molino más icónico que ver en Fuerteventura. Ha sido restaurado con mucho acierto, manteniendo la estructura interior similar a los algunos molinos manchegos, como pueden ser los de Consuegra o Campo de Criptana. Sus seis aspas le hacen inconfundible y no hay duda de que es uno de los lugares más fotogénicos de la isla.

Molinos de Villaverde

Otro lugar muy pintoresco es Villaverde, con la silueta de sus dos molinos recortándose en el horizonte. Este pueblo está cerca de La Oliva y cuenta con algunos de los mejores restaurantes de Fuerteventura. De modo que si os acercáis a ver estos bonitos molinos de cuatro aspas, podéis aprovechar y comer en la zona.

Parques eólicos

Siendo Fuerteventura una isla tan ventosa, no es raro que en ella se hayan levantado varios parques eólicos con esos altísimos molinos que forman ya parte del paisaje de tantos lugares de la geografía española. Uno de estos parques está muy cerca de Corralejo, y en los alrededores de Puerto del Rosario, se está construyendo otro. Sin duda no son los molinos más atractivos de la isla, pero también forman parte de la lista de molinos de Fuerteventura.

Mapa de los lugares que ver en Fuerteventura