Qué ver en Chinchón en 1 día

Dónde está Chinchón

Chinchón, a 40 kilómetros de la capital, forma parte de la llamada Comarca de las Vegas. Un territorio fértil y de marcada tradición agrícola en el sureste de la Comunidad de Madrid. En total son 23 los municipios que engloba esta comarca, algunos de ellos tan conocidos como Aranjuez o Villaconejos.

Si quieres saber cómo llegar a este pueblo, en el siguiente post tienes toda la información: De Madrid a Chinchón

Historia de Chinchón (breve)

Aunque existen pruebas de que los primeros habitantes de este lugar llegaron en el Neolítico, la fundación de esta localidad se atribuye a los árabes. Durante más de tres siglos, estuvo esta población bajo la dominación musulmana.

Los Reyes Católicos estuvieron varias veces en Chinchón y entregaron el señorío a los Marqueses de Moya en señal de agradecimiento por su apoyo en la batalla por el trono entre Isabel la Católica y Juana la Beltraneja. A esta última la apoyaron y protegieron en otro pueblo no muy lejos de Madrid, en la provincia de Toledo, que bien merece una visita: Escalona.

Otro rey, Felipe V, concedió en 1739 a Chinchón el título de “Muy noble y muy leal” por el apoyo recibido durante la Guerra de Sucesión. Desde entonces, este título aparece en el escudo de armas de la localidad.

Ya en siglo XX, gracias a su historia y los lugares que aún podemos ver en Chichón, se declaró su centro Conjunto Histórico Artístico.

Qué ver en Chinchón (Madrid)

Chinchón tiene fama de buena mesa. Los productos de su huerta son de calidad, también hay buenas legumbres y sus calles huelen a pan y asado. Con esa introducción no hay duda de que a Chinchón, además de ir a ver, se va a comer. Por esa razón cada fin de semana este pueblo madrileño se llena hasta la bandera, es complicado encontrar un lugar en el que aparcar y hasta un restaurante para comer.

A pesar de ello, merece y mucho la pena acercarse a pasar el día y recorrer la localidad callejeando en busca del puñado de lugares de interés que ver en Chinchón. Y lo hagáis como lo hagáis, aquí todos los caminos no llevan a Roma, llevan a su Plaza Mayor, el mayor atractivo de esta localidad famosa por su aguardiente y por sus ajos.

Plaza Mayor, imprescindible que ver en Chinchón

La plaza de Chinchón es una de las más bonitas y singulares de España. Ocupa el centro urbano y a lo largo de los siglos ha sido testigo de mercados, fiestas, corral de comedias, ejecuciones y visitas reales. Hasta podemos verla en alguna película, y es que ni el cine se ha podido resistir al encanto de esta plaza que ver en Chinchón.

Hoy la plaza sigue siendo lugar de reunión, pero sobre todo de visitantes. Y no es de extrañar pues muchos de los edificios de la plaza alojan bares, restaurantes y tiendas. Pero aunque uno vaya a Chinchón a disfrutar de la gastronomía, no puede dejar de prestar atención a esta plaza rodeada de edificios de distintas épocas, con soportales y balcones (más de 200, conocidos con el nombre de claros) que son perfectos miradores, algunos de ellos ocupados por las meses de los restaurantes.

En la Plaza Mayor de Chinchón se encuentra también el Ayuntamiento, un edificio del siglo XV. A su lado, la Oficina de Turismo. Aunque no tengáis intención de pedir información, entrad al patio en el que se encuentra. Allí están los antiguos lavaderos de la localidad.

Tened en cuenta que no siempre se puede disfrutar de la mejor vista de la plaza, pues durante los festivales taurinos, la Plaza Mayor de Chinchón se convierte en plaza de toros, lo que cambia el aspecto del lugar. En Semana Santa es el escenario de La Pasión de Cristo y cada año se celebra en ella un mercado medieval.

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción

Dominando la Plaza Mayor y la localidad, se puede ver esta iglesia. Sus obras comenzaron a mediados del siglo XVI siendo el arquitecto a cargo de la obra Alonso de Covarrubias. Sin embargo, la obra quedó paralizada varias décadas (algún problema económico debió haber) hasta que a finales de siglo, el Conde de Chinchón contrató a los maestros que habían participado en la construcción del Monasterio de El Escorial para finalizar la iglesia. Alguno puede pensar que no la terminaron del todo, que siendo de tal tamaño e importancia, al menos debería tener un campanario. Más abajo os cuento la razón de esa ausencia.

Cómo curiosidad, contaros que en el altar mayor de esta iglesia que ver en Chinchón hay un cuadro de Goya. El artista lo pintó por petición de su hermano Camilo, que era el capellán del templo.

Torre del Reloj

Antes os comentaba la ausencia de campanario en la Iglesia de la Asunción. Pues bien, la respuesta está en esta torre del reloj. En su momento perteneció a la que fue la iglesia más antigua de Chinchón, la de Nuestra Señora de Gracia. Fue destruida durante la Guerra de la Independencia, pero la torre quedó en pie, por lo que se convirtió en el campanario de la cercana iglesia. Ha sido restaurada en varias ocasiones y el reloj que la da nombre se instaló en el siglo XVIII.

Convento de los Agustinos

Este convento que podemos ver actualmente en Chinchón fue fundado en el siglo XVII por los Condes de Chinchón, y en él se alojó durante unos días el Archiduque Carlos durante la Guerra de Sucesión. El edificio, probablemente uno de los más bonitos de Chinchón, aloja hoy el Parador de Turismo, por lo que una gran parte del convento está cerrado a los visitantes. Eso no quiere decir que no se pueda entrar. Aunque solamente sea para ver su claustro merece la pena entrar a tomar un café o una copa de vino ya sea en el  propio patio o en los salones interiores abiertos a los que no están alojados en el Parador.

La puerta al antiguo convento está en una pequeña plazoleta, y a su izquierda se puede ver (si con suerte está abierta) la Ermita de Nuestra Señora del Rosario, que fue antigua iglesia del convento.

Casa de la Cadena

A pocos metros del Convento de los Agustinos de Chinchón se puede ver este edificio barroco. Aquí se alojó Felipe V en 1706 a su paso por la localidad durante la Guerra de Sucesión. El nombre de la casa viene dado por una cadena que hay junto a la puerta principal. Dicha cadena se utilizaba para indicar que en la casa había alguien importante (supongo que reyes, condes, marqueses o similares).

Castillo de los Condes, otro lugar que ver en Chinchón

Alejado del centro de la localidad, el Castillo domina Chinchón desde su construcción, a finales del siglo XV. Fue destruido pocos años después y sobre esos cimientos el Conde de Chinchón decidió levantan una nueva fortaleza. Ésta se mantuvo en buen estado hasta que sufrió primero la consecuencias de la Guerra de Sucesión y más tarde de la Guerra de la Independencia, durante la cual Chinchón sufrió tres días de asedio.

El castillo terminó muy mal parado y sus piedras se utilizaron para reparar casas y caminos. Ha servido como almacén y fábrica de licores, estando hoy cerrado al público por ser una propiedad privada. En cualquier caso, merece la pena acercarse hasta él, pues su exterior presenta un estado aceptable y las vistas de Chinchón desde allí son muy atractivas.

Calles que ver en Chinchón

La verdad es que Chinchón es un pueblo sencillo, con cuestas, casas blancas y antiguas fincas que parecen olvidadas por el tiempo o que se han convertido, cómo no, en lugares de ocio y restauración. No hay una calle que llame especialmente la atención, pero merece la pena alejarse de la famosa plaza del pueblo y callejear sin rumbo. Es la mejor forma de olvidarse por un rato de la cantidad de gente que se reúne alrededor de los principales lugares que ver en Chinchón y acercarse a la vida cotidiana del pueblo. Es fácil encontrar aquí o allá un mirador sobre la localidad que permita disfrutar de una buena vista y de ese encanto que tienen tejados y chimeneas.

Alojamiento en Chinchón

Si además de disfrutar de los lugares que ver en Chinchón y de sus buena gastronomía queréis conocer el cercano y también interesante pueblo de Colmenar de Oreja, os animo a pasar una noche en esta localidad madrileña.

El hotelito Condesa de Chinchón es una buena opción para dormir en el pueblo. Tiene buenos precios, cuidadas habitaciones y parking privado. Si el presupuesto no es problema, el Parador de Chinchón es un magnifico lugar para hacer noche en este pueblo madrileño. Aquellos que prefieran un apartamento, Casa de las Lías tiene varias opciones con capacidad para hasta 5 personas.

Dónde comer en Chichón

Ya os decía al comienzo del post que son muchos los que cada fin de semana se desplazan hasta Chinchón para disfrutar de una buena comida. Son bastantes los restaurantes que podéis encontrar no sólo alrededor de la Playa Mayor. Casi en cualquier calle de la población encontraréis un lugar para comer. Algunos tienen cuevas, otros agradables patios y muchos, mesas en los balcones.

Muchos de estos restaurantes ofrecen menús con precios que pueden oscilar entre los 18 y los 25 €. No es mal precio, pero yo, por mi experiencia, no me atrevo a recomendar ninguno de esos lugares porque ninguno me ha parecido especial.

Yo os dejo aquí dos recomendaciones, ninguna de las dos está entre las opciones económicas para comer en Chinchón, pero ambas son acierto seguro. La primera serían los restaurantes del Parador de Chinchón. En uno de ellos se sirve la comida tradicional de la localidad, desde asados a un delicioso pisto manchego. En el otro restaurante del Parador, El Bodegón, se puede probar el cocido de taba, un plato de cuchara en el que se mezclan legumbres, carnes, verduras y hasta cangrejos de río.

Mi otra recomendación es el Café de la Iberia. Uno de los mejores restaurantes para comer en Chinchón que ocupa una casa del siglo XIII. Cuenta con distintos salones, uno de ellos en el antiguo patio con columnas de la casa. No faltan en este restaurante las mesas en esos balcones sobre la plaza. Su cordero es fabuloso, así como su ensalada de pimientos, su morcilla o su cocido. Eso sí, imprescindible reservar.

Qué comprar en Chichón

Durante vuestro paseo en busca de los lugares que ver en Chinchón seguro que pasáis ante una casa en cuya puerta hay un cajón o una carretilla llena de ajos, uno de los productos más típicos de este pueblo madrileño. Si queréis comprar ajos, no paséis de largo: ahí están a al venta.

Y para los golosos, Chinchón es una tentación. Son famosas las pelotas de fraile y las tetas de novicia (nombres para algunos quizá algo irreverentes) se pueden comprar en La Dulcería de la plaza. También se pueden comprar dulces típicos en las panaderías. Una de estas últimas es muy famosa por esos panes que fabrican que parecen más bien esculturas que algo para comer. Merece la pena verlas expuestas. Sólo tenéis que buscar al panadería Manuel Vidal, en la Plaza Mayor. Igual volvéis a casa con un pan debajo del brazo.